vainilla boy || minsung

3

después de veinte largos minutos esperando el timbre por fin se hizo oír por todo el lugar.los estudiantes guardaron rápidamente sus pertenencias y salieron corriendo de sus respectivos salones. ese día jisung fue el primero en desaparecer.

minho esperaba pacientemente a jisung afuera de su salón. algunas personas le lanzaban miradas de miedo y otras simplemente lo evitaban, nunca le importó, ya estaba acostumbrado. cuando el timbre por fin sonó la puerta del salón de jisung se abrió de golpe y el menor salió disparado de ahí. notó que minho lo miraba asustado por haber salido como animal salvaje y el simplemente sonrió avergonzado.

—b-buenas, estaba algo apresurado.— minho soltó una gran carcajada y negó con la cabeza.

—lo noté.— jisung miraba embobado la sonrisa de minho. miró a todos lados cerciorándose de que nadie más la hubiera visto.— ¿nos vamos?

—ah, sí.

ambos caminaron juntos hasta la salida sin decir ninguna palabra. el camino de regreso fue igual, ambos parecían perdidos en su propio mundo.

jisung intentaba con todas sus fuerzas pensar en algo interesante para hablar con minho, mientras que el contrario escondía sus nervios exitosamente.

—¿t-tienes hermanos?— la pregunta tomó por sorpresa a minho. estaba cómodo con el silencio y podía terminar respondiendo alguna estupidez producto de los nervios.

—un hermano mayor, ¿tú tienes?— jisung negó con la cabeza.

ahí terminó su primera conversación volviendo a ese extraño silencio. la verdad jisung tenía muchas cosas que preguntar, pero estaba siendo sorpresivamente tímido. tal vez se debía a la presencia imponente de minho, porque cuando conoció a changbin nunca se sintió de esa manera.

mientras seguían caminando en silencio, finalmente llegaron al parque que separaba sus caminos, pero minho no se detuvo y siguió caminando en la dirección contraria a su casa.

—¿no irás a casa?

—puedo acompañarte hasta la tuya si quieres.—jisung asintió frenéticamente ante la idea del mayor y siguieron su camino. por alguna razón estaba tan emocionado en ese momento que incluso olvidó tomar su cajita de leche de vainilla, quedando ésta olvidada en su bolso.

a pesar de lo iluminados que se sentían sus corazones, el día estaba bastante nublado, definitivamente iba a llover, pero en ese momento ninguno de los dos prestó atención a las gotas que comenzaban a caer, notaron que algo andaba mal cuando el cabello de minho se pegaba a su frente. ambos despertaron de su mundo y corrieron a refugiarse del agua.

—¡mi casa queda cerca!

—espera jisung.— antes de que el menor siguiera avanzando, minho se quitó la chaqueta y la puso sobre la cabeza de jisung, disminuyendo así su riesgo de mojarse.

—te vas a enfermar...

—no es así, soy bastante fuerte.—jisung asintió poco convencido y siguieron su camino.

—si tu lo dices... pero si te enfermas yo mismo iré a cuidarte.— dijo bromeando.

—espero enfermarme...— minho se tapó la boca luego de decir eso porque,
supuestamente, solo lo había pensado. para fortuna suya el menor iba muy concentrado intentando no mojarse como para oír lo que había soltado sin pensar.estuvieron corriendo por al menos cinco minutos hasta que llegaron a su destino.

jisung buscó en su bolso las llaves y abrió la puerta mientras le indicaba al mayor donde dejar sus zapatos.

—¡mamá, ya llegué!— el mayor dió un pequeño brinco en su lugar al escuchar a jisung llamando a su madre, la cual llegó casi de inmediato.