La historia de un héroe y su sacrificio

Capitulo 1: Primer paso

El día de la prueba de admisión de la U.A. Era una hermosa mañana el sol brillaba, un joven se preparaba para dar el primer paso y cumplir su sueño de ser un héroe. Muy animado bajo al comedor donde se encontraba su madre esperándolo para desayunar.

Buenos días mamá- Saludo el muchacho con una gran sonrisa mientras se sentaba en la mesa para empezar a comer con muchas ganas.

Emm.. si, buenos días Izuku- Dijo esta para empezar a comer con algo nerviosismo. Inko Midoriya miraba a su hijo bastante preocupada ¿y como no estarlo? si durante casi todo un año no habían tenido una conversación, durante estos últimos meses su hijo se había inscrito a una especie de curso de orientación para aspirantes a héroes, donde este le contó que se les daba a los jóvenes una idea de lo que sería estudiar para ser héroes y prepararse para entrar a una academia, ella apoyo con gusto la decisión de su hijo, ademas el curso era gratuito y pensó que seria una buena manera para que este se despejara del incidente del villano que ataco a Kasumi Bakugou.

¿Pasa algo mamá? Me estas mirando muy fijamente- Sin embargo cuando empezó a tomar ese curso empezó a pasar bastante menos tiempo en casa, el joven Midoriya se iba al curso apenas terminaba la escuela y no regresaba a casa hasta las 10:00PM, durante los fines de semana este ni siquiera pasaba tiempo en casa se marchaba los días viernes y no regresaba hasta el domingo por la noche y eso la hacia sentir muy solitaria, desde el día del incidente el joven de cabello rizado se había distanciado mucho de su madre causándole tristeza.

No, no es nada Izuku- Pero ella no podía decirle como se sentía, gracias a ese curso su hijo sonreía de la misma forma en la solía hacerlo cuando era pequeño, antes de que sus sueños fueran cruelmente destruidos a la temprana edad de 4 años, su hijo realmente se veía feliz y no quería interponerse en su camino, ya era bastante malo que este no tuviera oportunidad de ser un héroe, no podía arrebatarle sus ultimas esperanzas por mas solitaria que se sintiera.

Estuvo muy delicioso el desayuno mamá ¡Me siento con suerte!-  Decía Izuku muy animado mientras recogía su plato para dejarlo en el fregadero.

Es hora de que me marche- Dijo este girando la perilla de la puerta de su casa.

¡Espera Izuku!- Inko tomo a su hijo de su mano para detenerlo.

Yo... quiero que sepas que no importa lo que pase hoy, lo importante es que hiciste tu mejor esfuerzo a pesar de todo- Dijo esta con los ojos algo llorosos.

¡tsk! No des por sentado que voy a fallar tan pronto- Susurro molesto para abrir bruscamente la puerta.

¿Eh? ¿Izuku?- Sorprendida soltó la mano de su hijo mientras este le daba la espalda. Inko podía ver claramente la silueta de su hijo ante la luz del sol, no lo había notado antes pero la musculatura de su hijo aumento bastante durante estos 10 largos meses ¿Había estado haciendo ejercicio? Si bien antes se notaba que era alguien atlético ahora se veía mas fornido que antes.

De frente Izuku Midoriya era el dulce muchacho al cual su madre había criado con mucho cariño, con sus grandes ojos y su pequeño rostro pecoso se veía adorable, pero cuando este le daba la espalda ella se sentía intimidada, como si detrás de el se manifestara algo que hacía que la agradable atmósfera de su hogar se volviera pesada y sombría, mas ahora que este parecía estar molesto por las palabras de su madre. Era como si un gran peso se encontrara sobre los hombros de su adorado hijo.

¡Taxi!- Una voz ronca saco a ambos madre e hijo de la incomoda situación. Un gran auto negro se estaciono frente a la casa de los Midoriya.

¡Ah! ya llego, nos vemos mamá, deseame suerte- Dijo este emocionado mientras se subía al vehículo.

Si, nos vemos Izuku- Inko estaba todavía bastante incomoda por lo que había ocurrido, pero cuando iba a cerrar la puerta de la casa, su mente fue invadida por la sorpresa, la perilla se veía algo deformada, tenia ¿marcas de balas? ¿pero como? La peliverde se acerco para examinarlas mas de cerca, pero lo que vio solo la dejo mas impactada de lo que ya estaba, las marcas tenían huellas digitales.