Cap. 12
Narra Adila.
Estaba en shock, mis ojos no podían creer lo que veían; un sudor frío se apoderó de mi frente y con el un escalofrío se hizo presente.
Las lágrimas no tardaron en salir, lo que había en esa caja nos había dejado petrificados. Era como si el alma hubiera dejado nuestros cuerpos, nadie decía nada.
El silencio había reinado...
Y una vez más el terror se hizo presente. Noah se había encargado de abrir la tapa de la caja, sin saber a lo que se enfrentaría luego.
Un sentimiento amargo y preocupante se hizo presente, o como él lo describió "Una sorpresa preocupante" y con eso los nervios llegaron.
Nunca nos imaginamos que él contenido de aquella caja perfectamente blanca escondía algo que nos robaría el sueño por varios días o por lo menos así me pasó.
En la caja se encontraba un sobre rojo, que al abrirlo nos encontramos algo aterrador...
Eran fotos pero no de cualquier tipo, eran unas fotos bastante desagradables y macabras, el contenido de esta lo era; se podían observar cuerpos en descomposición y alguna que otra parte de animal...
Era una escena bastante perturbadora y oscura...
Pero eso no era lo único que había, Adbel con los nervios a mil y las manos levemente sudadas agarró lo que había en el fondo.
Una nota...
Qué al leerla provocó que la piel se le pusiera de gallina...
"𝓛𝓪 𝓬𝓾𝓻𝓲𝓸𝓼𝓲𝓭𝓪𝓭 𝓶𝓪𝓽𝓸 𝓪𝓵 𝓰𝓪𝓽𝓸...
𝓟𝓮𝓻𝓸 𝓮𝓵 𝓰𝓪𝓽𝓸 𝓶𝓾𝓻𝓲𝓸 𝓼𝓪𝓫𝓲𝓮𝓷𝓭𝓸."
Nadie sabía que hacer o que decir. Pero sabía que en ese momento todos sentimos lo mismo...
Miedo.
Desconocíamos a la persona que nos había dejado aquello, pero no pudimos evitar la gran ola de preocupación que nos invadió.
Era obvio que nuestros amigos corrían peligro, eso estaba claro. Pero, quién era el que nos estaba haciendo todo esto y cuál era el motivo.
Estaba demasiado alterada y nerviosa...
Y las fotos...
Rápidamente los cuerpos en descomposición llegaron a mi mente de nuevo, y fue allí cuando tuve que subir corriendo las escaleras para ir al baño.
Una vez allí, el vomito se hizo presente, yo no podía sentirme más enferma y cansada, tanto física como mentalmente.
Narra Adbel.
Esto no podía estar pasando, sentía como la historia se repetía y eso era lo que me confundía porque yo no recuerdo haber pasado por esto. Pero el sentimiento estaba allí, oprimiendo mi pecho.
Me sentía raro... No mal pero tampoco bien; simplemente era un sentimiento indescriptible.
No negaré, que sentí un nudo en el estómago al ver aquellas fotos. Y un pequeño mareo se apoderó de mi, me sentí nervioso, sudoroso; sobretodo cuando uno de los cuerpos se me hizo familiar.
También me preocupaban otras cosas; como las desapariciones. Pero, aunque sonara egoísta, pensaba más en ella.
En ¿cómo estaría? ¿quién se la había llevado? ¿Y por qué?
Zara... Ella me preocupaba.
Y aunque no sabía él por qué de aquellos sentimientos, no podía evitarlo.
Narra Noah.
Estaba en shock, no lo negaré. Esas fotos me habían robado el aliento, incluso me sentí débil al ver los cuerpos. Pero no podía mostrar debilidad, no ahora que debía encontrar a mí hermana, Anthony y Martha.
Zara, debía encontrarla; a ella no podía pasarle nada. Porque si algo le ocurría moriría y me culparía por el resto de mi vida por no haberla protegido...
Al ver cómo Adila corría al piso de arriba no dudé en seguirla. Si no podía proteger a Zara, podía al menos cuidarla a ella.
Una vez que ella entró al baño y dejo la puerta abierta, la ví vomitando. No dudé ni un segundo en arrodillarme a su lado y sostenerle el cabello.
Sin más los pequeños sollozos de Adila comenzaron a escucharse y eso me partió el corazón. La tomé entre mis brazos y sentí como poco a poco sus lágrimas mojaban mi camisa, pero no me importó.
Nada importaba cuando estaba con ella...
Narra Christian.
Me sentía confundido, para serles sinceros perdido y aterrado. No sabía lo que vendría luego, tal vez, nos querían muertos o simplemente era un simple pensamiento.
Espero que sea la segunda opción.
Todo era un caos, yo simplemente no sabía cómo me sentía, simplemente una extraña sensación en mi pecho era lo que sentía. Y extraños recuerdos del bosque me rodearon por completo.
Sentí que el oxígeno se iba acabando poco a poco... Y cuando creí que me iba a desvanecer un Adbel apareció al frente de mí sacudiéndome levemente.
- ¡Hey, Christian! ¿Todo bien?
- Yo... Sí, sí. Todo bien - respondí rápido.
Adbel no dijo nada más, solo asintió y se sentó en uno de los sofás. Se había perdido en sus pensamientos y yo también lo hice...
...
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~.𝔏𝔞 𝔡𝔢𝔰𝔱𝔯𝔲𝔠𝔠𝔦𝔬𝔫 𝔡𝔢 𝔩𝔬 𝔲𝔰𝔲𝔞𝔩.~
Random'''Prólogo''' Uno de los viajes más curiosos y recelosos en la vida de estos 5 (cinco) jóvenes. Se terminó convirtiendo en una de sus más terroríficas y misteriosas experiencias al descubrir el gran secreto que aquel lugar escondía... ¿Quieres averi...