~.𝔏𝔞 𝔡𝔢𝔰𝔱𝔯𝔲𝔠𝔠𝔦𝔬𝔫 𝔡𝔢 𝔩𝔬 𝔲𝔰𝔲𝔞𝔩.~

"'Esperanza y Miedo"'

Cap. 13

Narra Adila.

El miedo era lo único que reinaba en estas cuatro paredes. Estaba insegura, sabía que si bajaba la guardía me llevaría o a cualquiera de nosotros.

Noah todavía seguía abrazándome y a pesar de toda la tormenta que nos venía encima, con él me tranquilizaba. Me sentía segura, a pesar de las circunstancias en la que estábamos.

Pero, a pesar de todo el terror que había en mi ser, podía sentir aquella pizca de esperanza en mi pecho. Aunque era algo mínimo, estaba allí. Dejándome con el susodicho de tranquilidad.

- Debemos hacer algo. Me separé de su abrazo.

- Yo también opino lo mismo. El problema es que no tenemos ni una pista a dónde se los pudieran haber llevado. Dijo desanimado.

Y ¡Bingo! Ya sabía cómo encontrar alguna pista.

- Las... Fotos. Allí debe de haber algo, aunque sea un mínimo detalle.

A este punto la adrenalina y el sentimiento de esperanza creció. Noah solo asintió y ayudó a levantarme del suelo, solo para ir a ver aquellas perturbadoras escenas grabadas en una fotografía; que aunque me hacían querer vomitar y correr despavorida, tenía que hacerlo, para encontrar a mis amigos; lo haría por ellos.

Narra Noah.

Adila y yo nos dirigimos a la mesa, allí se encontraba la caja abierta y alrededor todas esas fotos. Nos sentamos rápidamente en las sillas y comenzamos a revisar. No perdimos tiempo, no podíamos; quién sabrá por qué se los habrán llevado o si correrán peligro (cosa que es muy probable).

Estaba tan concentrado buscando algún indicio del paradero de mis amigos. Qué no me fijé que alguien más se encontraba aquí.

- Así que buscan pistas, mirando las fotos. Se notaba la curiosidad en su tono.

- Sí Christian. Eso hacemos, podrías ayudarnos si quieres. Adila alzó los hombros y siguió buscando.

- No tengo nada mejor que hacer. Agarró una de las fotos y comenzó a verla.

Pasamos varios minutos observando las fotos, pero el sentimiento de que no encontraríamos nada se hizo presente.

Hasta que de repente...

- C...Chicos. Tartamudeo una Adila completamente pálida.

...

Narra Zara.

Estaba demasiado asustada, no sabía a dónde me llevaba aquel hombre. No podía ver nada debido a que una venda se encontraba en mis ojos, una bastante gruesa, ya que ni siquiera la luz pasaba. Mis manos estaban atadas y lo único que sentía era la mano de aquel hombre en mi espalda mientras me daba uno que otro empujón; mientras el calor del sol chocaba con mi cuerpo.

Estuvimos caminando alrededor de 5 minutos y de repente un frío inmenso chocó con mi piel; ya no había rastros de aquel calor del sol.

Al instante un escalofrío se hizo presente en mí y mi estómago daba vueltas, haciendo que un pequeño mareo se apoderará de mi cabeza.

De la nada, mi cuerpo comenzó a pesar al igual que mis ojos. Intenté mantenerme de pie y seguir caminando, pero cuando dí otro paso, ya no estaba.

La oscuridad se hizo presente.

...