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Horas antes
 

La cabellera verdosa se iba alejando poco a poco entre la maleza. El demonio no quiso admitirlo, pero sintió cierto alivio al saber que no tendría qué preocuparse de ese crío por el momento.

Siguió al grupo de humanos un poco más, dejando unas cuantas pistas falsas para entretenerlos.

Una vez hubo acabado su trabajo, asegurándose de que los humanos tenían una larga distracción para el resto del día, se dispuso a marcharse a su guarida.

Mientras iba saltando de rama en rama, pensaba en lo que había sucedido hoy, si no hubiera llegado a tiempo, podría haber estado en serios problemas. No era que los humanos le supusieran una gran amenaza (ni mucho menos), eran las consecuencias que se podrían desencadenar si son descubiertos. Desde llegadas de más humanos molestos hasta... Otros demonios. Por eso, debía de analizar muy bien su situación y tomar una decisión.

Sin darse cuenta ya había llegado a la pequeña casa a medio derruir, donde se encuentran sus dos siervos y compañeros de viaje.

- Hey bro! Dónde te habías metido? - saludó el sonriente pelirrojo enseñando sus afilados dientes.

- En ningún lugar - contesta cortantemente el pelicenizo, andando hacia el interior de la casa, sentándose en la sombra, este acto produjo que algo parecido a vapor se desprendiera de su piel (es un demonio bastante poderoso, puede aguantar mejor qué cualquier ser sobrenatural los rayos del sol, pero eso no lo hace  inmune) - tengo qué hablar con vosotros.

Bakugo posó sus feroces ojos rojos sobre sus dos siervos, produciendo en estos un escalofrío que les recorrió la espalda.

- Durante mi patrulla me he encontrado con humanos, no son una amenaza por el momento, pero temo que en el futuro puedan llegar a ser molestos

- ¿Por qué iban a ser molestos? No es la primera vez que hay humanos rondando por este bosque, podemos darles pistas falsas - intervino Kaminari

- Eso es Bakugo, si dices que no son una amenaza, ¿Por qué nos tendríamos que preocupar? - pregunta el pelirrojo cruzándose de brazos.

-Es cierto que he dicho que no nos suponen una amenaza ahora mismo, pero, estos humanos no son como otros con los que nos hayamos topado, conocen nuestros trucos, y aunque dejemos pistas falsas, puede que no sirvan de nada. Es muy probable que lleguen a descubrirnos

- Pues entonces acabamos con ellos- interrupió Kaminari abruptamente

-Eso atraería a más humanos, si ya les ha llamado la atención los sucesos con los gatos se alarmaría aún más si los de su misma especie son atacados - responde Katsuki

- ¿Entonces qué propones hacer?- pregunta kirishima, con un semblante serio, esto provoca un corto silencio, en el que las miradas de los criados se posan en su señor esperando una respuesta de éste. Hasta que finalmente dice:

-Vais a explorar otros lugares, da igual que tan lejos estén, solo dos requisitos: que no habiten demonios por allí y que haya gatos, no podemos poner el plan en peligro.

- Entendido! -respondieron los dos siervos al unísono

-¿Cuándo partimos? - pregunta el demonio rubio con un mechón negro

- Lo más antes posible - contesta Katsuki, caminando hacia el exterior de la cabaña - mantenedme al tanto de todo lo que encontréis

- ¿Sabrás cuidarte solo Katsuki? - pregunta el pelirrojo a espaldas del rubio cenizo, con un tono más relajado y amistoso

- Llevad ojos de gato - respondió cortante el rubio cenizo y desaparece de un salto.

Kaminari se acerca a su amigo y extiende su mano hacia el hombro de éste para animarlo, justo cuando iba a pronunciar unas palabras de consuelo es interrumpido por el pelirrojo - está preocupado Kaminari - dice Kirishima mirando hacia donde antes se encontraba su amo con un semblante serio- es la primera vez en todo el tiempo que llevamos en la Tierra que lo veo preocupado...

- Eso significa que...

-Eso significa que puede que el plan esté en peligro.




En otro lugar....

Kirishima no erraba, su amigo y señor estaba bastante preocupando. Para despejarse, decide desplazarse de rama en rama sin un rumbo fijo, con un montón de pensamientos que producían dolor de cabeza y malhumor al ojirojo. Ni siquiera sabía cuánto tiempo había pasado o que camino había tomado. Era bien entrada la noche, apenas se podía ver nada, todo estaba en un total silencio, ni siquiera soplaba el viento, esto le provocó una amarga nostalgia al demonio, le recordó a su casa, el infierno, lugar al que no quería volver. Mientras pensaba en todo aquello, un lejano resplandor avivó sus sentidos, despertando en él cierta curiosidad; no lo pensó dos veces, saltó hacia las ramas que fueron más iluminadas por ese fugaz resplandor, pero mientras más avanzaba, más intenso se volvía el mal presentimiento que le rondaba¿Qué era ese resplandor? Y... ¿Quién o qué lo produjo?





















Utilidad de los ojos de gato: en mi novela,  los ojos de gato son utensilios utilizados para ver a los demonios. Pueden ser usados tanto por humanos como por otros demonios.


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Holaaaa

Quiero disculparme por haber tardado tanto en subir el capítulo, prometo intentar estar más activa.

También os agradezco el que estéis leyendo mi historia y os esté gustando ^^

Vuestros comentarios me motivan a seguir esta historia, gracias también por eso.

Nos vemos prontoo

❤️❤️

𝔅𝔢𝔫𝔡𝔦𝔱𝔬 𝔇𝔦𝔞𝔟𝔩𝔬 ( ᴷᵃᵗˢᵘᵈᵉᵏᵘ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora