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Por fin se acaba el primer día de clase, se me hizo eterno estas tres ultimas horas. Cojo mis cosas y las pongo en la mochila, me pongo la mochila y voy directo a la salida.

-Dylan el bolígrafo- me dice Miguel.

-Es verdad, gracias- le digo.

Me dirijo de nuevo a la salida, no veo a Lucienne por ninguna parte, que rapidez en recoger e irse, pienso.

-Dylan-oigo decir detrás de mi.

Me giro y la veo acercarse a mi

-Lucienne, ¿que paso?-digo nervioso.

-¿Vamos juntos a casa?-me dice.

-Vale- digo sorprendido.

-Okay, venga vamos.

Salimos los dos juntos por la puerta, mi corazón no podía más, parecía que iba a estallar de tantos latidos que daba.

-¿Qué tal el primer día?

-Pues muy bien, no creí que me adaptaría tan bien, lo digo por que claro es el último año del instituto y seguramente ya habrá grupitos y quien sabe quizás no se si me aceptarían, pero bueno estoy feliz por este día,¿y a ti que tal fue este día?

-Pues genial diría yo-"si te diría lo que pienso, genial no se acercaría a lo que siento ahora"- pero se me hizo eterno estas tres últimas horas.

-Bueno también, pero bueno un día menos para las vacaciones- se empieza a reír mientras la miro embobado- vale vale no hace falta que me mires así.

-Si no te he mirado mal ni nada, es mi mirada y así miro- frunzo el ceño como si estuviera enfadado pero no puedo y me sale una carcajada a la que se une ella, madre mía no podré dormir esta noche.

-Bueno te dejo que ya hemos llegado a mi calle.

-Pero si también es mi calle, entonces no vives a tres calles del insti

-Pero si son tres calles.

-Ven- la digo con la mano para que se acerque- ves, esa calle de ahí, pues son cuatro.

-Si esta en la otra acera- me dice riéndose- así que son tres calles.

Me quedo pensando en lo que ha dicho, y pienso que tiene razón ya que esa calle no esta en esta acera.

-Entonces ¿me das la razón?

-Mmmm si

-Así me gusta-ríe de nuevo ríe pero esta vez ríe abiertamente, como si fuera ella misma.

-Venga vamos ¿qué portal es?

-Este el 23.

La miro con cara de sorprendido.

-Pues el 24-señalo al portal de enfrente- ahí vivo yo.

-Entonces somos vecinos, que fuerte.

-Lucienne, ¿por qué no me has esperado?-oigo decir detrás mía.

-Adrien ya soy mayor para ir sola a casa, e igual me dijiste que no hacía falta- dice molesta.

Veo que se pone al lado de ella y me mira de arriba a abajo con mucha arrogancia y chulería.

-Que fuerte hermanita ya haciendo amiguitos y así tan rápido-dice mientras se gira para abrir el portal.

-Adrien que sepas que el que él es aquel portero al que diste en el último partido de futbol.

Se gira nuevamente y me mira desafiante.

-¿Este pringado?- ríe con todas las ganas- y ¿qué quieres que haga, le doy un premio?

Dime te quieroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora