CITRUS - My dog 2

1.2K 125 29
                                    

— “Bueno entonces, ahora qué?”

— Matsuri se hallaba sentada en el sofá, estirando sus piernas maleducadamente. — se encontraba de mal humor por lo que estaba ocurriendo. —

—“Gracias por avisarnos lo ocurrido, tío Sho” — Respondió Harumin preocupada y volteó a mirar a la pelirosa con rabia —

“Podrías bajar las piernas del sofá, esto es un asunto serio Matsuri, Yuzucchi lleva desaparecida dos días” — golpeó a la menor. —

— “Agh…” — Matsuri miró al perro fijamente que estaba sentado al lado de Sho — “Por qué diablos onee-chan desaparecería dejando a ese perro en su cuarto? No lo entiendo” — suspiró. — 

— “Este pequeño estaba en la cama de Yuzu-chan, por alguna extraña razón sus pertenencias estaban intactas y tampoco me dejó un mensaje o algo” — Sho acariciaba al perro, mientras éste meneaba la cola con alegría. —

— “Bueno solo tenemos dos pistas” — declaró Harumin — “Primero que nada, Yuzu se fue sin decirle a nadie a donde iría y segundo este perro, apareció misteriosamente en su cama. —

— “No tiene sentido…” — Mencionó Matsuri al acercarse al perro — “Acaso Yuzu-chan se transformó en un perro? Tiene que ser una broma” — comenzó a reírse. —

— “Idiota esto es serio” — Harumin la hizo callar agarrándola del cuello — “Tu y yo sabemos porque Yuzu se comportaba raro debes en cuando, no saques conclusiones precipitadas.” —

— “Chicas por favor… no peleen encontraremos a Yuzu-chan” — Sho intentaba calmarlas. —

— “No se meta tío” — le gritaron ambas. —

—“Uh…” — Sho bajo la cabeza en señal de derrota. —

— “Guaf” — el perro ladró sin entender nada. —

— El ambiente se puso tenso, el pelinegro no sabía que hacer, una de sus hijas había desaparecido y sus amigas en vez de ayudarse mutuamente para buscar una solución, discutían cada vez más por cualquier estupidez. —

— Hasta que…—

— Se oyó como alguien abría la puerta con desesperación y entraba lo más rápido posible a la habitación. — “¡Yuzu!” — Gritó llamando la atención de los demás. —

— “Genial, llegó la tóxica” — susurró Matsuri y recibió un pequeño golpecito en la frente. —

— “Ay y ahora qué?” — volvió a quejarse — “Silencio” — le murmuró Harumin. —

— “Mei que haces aquí?” — Le preguntó Sho acercándose lentamente hacia ella. —
“Deberías estar en New York con Udagawa-san” — confesó. —

— “Anulé mi compromiso con él hace meses, además viajé lo más rápido posible para ponerme al día con la situación, llamaste a la policía padre?” — Mei miró a su padre con tristeza. — “No todavía no” — declaró el hombre. —

— “Clap” — las chicas quedaron perplejas al ver como la seria y correcta de Mei, le propinaba una cachetada a su padre. —

— “Mei…” — el hombre cayó al suelo asustado. — “Ni mis padres me habían golpeado alguna vez!” — Gritó Sho asustado del monstruo de su hija. —

— Ya han pasado muchos días, que pasa si Yuzu no regresa nunca más, te has planteado eso papá?” — Mei derramó un par de lágrimas. —

— “Eso no ocurrirá, Mei-san” — habló Matsuri con seguridad. — “Somos las amigas de Yuzucchi no permitiremos eso, cuenta con nosotras” — Agregó Harumin. —

CITRUS HOLIDAYSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora