Citrus My dog 4 The end

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- "Qué le pasó a mi cuerpo...!"- Yuzu había despertado asustada, debido a que se transformó en un perro sin razón alguna -

- La rubia comenzó a tocarse el hocico y en efecto, tenía una nariz redonda como un lindo perrito y sus patas tenían garras, además de tener un bello pelaje amarillo.

- "Tengo que... Decirle a alguien..." - pensó. -

- "Yuzu-chan el desayuno está listo" - gritó Sho mientras abría la puerta de su cuarto. -

- "Papá!" - gritó la rubia intentando ser escuchada por su padre pero... -

- "Hmm?" - El pelinegro escuchó un ladrido proveniente de la habitación, una vez que entró se encontró a un extraño perrito acostado en la cama de su hija. -"Guaf, guaf" - El perro ladraba desesperadamente, lo que provocó que Sho se sorprendiera y mirara a todos lados en búsqueda de Yuzu. -

- "Un perrito..." - Confesó el hombre acercándose al animal.

- "Papá soy yo, Yuzu tu hija, acaso no me escuchas!?" - Aunque la rubia estaba hablando, sus palabras se convertían lentamente en ladridos de can. -

- "Es extraño...Porque este perro esta aquí?" - Dijo Sho confundido, acariciando la cabeza del Golden retriever. -

-"Llamaré a sus amigas para reprenderla" - suspiró. -- "Mierda..." - pensó la rubia. -
- "Tu espera aquí amiguito, ya vuelvo" - El pelinegro salió del cuarto con su teléfono en mano.

- "Maldición papá no me entiende, por más que le grito es imposible que me escuche, siento que algo anda mal..." - De repente la mente de Yuzu se volvió borrosa hasta volverse tonta como un perro, su alma seguía intacta pero su mente y raciocinio se habían esfumado.
....

- "Onee-san estaré esperándote a las afueras de la residencia Matou, saludos Hinata" - Mei recibió un mensaje del peliblanco, respiró hondo y tiró su celular en el sofá.

- Yuusuke se encontraba plácidamente acostado en la alfombra de la casa, mientras que la pelinegra se hallaba tirada en el suelo, abrazando a Kumagorou con fuerza. -

- "Cuando iba a la escuela, siempre me rodeaba un aire de soledad, pero ahora se siente tan diferente" - pensó. -

- Ciertamente la joven estuvo sola durante gran parte de su vida, pero al conocer a Yuzu, todo cambió, ya no tendría que llorar sola por las noches, ni temerle a la oscuridad porque tenía a alguien que proteger, una niña pequeña que llegó a su corazón de un día para otro. "No es momento de retractarme" - Habló en voz baja. - Le mandó un mensaje a Hinata en respuesta de que se verían pronto, ya que también llevaría a Yuusuke con ella.

....

- Ese día hacia mucho frio, pero Mei decidió solo ponerse una camisa con vaqueros azules y converse blancas, ciertamente una persona normal no llevaría tales prendas con semejante nieve en el camino. Pero Mei es Mei, y rara vez siente el frio.

- Tal vez era el pánico o la desesperación por encontrar a Yuzu, pero todo esto cambió cuando a unos tres pasos delante de ella, se encontró con Hinata, quien traía a Shirou su perrito con una correa roja. -

- "Guaf" - Gritó Yuusuke al ver a Shirou y salió corriendo hacia él. - "Espera Yuusuke!" - Gritó Mei llamando a su perro

- "Guaf, guaf!" - El pequeño Shirou se acercó a Yuusuke y le lamió la cara, mientras que Yuusuke olfateó el trasero de Shirou y vomitó inesperadamente. -

- "Yuusuke no seas cochino" - Mei se rio de su perro. -

- "Onee-san pensé que no vendrías" - Hinata la saludó. -

CITRUS HOLIDAYSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora