Mi Kryptonita: Historia Supercorp (TRADUCCIÓN)

3. Esmeralda

Siendo honesta, Kara estaba teniendo un día terriblemente horrible en el trabajo. Snapper tiró un artículo que escribió, se perdió un robo más temprano, y lo peor de todo, la Sra. Grant le dijo que se iba. Fantástico.

Por otro lado, Kara sabía que su tiempo con Cat era limitado, y como siempre le daba grandes consejos, decidió hablar con ella sobre sus sentimientos por Lena.

Como de costumbre, la jefa y ahora nueva amiga de Kara, estaba ocupada en el trabajo verificando los artículos, revisando los informes de las noticias, y básicamente asegurándose de que la compañía no se cayera a pedazos. Odiaba interrumpirla, pero Kara necesitaba desesperadamente un consejo sobre relaciones, considerando que nunca antes había estado en una. Tímidamente, entró en la gran oficina, golpeando suavemente la puerta de cristal.

La Sra. Grant la miró a través sus gafas, haciendo señas a Kara para que entrara. – Más vale que sea importante, Kira –.

Kara jugó con sus gafas, alisándose la falda mientras se sentaba en el asiento de felpa. Observó a Cat trabajando, incapaz de reunir el valor para decir algo.

La Sra. Grant se aclaró la garganta, enviando una rápida mirada en dirección a Kara. – Mira, algo obviamente te está molestando y como siempre, has venido a mí para desahogarte y recibir un consejo. Entonces, ¿qué es, Srta. Danvers? –

Kara miró sus manos, retorciéndolas nerviosamente. – Bueno, Sra. Grant, verá, hay algo que nunca le mencioné antes... y es sobre... –

– Se trata de tu vida amorosa, ¿no es así Kira? – interrumpió, leyendo la mente de Kara.

– ¡Sí! Bueno, conocí a esta gran persona, uh, a través de ti en realidad, y yo, um... ¿necesito un consejo? –

Kara apenas podía hablar, su corazón latía con fuerza en su pecho. La Sra. Grant arqueó la ceja, presionándola para obtener más información.

– Sí, bueno, esta persona es muy amable, no es lo que uno se esperaría basándose en el resto de su familia, y... bueno esta persona es muy atractiva, con los más hermosos y profundos ojos verdes, pero no sé si le gustaré, porque... ya sabes... – Kara se frenó, otra vez jugando con sus gafas.

– Ya veo –, respondió la Sra. Grant, quitándose las gafas para mirar a Kara. – ¿Por qué crees que no le gustarás a este hombre misterioso? –

Kara tragó con fuerza. Rao, esto es más difícil de lo que pensaba. – Verás, esa es, u-uh, esa es la cosa, no es un... –

– ¿Lena Luthor llamó tu atención, hm? –, preguntó su jefa sonriendo.

– ¿Cómo... –

– Ojos verdes, "no lo que esperas basándote en su familia", tu inquietud en general. Es un poco patético, Kara. – La Sra. Grant dijo todo eso con indiferencia, como si lo hubiera esperado todo el tiempo.

– Esta es la cuestión, Kara. Obviamente te gusta, veo que tus ojos se iluminan cuando hablas de ella, y haces esa cosa molesta con tus gafas... –

Kara frunció el ceño, cruzando los brazos frente a su pecho. – Son demasiado grandes, es por eso. –

Su jefa sonrió. – Como sea, la Srta. Luthor significa algo para usted. Y si yo fuera usted, tomaría medidas para que esta amistad pueda transformarse en algo más –.

Cat tenía razón. Kara necesitaba hacer un movimiento con Lena antes de que fuera a la zona de amigos... otra vez. Había esperado mucho tiempo para progresar con James, pero Lena era especial. Kara nunca se lo perdonaría si la dejara pasar. Ella frunció el ceño.