Lena sintió una extraña mezcla de felicidad e insatisfacción al salir del apartamento de Kara. Los celos le picaban en el pecho por la mujer misteriosa que las irrumpió. Ella sabía que también era posible que, aunque no se parecieran en nada, Kara estuviera relacionada con la mujer de pelo rojizo. Esperaba que así fuera.
La mujer llevaba una camisa y pantalones negros, su cintura decorada con armas. Recordaba haberla visto antes con Supergirl, justo después de que le salvara la vida...
Lena gruñó de la frustración. ¿Kara tendría razón en su reacción sobre el interrogatorio que le hizo Supergirl? ¿O ella estaba bien al sentirse atacada en cierta forma? Demasiadas veces en su vida, la gente que le importaba la había abandonado, dejándola destrozada y rota por dentro: Lex, su madre, y ahora Supergirl. Esto hizo que Lena se preocupara por su futuro con Kara, a quien adoraba más de lo que podía imaginar. ¿Aún valía la pena intentarlo cuando había una posibilidad de que no funcionara? En su breve momento de duda, Lena sacudió la cabeza, eliminando sus tontos pensamientos. Kara era la única persona que podía hacerla reír y olvidar sus problemas, y la sola idea de poder perderla le dolía. Y podía notar lo feliz que hacía a Kara, y nunca podría arruinar lo que tenían.
La CEO suspiró, llamando a su chofer mientras salía del apartamento. Cuando salió por las pesadas puertas de metal, el coche ya estaba allí esperándola. Entró en él, relajando sus hombros mientras se sentaba. Por el espejo retrovisor, vio su pelo despeinado, sonriendo al recordar el porqué. Kara era una hermosa almohada.
– Si me permite la intromisión Srta. Luthor, ¿por qué está fuera a estas horas? –, preguntó el conductor.
Lena se mordió el labio inferior. – Sólo fui a visitar a una amiga y fuimos... um... digamos que... interrumpidas –, respondió. El hombre asintió, arrancando el auto hacia L-Corp donde su pent-house esperaba en el último piso. Todavía estaba muy cansada y estresada por el largo día que tuvo, aunque un poco menos gracias a Kara que realmente la hizo sentir mejor.
Intentó descansar en el camino, pero fracasó. Decidió revisar su teléfono, viendo tres llamadas perdidas de Kara. Comenzó a preocuparse, marcando rápidamente su número.
El tono sonó cuatro veces antes de que una enorme fuerza disparara el coche en el aire, que aterrizó catastróficamente de costado. Lena se golpeó la cabeza contra la ventana, el impacto hizo que le zumbaran los oídos. Ella gritó, el cinturón de seguridad le apretaba tanto el pecho que se sentía como si tuviera un elefante encima. No pudo evitar el pánico, su cuerpo temblaba. El humo parecía salir del frente del auto, viajando de regreso a donde Lena estaba sentada. Se atragantó, tosiendo rápidamente y su respiración se volvió dificultosa.
Lena entrecerró los ojos para ver a través del humo, una figura fuera de su ventana golpeando el vidrio. Pronto, cedió, y justo antes de que su visión se volviera negra, vio a Supergirl.
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– ¿Cómo está? ¿Está estable? – Lena fue despertada por una voz opaca que le perforaba el sueño. Pero ella no estaba dormida, estaba noqueada.
No podía moverse, así que trató de escuchar la conversación.
– Sufrió... una lesión en la cabeza, así como..., requerirá extensas pruebas... – una segunda voz habló.
Lena parecía tener problemas para escuchar por el constante zumbido de sus oídos, lo que la frustraba. La primera voz sonaba ansiosa.
– ¡Bueno... ayúdala entonces! Lo juro... Ella es muy importante –
– Lo sé, Supergirl, te aseguro que nuestro personal está haciendo mucho para protegerla... –
Lena se alegró al escuchar a Supergirl. Abrió los ojos, gimiendo de dolor sintiendo como dagas que perforaban todo su cuerpo.
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Mi Kryptonita: Historia Supercorp (TRADUCCIÓN)
FanfictionLa Kryptonita no es la única debilidad de Kara Danvers, y se vuelve aún más peligroso con una Luthor... Esta historia NO ES MÍA. Es una traducción de la historia de @star_rey "My Kryptonite: A Supercorp Story". Todos los derechos de la historia son...