Sueño Hecho Realidad. (Charlastor)

3. Amigos Nuevos

Habían pasado unas horas desde aquel encuentro con el castaño y Charlie seguía molesta.

Cómo era posible que dijera eso, ni siquiera la conocía como para dudar de su capacidad.

Charlie: Ya verá ese largirucho, haré que se coma sus palabras.

Dijo molesta mientras acomodaba su escritorio.

Estaba a punto de escribir la primera de muchas cartas, pero aún así temía que no hubiera mucho que contar; después de todo no conocía a una sola persona en la ciudad a parte del señor Víctor que seguramente pasaba sus días ocupado. Alastor con quien no entablaria una amistad por lo pronto y Míriam la mujer del Tarot.

Charlie: "Querido papá y mamá mi primer día en la ciudad no va mal, eh conseguido trabajo y amigos..."

Charlie se quedó pensativa mientras leía lo que escribía en voz alta, una parte de ella se sentía mal al mentir.

Suspiro un poco pero por un momento se fijo en algo sobre la mesa.

Era la tarjeta del hombre que le había chocado la noche anterior, trabajaba en un bar y tal vez eso era justo lo que necesitaba. No era mucho de tomar alcohol pero sin duda estar ahí le ayudaría a socializar un poco al menos.

Charlie: ¡Bien iré ahí esta noche!

Dijo con los ojos brillosos

Charlie pronto tomó su mejor vestido para la ocasión, quería lucir bien pero tampoco tan refinada después de todo no iba con su estilo.

Tomó un baño y cepillo sus dientes para comenzar a arreglarse, más que nada su largo cabello rubio que era difícil de peinar por lo pesado que llegaba a ser.

Pero después de unas horas todo había terminado, estaba más que lista para salir a esa ciudad desconocida y ser amiga de todo aquel que se lo permitiese.

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En aquel bar estaban esos inseparables amigos, por más que les costará aceptarlo se habían vuelto buenos amigos o algo así. Alastor llegaba a ser raro para Husk pero ya se había acostumbrado, era él único que sabía sobre la verdadera naturaleza del joven locutor de radio.

Husk: Estas muy callado fenómeno...

Dijo mirando a Alastor quien raramente estaba en total silencio bebiendo de su vaso.

Husk: ¡Carajo contesta!, parece que hablo con la puta pared...

Alastor sonrió de pronto y levanto la vista sin dejar de sonreír a su amigo.

Alastor: Estaba pensando Husker, en aquella mujer de la que me hablaste.

Husk: ¿Eso es lo que te tiene tan ido?, bha porquería...

Alastor: Oh no te adelantes a los hechos amigo mío, verás una mujer nueva ah entrado en la estación de radio y curiosamente parecen ser la misma.

Husk: ¿Y si fuera así que?, ¿no me digas que te callo a ti también?

Alastor se quedó en silencio pero al ver que su amigo hablaría levantó la voz.

Alastor: ¡Eso es imposible!

Dijo en voz alta.

En ese momentos las puertas del bar se abrieron y dejaron ver un hermoso vestido carmesí con olanes negros, una bella cabellera rubia y hermosos ojos negros.

Charlie entró al bar y se acercó a la barra sin darse cuenta de quien estaba a un lado.

Charlie: ¡Buenas noches, ¡¿que le recomendarías a una novata?!