Verdad

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Este es el octavo y último día. Me divertí estresandome (?) Algo chiquito pero me cagué de la risa imaginando a Ochako como en este One shot. Pido disculpas por mis pendejadas en los capitulos anteriores, todos valían madre y media pero juro que para la otra week, lo haré mejor, más detallados, largos y bonitos. 

Al parecer, el sector comunitario de la Heights Alliance estaba vacio y Ochako estaba disfrutando de leer mangas mientras comía una de las papitas que Kaminari le había regalado el día anterior. 

Había empezado como simple curiosidad mientras leía un manga de romance y se lamentaba no tener una relación tan bonita como en la del manga Kamisama Hajimemashita. ¡Ella quería a alguien como Tomoe! Luego, cuando sus amigas supieron que ella leía mangas, le comenzaron a recomendar distintos mangas de romance hasta que Tooru hizo el plato fuerte; le recomendó un manga yaoi. Comenzó por algo suave y decidió leer un sencillo shonen-ai. De eso escaló al yaoi y posterior, comenzó a escribir fanfics. 

Pero no cualquier clase de fanfics, comenzó a escribir de sus dos dos amigos, de Todoroki y de Deku; no era su culpa, ellos siempre estaban ahí juntos y tenían muchas fans. Y cuando se los mostró a sus amigas, comenzó a ser furor en el internet y también entre sus amigas. Disfrutaba de su pequeña fama y de que, su pasatiempo le estaba dando dinero por Buy me a coffe. Realmente había sido una buena idea comenzar con eso. 

Y ahora estaba en un momento de relajación, con un rodete bastante desordenado en el cabello, unos lentes de lectura, una camiseta suelta que era de uno de su novio (que solo las utilizaba porque eran grandes y cómodas... y olían a Katsuki), un café en un termo y pasaba de página en página, emocionada con que habían hecho un comic de sus fanfics. 

— ¿Qué mierda es eso? — preguntó entonces una voz detrás de él.  

Ochako sudó frío, mientras se giraba con suavidad y veía a Bakugo frunciendo el ceño. La castaña sonrió nerviosa, ocultando lentamente el manga. 

— N-nada. Realmente nada. Oh, mira la hora, cariño, iré a dormir. 

— Son las putas tres de la tarde, ¿eso es un manga del mitad pendejo y de Deku? 

Síp, todo había valido madres. Inspiró hondo mientras se preguntaba como salir de eso. 

Podía fingir un desmayo, sí, eso serviría. 

— Hey, ayer dejaste tu laptop en mi habitación, prendida. Me metí para apagar los putos sonidos y vi que alguien te depositaba dinero, ¿qué mierda estás haciendo? 

— Eeeeh... juro por All Might que todo tiene explicación. 

Y entonces se resignó y le explicó, que ella tenía cierta fama y había abierto una página donde sus lectoras la apoyaban con 745 yenes en una suscripción mensual. Que habían veces que sus lectoras sencillamente le depositaban de más pero que eso la ayudaba a pagar deudas. 

Y entonces, cuando escuchó toda la historia, le arrebató el manga de las manos y comenzó a leer. El rostro del chico se había empezado a colocar de color rojo y frunció el ceño.

— ¿Tú escribiste esto? 

— S-sí, pero, yo no lo dibujé. Es un fan-comic de mi fanfic. 

Ay, se iba a enojar. Ochako se quedó pasmada sin saber si moverse. Por una parte, pensó tal vez que si ella no se movía, Katsuki la iba a dejar de mirar. 

— Mira, me alegro mucho que tú estés ganando tanto dinero con esto. De verdad me alegro. Pero, quizás debas tener más cuidado, ¿qué pasaría si Deku se entera? 

— Oh, eso... sí, ya lo sabe. — dijo como si nada, alzándose de hombros — me descubrió hace dos meses. Él dijo que no pensaba que yo era la que lo escribía, porque lo había leído por internet. De hecho, también tengo uno tuyo... con Deku. 

— ¿POR QUÉ MIERDA HACES ALGO TAN DESAGRADABLE? Entiendo al TodoIdiota con el bastardo de Deku. 

— PORQUE A LAS FANS LES GUSTA, me lo pidieron como comisión y no puedo decir que no ante el dinero que me dan, me da reputación también. Pero tu eres mi novio, no te esponjes. 

Katsuki soltó un suspiro y le dijo que estaba bien entonces, pero que fuera a guardar sus malditas cochinadas en su habitación. Ochako le hizo caso y fue a dejar las cosas. Bajó con un cuenco de palomitas y le entregó uno a Bakugo. 

— ¿Vemos una película? me duele un poco los ovarios y solo quiero descansar. Trabajé anoche y ahora solo quiero dormir. 

— ¿Te va a llegar la regla? — preguntó él mientras se acomodaba atrás de ella y la abrazaba por la espalda. 

— Sí, me llegó hoy... aunque con tres días de retraso, pero ya sabes que es bastante normal. — se alzó de hombros con indiferencia. 

Bueno, nunca habían tenido sexo, a si que ni uno se preocupaba por un posible embarazo. 

— Ocha, ¿estás bien? 

Ochako no respondió, se había quedado dormida acurrucada al lado de él. Katsuki le acarició el cabello mientras pensaba en qué momento se había enamorado tanto de ella. Le dio un beso en la sien y luego se quedó dormido al lado de ella. 

Cuando despertó, tenían una manta encima y a toda la clase frente a ellos, mirándolos dormir y hablando en voz baja para evitar despertarlos. 

— ¿por qué mierda no nos despertaron, malditos bastardos?

— Te veías muy lindo durmiendo y Ochako estaba muy cómoda. — respondió Mina alzandose de hombros. 

— Les sacamos muchísimas fotos. — dijo Kirishima con una sonrisa de oreja a oreja. 

— Puta madre, maldita sea, tiburón. 

— ¡Pero es que se veían bonitos! Mira, además los publicamos en redes sociales y explotaron. Ochako tiene muchos fans y que decir de ti. 

Ochako por fin despertó y se estiró. Ahí se entero de todo y se quejó de que no debieron subir las fotografías 

— Era hora de que el mundo conociera la relación entre los pequeños héroes de Uravity y Ground Zero. 

Ambos se quejaron y sencillamente, aceptaron la realidad. ¿Qué importaba ahora si un par de personas sabían eso? 

Y pronto se dieron cuenta, que eran tendencia mundial.  

Nosotros  ✧Kacchako Week 2020✧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora