Luca ingresaba lentamente al Beauty Center sin decir palabra alguna, debía tener mucho cuidado con la manera en que le daría a Esperanza la fatídica noticia. No sería fácil para nada, pero tenía que ser lo más cauteloso posible y contarle la verdad de una manera muy delicada.
-Tío, que sorpresa, ya cerré por hoy y no es que no me alegre de verte pero esperaba a otra persona ¿Necesitas algo?- preguntó con nerviosismo Hope, no le gustaba para nada la cara que llevaba el chico y menos le gustaba no tener noticias de su novio.
-Necesito hablar con vos- comenzó diciendo el moreno con la poca fuerza que le quedaba, ya no podía más, su vida se había derrumbado aquel día. No solamente su flaquita lo odiaría, sino también su sobrina, por su culpa un hombre había perdido la vida esa tarde.
-¿Sobre Tefu? Ay gordi, dale tiempo, la tía sigue muy enojada por todo lo que pasó pero ella te ama y seguramente te va a perdonar- trató de animarlo al verlo tan acongojado y cabizbajo.
-No es precisamente sobre ese tema- prosiguió el muchacho, el cuerpo le temblaba y en cualquier momento su voz le fallaría, pero debía continuar y decirle la verdad.
-¿Problemas con Tacho? ¿Con el colegio? Gordi habla porque me estás asustando- Hope comenzaba a impacientarse cada vez más, odiaba recibir malas noticias y últimamente parecía que era lo único que llegaba a sus oídos.
-¿Podes sentarte? Por favor- le pidió casi en un susurro, el chico tomó asiento esperando que Esperanza imitara su gesto. Luego de un instante la dueña del Beauty Center, no muy convencida, se sentó a su lado.
-Luca necesito que me cuentes que te pasa, me estás preocupando mucho- habló Hope con suma impaciencia y nerviosismo.
-Antes que nada quiero que sepas que te quiero... Y mucho, jamás haría nada para lastimarte, jamás- continuó Luca, intentando encontrar las palabras adecuadas que lo ayudaran a confesarle a su sobrina lo ocurrido.
-Pero, porque después de eso siempre hay un pero ¿No?- preguntó alterándose más Bauer.
-Por favor déjame seguir y no digas nada hasta que termine de decirte todo- la cortó con suavidad el moreno. Luca tomó las manos de Hope, mirándola con lágrimas en sus ojos que reflejaban la profunda tristeza que sentía el chico, continuó hablando con su voz quebrada- Ayer me encontré con Tefi y descubrí que sus salidas a escondidas eran porque formaba parte de Cielo Abierto, totalmente cegado por mi testarudez seguí al grupo para sacarla de ahí, sin saber que estaban en un operativo muy riesgoso. Al llegar intenté llevármela para que hablemos y ella se negó, yo insistí hasta que Evaristo llegó, preso de la ira no pensé y me dejé llevar por mis estúpidos impulsos entonces comenzamos a pelear- relataba con dolor el moreno al recordar lo sucedido.
Esperanza se preocupaba cada vez más a medida que el relato avanzaba, el nudo en su garganta se hacía cada vez mayor y las lágrimas junto a la desesperación comenzaban a invadir su ser, sin embargo estaba paralizada, tenía la ilusión de que el final de la historia no fuera nada de todo lo malo que estaba imaginando, pero su parte realista le advertía que ese final sería fatal.
-Tefi intentaba separarnos pero nosotros seguíamos peleando sin escuchar a nadie, hasta que oímos a Teo gritando que los guardias se acercaban y debíamos salir de ahí de inmediato- seguía relatando Luca, la culpa volvía a hacerse presente dentro de él y el dolor lo desgarraba por dentro- Cuando quisimos correr detrás de los demás fue demasiado tarde, un montón de guardias nos habían rodeado, no teníamos cómo defendernos, estábamos en desventaja totalmente. La Jefa de Ministros también se hizo presente y ahí todo fue un caos, ambas se gritaban hasta que la Jefa sacó un arma y quiso dispararle, yo corrí para interponerme para que nada le pasara y al mismo tiempo Evaristo corrió también, entonces el disparó finalmente impactó en él, después de eso nos llevaron a unas celdas donde nos tenían prisioneros hasta que Camilo y Paz llegaron a rescatarnos- decía mientras las lágrimas contenidas corrían sin parar por sus mejillas.