CAPITULO 1

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*POV Topacio

Observo como acelera y simplemente le dejo pasar.

Sin apartar la vista de enfrente miro de reojo y veo una sonrisa burlona en su rostro, ¿este imbécil cree que puede ganarme? -sonrío sin humor- he estado practicando meses antes de salir a mi primera carrera clandestina, porque si algo tengo claro es que no lo hago para perder y haré que a ese cretino se le valla esa sonrisita que se carga, será fácil solo hay que ver sus técnicas y sabrás que perderá.

Le mantengo el ritmo sin demostrar mis capacidades, pues según mi hermano tengo algo especial con los autos.

Faltando poco para llegar a la meta se escucha el silencio y algunos jadeos de las personas, pues el corredor que antes me brindó una sonrisa burlona va delante de mí y según lo que eh visto es muy bueno corriendo , lástima que hoy le toca perder , sin pensarlo más hago uso del consejo de mi hermano y acelero tan rápido que apenas y me doy cuenta de que ya pase la meta final , se escuchan muchas personas gritando y muchos cobrando sus apuestas .

Bajo el cristal de mi lado de conductor y sin quitarme el casco tomo el dinero que me ofrece Frederick.

Estaba a punto de bajarme de mi asiento, cuando escucho las patrullas, doy vuelta y giro en círculos marcando un 8 en el piso en el que antes estuve estacionada y acelero, dejando todo atrás porque si me atrapa la policía estoy muerta, apenas y soy mayor de edad y aunque tengo el apoyo de mi hermano, no sé cómo se lo tomaría mi padre un hombre detestable y frívolo,

Me detengo a una esquina de mi casa y pienso en la excusa que le daré a mi padre .

Cuando paso las grandes puertas de mi casa , esta todo en silencio tanto que da miedo , mi casa es una gran casa literalmente mi padre vive de su imagen y si quiere respeto debe tener las mejores cosas por ejemplo, esta casa la diseñó un arquitecto ruso y si que le costó esa capricho a mi padre.

Subo a mi habitación, me desvisto apenas estoy dentro y voy directo al baño necesito relajarme y festejar mi primera carrera.

Sumerjo mi cuerpo bajo el agua y aguanto la respiración hasta sentir que mis pulmones necesitan aire es una pequeña costumbre que tengo desde pequeña dentro del agua siento que todo se detiene que a mi alrededor solo estoy yo, además servía de mucho cuando mi padre tiene fuertes discusiones con mi madre, dentro del agua las voces se distorsionan y logro relajarme.

Envuelvo mi cuerpo en mi bata de baño y voy hasta mi closet, me coloco una de las camisas de mi hermano, que por cierto se las cogí de su habitación.

Tomo mi celular y lo desbloqueo para buscar a ónix .

Al tercer tono contesta.

-hermanita, como te fue - es lo primero que pregunta al descolgar.

-gane!!,  estoy muy emocionada , le gane a la bestia – festejo unos segundos antes de ser interrumpida por mi querido hermano que me felicita y que esta tan emocionado como yo , cuando ya estamos calmados me pregunta.

-estas segura de que nadie te vio el rostro? -su voz suena entre preocupado y cauteloso pues ya sabe que es un tema difícil en nuestra familia.

Claro, en ningún momento me eh quitado el casco -sonrío y me tomo toda el agua que antes me había servido.

-en el momento que nuestro padre se entere – guarda silencio unos segundos para suspirar y a mí se me erizan los pelos de solo pensar en su reacción-sabes que siempre vas a contar conmigo topacio, eres mi única hermana y te voy a apoyar en lo que decidas siempre y cuando no ponga en riesgo tu vida- esta vez cambia su tono de voz a uno comprensivo.

Desde pequeña quería jugar con los autos de mi hermano ónix a escondidas de mi madre, porque según ella los autos son para chicos y yo solo podía jugar a las muñecas, nunca comprendí como mi familia creía en esos prejuicios.

-te dejo que necesito volver a dormir- o cierto me fijo en la hora y veo que son pasadas las 3 AM, suerte tuve de que me responda, me despido disculpándome por la interrupción no antes de lanzarle un beso.
Suspiro y sin pensar empiezo a sonreír de solo recordar que le eh ganado a la bestia, ya a decir verdad tengo que admitir que dio pelea para dejarse ganar, solo que ya yo iba preparara para gana, pues durante tres meses estuve yendo a verlo correr cada viernes solo para ver sus debilidades en la pista, sus trucos y habilidades y luego tomar provecho de mi ardua observación.

Me cubro con las cobijas calientitas mientras escucho el sonido de la lluvia y caigo en los brazos de Morfeo.

ClandestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora