Siempre tú

| XLIII |

Pov Natalia

Alba me va indicando y la verdad es que está un poquito lejos, el problema ahora será aparcar, estoy mirando donde hay algún sitio cuando escucho que Alba se ríe, ¿qué pasa ahora? e inmediatamente la miro, para saber de que se ríe y me doy cuenta de que me está mirando a mi, ahora si que no entiendo nada.

- ¿Qué pasa?-le pregunto mientras sigo mirando si hay algún sitio-.

- Pues que no hace falta que busques sitio-dice riéndose de nuevo-.

No entiendo nada, ¿dónde quiere que aparque? ¿en un árbol?

- ¿Cómo que no? ¿entonces dónde aparco? no se eh Alba, creo que estamos en un coche y que no puede entrar con nosotras al estudio.

- Ya lo sé tonta-dice riéndose-.

Me está poniendo nerviosa con tanta risa.

- Ay Nat no me pongas esa cara-dice poniendo un puchero-. No te enfades, que todo tiene su explicación.

- ¿Entonces por qué estás tardando tanto en explicármelo?

- Porque me hace mucha gracia la cara que pones cuando no entiendes nada-dice riéndose por quinta o sexta vez ya, no sé, muchas-.

- ¡Vete a la mierda! estás consiguiendo que perdamos tiempo a lo tonto y al final vas a llegar tarde.

- No te preocupes Nat, Ignacio esperará, no te preocupes por eso-me dice con una sonrisa-.

Ya tardaba en nombrarlo.

- Vale, ¿entonces dónde aparco? lo digo para no seguir dando vueltas, que parecemos gilipollas.

- Tú lo eres Nat, no te equivoques-dice riéndose de nuevo-.

¿Pero qué le pasa hoy? madre mía, se está riendo demasiado y a mi me está poniendo de los nervios, coño algo pasa porque la actitud que tiene ahora de hacer el tonto de esta manera muy normal no es.

Igual está nerviosa porque voy a conocer donde trabaja y a la gente que le rodea en ese mundo, no lo sé, pero todo es muy raro y yo como siempre empiezo a comerme la cabeza... igual lo que le pasa es que realmente no quiere que suba y por eso quería ir en taxi... lo mejor será que la deje en la puerta de la discográfica y yo me marche a casa, además estaré sola, genial para seguir comiéndome la cabeza, en fin, no me aguanto.

- ¿Me vas a decir dónde tengo que aparcar?-digo seria-.

- Ay Nat no te enfades, que sólo estoy brindando-.

- Lo sé, lo sé-miento-. Pero paso de seguir dando vueltas como una tonta.

- Tienes razón, te voy a explicar porque no tienes que buscar ningún hueco para aparcar.

Espero que esta vez sea la definitiva, porque un poquito si que me estoy cabreando.

- Tengo aquí una tarjeta que me permite meter el coche en el parking del estudio y bueno nunca lo he usado, básicamente porque siempre vengo en taxi y eso, pero como no encontramos un hueco pues si quieres podemos meter el coche ahí y bueno así lo tenemos cerca y eso, no hay que pagar nada, si eso es lo que te preocupa, es lo bueno de ser una cantante bastante reconocida, que tengo cositas-dice mientras mueve la tarjeta que segundos antes ha sacado del bolso para que yo lo vea-.

Joder todo por una tarjeta, ¿por qué no me lo ha dicho desde el principio? nos hubiéramos ahorrado bastante tiempo.

Es que joder encima que nos joden el día que íbamos a pasar juntas tengo que aguantar la actitud que tiene Alba, menos mal que se me ha ocurrido la gran idea de marcharme y no subir con ella, así no tengo que conocer a Ignacio, no quiero ver como es ni nada, que seguramente será guapo, gracias pero no.