Capítulo 1

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Otra vez me encontraba en la misma rutina; despertar, alistarme, desayunar y salir al trabajo. Miré mi reflejo en el espejo. Las ojeras de mi rostro y palidez producto de nunca haber tomado sol solo provocaba que me viera enferma. Me atrevería a decir que incluso parecía muerta. Tomé el cepillo y peine mi cabello. Actualmente lo llevaba un poco largo a comparación de cuando me lo corté; lavé mi rostro y acomodé el traje que usaría ese día.

Hoy tenía una entrevista con la televisora de canal 6, no dejaban de insistir en que sería estupendo tener una con la nueva escritora de terror y suspenso. Si, parece que son las desventajas de ser actualmente famosa. Pero de la que nadie sabe nada, mucho menos su verdadero nombre. Me aseguré de que no pudieran encontrar información mía para difundir, y gracias a eso, puedo vivir cómoda en la oscuridad.

Pensé seriamente llevar una mascara y distorsionar mi voz. Sería demasiado, lo sé,  solo logrará crear más intriga en mí.

Suspire, salí del baño; tomé mi bufanda, la mochila y unos lentes. Como último, agarré las llaves de la mesada y salí de casa.

Las calles se encontraban repletas de gente, todas caminando de aquí y allá estando al pendiente de sus ajetreada vidas, siendo exactamente lo que somos. Criaturas corriendo en una rueda de nuestros ciclos laborales. Ya saben; despertarse, trabajar, pagar cuentas, endeudarse, volver a trabajar para seguir pagando cuentas y quedarse sin dinero. Creo que se ha vuelto tan común en nosotros que ya nos da igual.

Miré el letrero del edificio frente a mí. Mi lugar de trabajo. Según sus instrucciones, querían entrevistarme aquí. Empujé la puerta giratoria. Frente a mí, se podía apreciar una sala inmensa en donde la belleza de la arquitectura moderna y cuadros de antiguos escritores y creadores del edificio se mostraban en fila uno al lado de otro.

Tomé el ascensor, llegando luego a mi piso, miré la hora, notando que faltaban unos veinte minutos para que llegaran las camaras. Cambié mis lentes normales por los de sol y cubrí mi rostro con la bufande. Ésto sería suficiente. El distorcionador no lo traía conmigo, como dije anteriormente, puede que sea demasiado.

Dejé mi mochila en el respaldo de mi asiento. Se preguntaran ¿qué hago en la editorial o por qué la entrevista es aqui? La respuesta es simple, querian que sea en mi casa. A lo que obviamente me negué, y recomiende que sea en éste lugar.

A lo lejos escuchaba llegar a la producción junto a la reportera. April O'nel, había escuchado rumores de que era una muy buena reportera y que era muy dedicada a su trabajo. Me alegra poder encontrar a gente que disfruta trabajar en lo que la apasiona.

- Lamento llegar tarde señorita Dark Love, espero éste lista para la entrevista. -

Era una chica de pelo negro y piel bronceada. Sinceramente, diría que es baste bonita. Sus facciones son final y delicadas, mostrando ser una chica de un atractivo sin igual.

- Eso creo, nunca tuve una entrevista. - Declare.

Pude notar un pequeño brillo en sus ojos y su sonrisa se había ensanchador más, arrugando sus ojos levemente. Si no me equivoco, diría que ésta muy contenta de ser la primera en tener el honor de hacerlo.

Tomó lugar frente a mí, platicamos un poco de trivialidades mientras dejábamos correr el tiempo. Una vez el chico de la cámara nos dió la cuenta regresiva nos preparamos.

- 3... 2... 1

- hola, soy April O'nel y nos complace tener aquí con nosotros a Dark Love. Como muchos sabrán, Ella es una de las nuevas escrituras de la que todo el mundo ésta hablando. Y nos alegra tenerla aquí con nosotros en canal 6.

Después de esa presentación, dimos inició a la entrevista. Las preguntas que hacía eran algunas de mi trabajo y mi comienzo como escritora. Y otras, se centraban en preguntas de mi vida privada, las cuales conteste poco y nada, tratando de desviar la conversación a otro lado.

Al cabo de unas horas, ya tenían su trabajo hecho y yo me encontraba en libertad. Honestamente, no volvería a hacer esto en un muy largo tiempo.

- Muchas gracias por ésto.

- De nada ¿tienes todo lo que necesitabas?

- Si, se estará transmitiendo en el horario nocturno.

Asenti y miré la dirección en la que se iban. Respirando al fin, masajie mi cuello por los insesantes dolores por estrés acumulado. Me pregunto cuando será el día que no sufra estrés, estar sentada por horas frente a un monitor tampoco daba mucha ayuda que digamos.

Ya estábamos a principio de la tarde, no podía creer que haya durado tanto. Mi estomago rugió hambriento, recordando que no habia desayunado en lo absoluto. Agarré mi mochila y salí de allí, habia un local de comida china del cual estaba fascinada. El propietario era un hombre mayor, y aunque pareciera que su ceguera formara un problema para preparar platillos, no podría ser más alejado a la realidad. Debe tener un control excelente en sus otros cuatro sentidos como para no necesitarlo. Pensaré seriamente pedirle clases, mi visión va disminuyendo cada día, y no tardaré mucho en quedarme ciega.

Amigos peculiaresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora