En uno de mis momentos de aburrimiento me encontraba de cabeza en la cama;el torso colgando mientras que mis piernas permanecían arriba de ella,puede escuchar pájaros y desvíe la mirada al pequeño balcón que tenía la habitación
«genial ya es de mañana y no dormí nada»
Puse mis manos en el piso y pase mis piernas por encima para hacer una vuelta y terminar parada.
—buenos días - dijo la voz de la señora asustandome
—demonios liss, me asustastes-poniendo mis manos en el pecho
—disculpe, pero ese no es el lenguaje de una señorita
—nunca he sido una señorita que preste atención a eso y mucho menos a las etiquetas de la sociedad ya que de donde vengo no son necesarias
— traje su desayuno al cuarto, está en la mesa
—mmm gracias, pero me temo que no comeré
—¿porque?- viéndome extrañada caminar por toda la habitación
— me temo que ya me ire- afirme recogiendo lo que envío la tía Irene
— ¿A dónde exactamente señorita?
«gran pregunta, ya era libre de las wiccas tía Irene pensaba que estaba acá y según Heinrich no es un encierro así que puedo ir a dónde quiera»
—mmm no lo sé aún, pero seguro que podré resolverlo luego, igual gracias por preocuparte liss- le dije acercándome a ella y luego pasando por su lado tome un trozo de pan de lo que dejó en la mesa.
« bueno quizás otro»
Tome otro y salí por la puerta de la habitación con un trazo de pan en una mano otro en la boca y la bolsa que envío mi tía Irene y mis cosas dentro,baje las escaleras y veía hacia los lados camine por este castillo como veinte minutos abriendo y cerrando puertas.
Hasta que me ubiqué y me dije a mi misma
«boba,busca la puerta que valla había el patio donde tengan los establos»
Cuando al fin lo encontré solo había un caballo en el, bueno una yegua la verdad, entre a su espacio y se agitó un poco.
— tranquila bonita, no quiero hacerte daño- le dije acercándome poco a poco, ofreciéndole un troso de pan
Se calmó y tomo el pan se dejó acariciar por mi, no pude ver en ningún lugar alguna montura solo las riendas, pero nada de la montura
«diablos»
Tome las riendas y se la puse estube un momento esperando para verificar si soltaba la rienda por suerte no lo hizo así que podía irme con esta llegua pero tenía que montarla sin montura; no me importa y la saqué del establo y la monte
Pude ver cómo al fin me alejaba de ese castillo hasta que ya no pude verlo, estuve cabalgando un rato sin rumbo alguno, esperando conseguir un pueblo o algo así; dos horas y aun no conseguía nada y empezó a ponerse nublado
«¿porque? si estaba tan soleado, justo ahora va a querer llover»
No quise prestar atención y seguí, me callo una gota de agua en la mano y después de allí callo más y más agua, así que no me quedo opcion que buscar refugio en una cueva que logré ver afortunadamente entraba la llegua, al entrar baje de ella y quite la rienda de su boca apenas lo hice ella se agitó y corrió a toda velocidad lejos de la cueva dejándome sola
«genial, ahora me abandono, no tengo transporte y el cielo se cae»
—¿Que hace una cosa tan frágil como tú en un lugar tan peligroso como este?- dijo una voz detrás de mi
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Entre los dos mundos
FantasySelaena vivió toda su infancia sobre protegida en un campamento errante de wiccas que viajaba en los bosques de ésteres. El bosque más temido de todo el reino ya que es el que dividía el pueblo humano del terreno de los seres fantásticos, nadie sabí...