Conociendo a un "ero-sennin"

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esto es que kano habla español, ingles o con los animales, puede der cualquiera de estos


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así que el tiempo sigue, diría que ha pasado como, mmmm, 1 o 2 años tal vez menos tal vez más.

Que he hecho todo este tiempo.

Pues entrenar, aprender, convivir, sobrevivir. La verdad estoy muy feliz de estar con la manada

Lo que más me gusta en cuando nos quedamos en las aldeas, creo que he visitado más de la mitad de este mundo. Y si he estado en konoha, paso algo raro ahí, pero eso ya después lo sabrán mejor

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OH POR DIOS!!

Conocí a jiraya, fue algo ridículo y curioso como paso, tranquilo que ya os explico

Estaba en una aldea, en compañía de momo, ya saben, la rutina, escuchar, tratar de hablar japonés conmigo misma, a ver si me hayo dinero, tal vez robar algo. Lo típico.

Después de un gran rato me empezaron a doler las nalgas, así que decidí levantarme y nomas caminar por ahí, a ver si hallo algo interesante ¨oye momo quieres ir a caminar por ahí¨ apunte a una dirección cualquiera ¨eh, ah sí porque no¨, dijo sin tomarle tanta importancia ¨bueno, andando pué'.¨

Empezamos a jugar y a hacer carreritas las dos, iba corriendo a toda velocidad y le iba a ganar, lo cual estoy muy orgullosa de ello ¨ehhhhhh, te estoy ganando, lero,le- *PLAS!*¨ pero como diario tiene que pasar algo... me estampe contra un árbol

¨KANO, KANO! ESTAS BIEN!¨ Tenía un tono preocupada yo solo pude asentir mientras miraba el árbol con el que me estampe.

Iba a pararme y seguir, pero entre las ramas y hojas, muy escondido había alguien, con unos binoculares-algo, no pude distinguir quien era. Pero voltee a donde supongo que el sujeto miraba...eran unos baños termales...-¨pero que rayos?¨ -dije a mi misma oye momo espérame un momento, debo revisar algo¨ ¨si!¨.

Batallando trate de subir el árbol, si me raspe mucho, el árbol estaba alto y rasposo, pero después de mucha prueba y error y forcejeo, logre subir a la rama que estaba el sujeto, tenía un tipo de manto en la espalda blanco que no me dejaba ver su rostro. En todo este tiempo no se había dado cuenta que había subido y estaba a su lado, estaba muy absorto en su actividad

¨buenos días¨ dije más o menos fuerte y en su oreja, recibí muy mala respuesta ¨AHHHHHHH!¨ respondió, ¨ahhhhhh!¨ conteste de igual manera pero más chillona

El tipo hizo un movimiento rápido haciendo que perdiera el equilibro, trato de agarrarse de algo pero solo logro cogerme a mí, así que caímos juntos de manera dolorosa al suelo, pero gracias a dios no recibí mucho daño por que el señor me protegió para que no cayera el encima mío.

¨ay ya yai, mi espalda.*huff*, ya estoy viejo... oye niña estas bien¨ comento muy tranquilo, como si no lo hubiera atrapado haciendo lo que hacía. Mientras él se quejaba del dolor yo me pare bien y acomode la cobija-vestido que traía, cuando me pregunto solo pude asentir, cuando finalmente lo vi al rostro me di cuenta quien era.

¨ Jiraya! ¨ Oh no... ¨si ese soy yo, así que has escuchado hablar de mí, jajá, tú has de ser-¨ y finalmente el me vio bien, solo sé que quedo viendo, me sentí muy nerviosa, estaba sucia, raspada, con una cobija como ropa. Básicamente parecía una niña de la calle... porque eso era.

Quería huir de ahí, pero mis piernas no me lo permitían, lo dos solo nos miramos a los ojos un largo momento, vi el mismo brillo que cuando me habían visto en el perro hamada cuando él me encontró, ''-llévalo a la manada-'' dijo una voz en mi cabeza, momo se acercó, yo creo que sintió lo mismo porque lo tomo de su pantalón y empezó a jalarlo, instantáneamente reaccione y le tome la mano tratando de jalarlo pero ambas somos pequeñas no lo movimos ni un centímetro.

los colores no son iguales en la pantallaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora