Hope At Beacon Hills [Scott McCall]

☪Chapter Three☪

Capitulo 3
『••[La fiesta]••』

Luego de la revelación de Derek sobre una manada de Alfas, Stiles y Scott me llevaron a casa.

El viaje fue totalmente silencioso, Stiles no confiaba del todo en mi, no lo culpaba en absoluto, había llegado de la nada y le había dicho que venía de otro mundo. Mientras que Scott, me enviaba miradas para nada disimulada, se rascaba la nuca con nerviosismo. Tambien me sentía nerviosa, no sabia por que, acababa de conocerlo y luego de lo ocurrido con Roman hace un año no confiaba en los chicos lindos, pero Scott parecía diferente, lo sabia de algun modo.

―Aqui vivo ―le dije a Stiles señalando un complejo de apartamentos―. Gracias por traerme, Stiles, Scott...

Salí del jeep luego de que lo hiciera Scott, ya que el auto solo tenia dos puertas. Busqué en mi bolso y le entregué el libro a Scott dedicándole una pequeña sonrisa.

―Gracias ―susurre y tomando con fuerzas las correas de mi bolso, caminé hacia la puerta del edificio.

Estaba a punto de entrar cuando una mano me detuvo antes de que pudiera hacerlo. Me giré para encontrarme a un nervioso Scott.

―Oye... Amm ―titubeo un segundo antes de sonreír tomando algo de valor―. Stiles me invitó a una fiesta esta noche y yo... tu... ¿Quisieras venir conmigo?

Sonreí con ternura por su nerviosismo, él era bastante adorable para ser un feroz hombre lobo. Mi corazon se derritio solo un poco.

―Claro ―asentí con mi cabeza―. ¿Pasan por mi a la hora de la fiesta?

Scott se veia sorprendido, quizas habia esperado un "No" y yo estaba a punto de darlo, pero su carita me conmovió, no podia negarme.

―¡Si, claro! ¡Pasaré por ti! ―él sonrió y me saludó con una mano antes de volver al Jeep de Stiles quien nos miraba extraño.

Solté una pequeña risa y entre a mi edificio, sintiendo mi corazón palpitar con fuerzas, incluso si no lo queria. Apenas y conocia a Scott, como se supone que me volviera tan... cursi.

Mi apartamento no era muy grande, más bien era un monoambiente, no necesitaba mucho, solo mi cama, una mesa para hacer las tareas, un baño y una cocina pequeña. Después de vivir en grandes lugares como el recinto de Nueva Orleans o el internado, tener un lugar solo para mi se sentia muy bien.

Me bañe a eso de las seis de la tarde, luego de cenar un poco de la comida que habia sobrado la noche anterior. Me vestí con una blusa verde y unos jeans ajustados y me puse unas botas de poco tacón. No sabia como eran las fiestas del pueblo, pero supongo que no eran muy diferente a las que las brujas hacian en el internado a escondidas de Alaric.

Recibí el mensaje de Scott a las siete de que ya estaban abajo, por lo que me apresure a tomar mis cosas y bajar por el elevador.

Scott ya me estaba esperando con la puerta del Jeep abierta. Me dedico una sonrisa nerviosa mientras revisaba mi ropa.