ÍNCUBO - [Yoonmin]

밤 - 1

El día en el que Yoongi supo dónde quedaba la habitación de Jimin, no había parado de ir.
No podía negarlo, aquel pelirosa de lindas mejillas era como una especie de droga visual. Simplemente no podía dejar de verlo, porque era hermoso, y era una buena fuente de inspiración para sus cuadros.

Siempre lo observaba sentado desde aquel otro árbol, Jimin tenía la mala costumbre de dejar la ventana ligeramente abierta. Podría ser peligroso, pero con Yoongi viéndolo casi toda la noche, era imposible.

Sería algo así como, ¿un demonio guardián?.

Pero esa noche en especial, Yoongi había dejado que sus estúpidos impulsos y curiosidad le jugarán en contra otra vez.
Entonces, allí estaba él, algo asustado de que Jimin despertara y pudiera verlo, no podía predecir su reacción, a pesar de lo dulce que se veía, no tenía ni la menor idea de cómo actuaría su pequeño algodón.

Y sí, ya había comenzado con los apodos cursis. No podía negarlo más, ese lindo humano lo tenía babeando. Tenía algo atrapante, algo que Yoongi estaba tratando de descifrar cada noche que iba a verlo.

Era realmente fascinante poder verlo de cerca, podía ver cada detalle de su rostro estando sentado, levitando a su lado.
Su cabello tan suave, como un algodón...
Sus mejillas eran tan bonitas, que quería poner sus manos en ellas, pero sería un mala idea, terminaría despertándolo.

Sus pensamientos pararon completamente al escuchar pequeños balbuceos que provenían del pequeño pelirosa

«Gatito... v-ven»

Lo que pasó después fue letal para Yoongi. El lindo algodón hizo un pucherito triste a causa de sus sueños.
El pelinegro podría jurar que se iba a derretir de la tierna escena que veía, era demasiado para su pobre alma.
Después de casi dos semanas de haberlo visto por esa ventana, tenerlo ahora tan cerca era lindo, se sentía raro, pero era una rareza agradable...

«-¿Qué me hiciste Jiminie?»