Pt. 6

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cabello de la profesora contra su pecho, la lengua de la profesora, la saliva, la temperatura, era todo una experiencia con los dioses olímpicos.

Katherine, notaba los tirones de cabello que le daba nicole debido al disfrute, nicole decidió voltear ella la escena y se volvió sobre su amada, sus enormes pecho morenos quedaron descubiertos y fueron presa del deseo y hambre de nicole, era comparada a un becerrito hambriento buscando qué comer, los sonidos de la boca y lengua chupando eran algo que las paredes podían escuchar y enloquecer. Los gemidos de la morena siendo devorada eran el motor que hacía que nicole se excitara más y más al chupar. Las piernas de ambas volvieron a entrecruzarse esta vez sus sexos se besaban en un muy húmedo y acalorado ritual amoroso. El suave ambiente entre ambas se torno salvaje, nicole estaba en el lado superior, moviendo su cintura contra el sexo de su profesora de manera intensa, una serpiente con tanta agilidad, sus senos bamboleaban al ritmo del placer arriba y abajo, en medio de toda esta excitación, se veía la morena sudada y jadeando, sus enormes pecho se movían al compás, ambas se miraban a los ojos, y se decían cosas sucias en medio de esto.

Katherine pensó rápidamente un rico plan, ella tenía un strap en su closet (strap es un juguete sexual que se compone de un pene de goma y un cinturón, es usado por las mujeres para penetrarse)

Veo que tienes tus juguetes - dijo nicole sabiendo lo que venía a continuación.

Espero saber usarlos, estoy oxidada, respondió katherine.

Cómo por instinto, al ver a su amada morena colocarse en la cintura su instrumento, Nicole eligió su posición del perrito, como todo una mascota ante su dueña, sus nalgas tiernas , adornada de varias estrías, era una chica sin igual, katherine deslizó suavemente la punta del dildo en la entrada de la vagina de la chica, cosa que provocó un gemido agudo, Katherine escupió entre las nalgas de ella, jugueteó más con la punta del objeto, parecía un pincel pintando un lienzo.

Nicole sentía como el manantial entre sus piernas se hacía más abundante, en aquella posición, siendo dominada, siendo azotada por las manos de su amor platónico hecho realidad, el dildo allá atrás hacia su trabajo pues los suaves roces la hacían enloquecer, estaba desesperada por sentir como era llenada. Gemía implorando por serlo. En cambio, la maestra gozaba experimentar los jadeos intensos acompañados del inmenso manantial a causa del placer que vertían desde su joven sumisa. Esta vez ya se decidió a embestir suavemente, parece ser que al penetrar hubo una enorme descarga eléctrica que recorrió todo el cuerpo de la muchacha, pues se curvo de una manera abrupta dejando salir un agudo gemido lleno de lujuria.

A nicole sentir lo que pasaba, sintió la enorme descarga eléctricas qué empezaba por su húmedo coño, terminando en sus pechos, estaba siendo embestida suavemente, su espalda arqueada, disfrutaba como se deslizaba por toda su cavidad, se sentía llena, casi estallando de placer, las embestidas ahora cambiaban de ritmo y se hacían más salvajes. El sonido de la pelvis de una y las nalgas de otra enloquecía, katherine deliraba al ver tan
perfectas nalgas ser azotadas y la joven gemir pidiendo más, lo que condujo a qué ella la tirara del pelo mientras decía cosas sucias.

--si, si, si que rico, no pare mi maestra!!! Gemía la joven.

¡Callate perra! Aquí quien decide soy yo, no te muevas quédate ahí..

Las nalgadas se escuchaban como latigazos fuertes, los gemidos abundaban. Nicole por otro lado, se sentía sin respiración, apretaba las sabanas hasta más no poder, sus gritos se escuchaban ahogados contra la cama, su espalda arqueada hasta más no poder, ahí era el momento antes del gran final, solo decía:'' no se detenga se lo imploro, siga, siga. En cambio :'' ¡¡callate zorra!!

Si, si. Si!!!! Ahí viene, ahhh!!

Mientras gemía, empezó a convulsionar del placer, se retorcía a causa de la inmensa corriente placentera que recorría su cuerpo húmedo . Katherine, en cambio, aprovechó esta jugada mientras la joven estaba en la misma posición aun y, ya no usaba el instrumento sexual más bien, ahora usaba su lengua maliciosa, empezó por la espalda baja, se deslizó a ambas nalgas, a la línea divisoria de esas dos montañas para morder, besar y lamer, uso sus manos para abrir mas espacio a su lengua aquel recto estaba humedecido, el sexo de aquella joven por igual.

Nicole sentía como la lengua de katherine se deslizaba por su espalda baja, luego en sus glúteos y por último en medio de sus nalgas, estaba aturdida por el orgasmo anterior, solo emitía gemidos ahogados por la sabanas mientras meneaba las nalgas al ritmo del placer, ya se encontraba cansada de la misma posición, para más disfrute, decidió colocar a katherine de frente sobre la cama y sentarse en su rostro cabalgando de espalda mientras las manos de su amada morena separaban sus nalgas e introduciendo su lengua cual perro sediento en el agua en su línea divisoria, estaba sintiéndose en la sima de semejante placer sus pezones sentían la pequeña corriente, cada vez se humedecían mas, estaba preparandose para su segundo órgasmo.

Katherine estaba disfrutando la vista de nicole de espaldas a ella, disfrutaba comer aquellas nalgas cual filete, sobretodo, los gemidos acompañados de jadeos profundos emitidos por la jovencita. Se podría decir que estaba casi tan excitada como ella porque disfrutaba de ver el joven cuerpo de la joven, de aquellas acrobacias en el acto, de aquella experiencia que mostraba,así qué decidió invertir las posiciones, así qué sentó a la joven de frente al espejo que estaba en la parte posterior de la cama, y comenzó a masturbarla, solo se observaba el cuerpo desnudo de la joven con su acompañante en la espalda mientras ella la masturbaba con una mano, sosteniendo un seno con la otra para acariciarlo, provocando asi que la chica gimiera retorciendose. Ya que su boca estaba cerca de uno de los oídos de la chica, está aprovechó pasando la lengua húmeda, también diciendo palabras sucias:

--¿quién es la perrita de la profesora?

Yyyyyoo…. Ahhhggh, decía en medio de su gemido la jovencita.

Mi Amada Profesora Donde viven las historias. Descúbrelo ahora