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Narra Paige

No podía creer lo bien que se ve, joder, estaba tan preciosa cómo la primera vez que la vi. Ella trae puesto un vestido completamente negro de los que son ceñidos al cuerpo, con unos tacones rojos que le hacían combinación con su labial y su cartera. El maquillaje era simple a excepción del labial que le daban un brillo único a su cara. Traía el pelo recogido en una coleta alta que dejaban a la vista unos aretes con un collar del mismo color que su vestido. Ella estaba junto a Fran, Gabriel y Clarisa en un sofá que estaba en una de las esquinas de la casa. Todos se estaban riendo de algo que no lograba escuchar por lo largo que estábamos.

- Hey Paige, felicidades por las tres anotaciones, ¡jugaste excelente! -me felicitó Lorenzo mientras que iba caminando hacia dónde estaban los chicos, mientras iba saludando a todos los que estaban en la fiesta.

– Gracias, tú también jugaste muy bien -le elogié de vuelta.

- Gracias, bueno, te dejo porque veo que vas hacia donde tus amigos. Espero verte en los juegos que hay atrás, nos vemos -se despide guiñándome un ojo lo cual espero que sea cómo amigos.

Lorenzo no es feo, es alto con un bronceado increíble que parece irreal, tiene unos ojos negros que reflejan la oscuridad pura. Su mandíbula estaba bien marcada como el resto de su cuerpo. Y lo sabía ya que en sus fotos de su Instagram tenía varias sin camia que se había hecho en la playa en estas vacaciones. Trato de ignorar todo esto y sigo mi camino hacia los chicos, los cuales me acaban de ver y me están haciendo señas para que vaya hacia dónde están.

- Oigan, que bien se ven -les digo apenas llego. Las tres traen puestos vestidos y tacones, lo cual me parece gracioso ya que se ve como si lo hubieran planeado. Sólo que el vestido de Fran es blanco y el de Clarisa es azul marino y el de Hanna negro. Por otro lado, Gabriel traía puesto un pantalón negro con una hoddie igualmente negra y con sus tennis blancos favoritos.

- Gracias, tu igual te ves super guapa, buena elección -me respondieron los chicos con una sonrisa.

- Bueno, ¿qué quieren jugar primero? ¿Beer pong o La carta? Sólo que esta vez cómo no hay alcohol, las reglas del beer pong cambian, en vez de beber alcohol será algo misterioso, si no logran que la bolita entre al vaso deberán tomar lo que hay en el vaso más cercano, es divertido, ya verán -nos alienta Gabriel

- No me digas, el típico cliché de las películas o libros, siempre son los mismos juegos, la botella, las cartas, siete minutos en el cielo o verdad o reto. ¿Enserio no pueden ser más creativos? -les contesté rodando los ojos disgustada

- Tiene razón Paige, siempre es lo mismo -me apoyó Hanna. Los demás se quedaron callados y sólo asintieron.

Sinceramente prefiero la carta, no sé qué puedan tener los vasos así que mejor me quedo con lo seguro -hablo finalmente, ya que los demás lo siguen pensando y no han dicho nada

- Yo igual -responden las chicas al unísono finalmente
- Bueno, vamos que ya van a empezar la ronda -nos dice Gabriel mientras que todas nos íbamos levantando del sofá.

Caminamos por un pasillo que estaba a un costado de dónde estábamos. Llegamos finalmente a la puerta trasera y la abrimos, en el jardín tenían unas de esas mesas elegantes con sus sillas, una piscina, al otro lado de la piscina habían sillas playeras. Al final de la piscina habían unos largos troncos, cada uno frente al otro con una fogata en medio de estos, también habían unos pequeños en los lados lo que hacía que se formara un círculo para que ninguno quedara sólo. En estos troncos estaban Mia, Richard, Nathaly Lorenzo, Eimy, Fabricio y Melany, casi que todos éramos de algún equipo, sólo mis amigos no. Las otras chicas que habían eran parte del equipo de volley, del cual también era parte, sólo que la capitana de este era Melany. Caminamos hasta dónde estaban ellos y se fueron sentado en orden, ya que la fila estaba formada por mujer y hombre. Por lo que Gabriel se sentó después de Melany y después le siguió Fran, después Henry, luego me senté yo, después vino otro chico del equipo, creo que se llama Logan, no lo sé, no le he hablado mucho, es nuevo en el instituto y finalmente se sentó Hanna.

- Bueno, ya estamos todos, ¿saben las reglas verdad? Son fáciles, si se les cae la carta tienen que besar a la persona. Empezamos por Mia -nos aclaró Rich, igual todos ya la sabíamos, digamos que hacemos fiestas más de lo adecuado y por más raro que parezca, esta es la primera que hacemos sin alcohol. No me molesta, sinceramente me da igual, siento que la diversión no pertenece al alcohol, los adolescentes de ahora quieren normalizar el uso del alcohol y hacen que parezca que es mucho mejor solucionar sus problemas alcoholizándose y las cosas no son así. Hay demasiados adolescentes que tienen problemas de alcoholismo, pero nunca se dan cuenta de ello ya que lo tienen muy normalizado.

Además, ahora que recuerdo, el sábado tengo que viajar a Birmingham ya que tengo un partido de voleibol. Y para mi desgracia, siempre nos hacían exámenes de sangre para saber si habíamos consumido alcohol o incluso una droga y de verdad no me quería arriesgar a eso.

Me podría hasta ganar una expulsión y mis padres me matarían por ello. A pesar de que ellos trabajan demasiado ya que los dos son dueños de grandes empresas gastronómicas y de restaurantes alrededor del mundo, siempre han estado muy presentes en mi vida, nunca han faltado a ninguna actividad importante, incluso vienen casi que a todos mis partidos en especial papá, dice que verme jugar mis partidos les recuerda el de joven y que el siente la emoción cuando juego cada uno de esos partidos, ya que el también experimentaba lo mismo, pero hoy no pudieron ya que salieron de viaje porqué iba a inaugurar un nuevo restaurante y vuelven hasta mañana temprano. Pero no me importa, no era un partido importante, igual sé que me lo compensarán pronto y no hablo de una manera monetaria, las veces que les ha tocado faltar a un evento importante, las cuales han sido muy pocas, me llevan de vacaciones todo un fin de semana con ellos y tenemos de regla que no se usan celulares para nada que tenga que ver con trabajo, lo cuál es muy importante para mí.

El juego empieza a ir muy bien hasta que llega donde estoy yo, casi se me cae la carta cuando me la estaba pasando Henry, pero por dicha no pasó. No voy a mentir, el chico es atractivo, tiene el prototipo de chico perfecto, ojos celestes, piel un poco bronceada y cabello castaño. Tiene fama de ser chico rebelde y su vestimenta y actitud lo confirma, incluso trae una perforación en su labio inferior, pero definitivamente no es con quién saldría. Y les voy a explicar porque, lo que pasa es que a mí me gustan las mujeres, pero casi nadie lo sabe, sólo mis padres, ya que me sacaron del closet sin yo querer, pero eso es otra historia, no es el momento. Y también Clarisa, Fran y Richard. Además de Taylor, que es la primera y única chica que besé en mi vida, nunca fuimos novia, simplemente nos besábamos a escondidas para que no nos descubrieran, pero nada pasó después de eso y hasta el momento no se qué es de su vida ya que después de salir de la primaria se fue a Estados Unidos. Hace poco le mandé algunos mensaje para contactar pero aún no me ha respondido

- Te salvaste de mí, Paige, pero la próxima no va a ser así -me dice seductoramente humedeciéndose los labios y guiñándome un ojo apenas la pasa. Pero cuando iba a contestar otra cosa me distrajo. Mierda, ¿enserio se le tenía que caer la carta a Hanna? ¿No podía ser a otra persona? La que fuera, pero ella no.

- Uy, vamos a tener un beso esta noche, a ver, tiene que durar como mínimo cinco segundos -les dijo Nathaly riendo al igual que los otros, las únicas serias éramos ella y yo.

Yo sólo no quería ver esto, por lo que tenía que salir de ahí, sólo le di una mirada de reojo a ella, me levanté y les dije que iría por refresco. Pude notar como ella me volvió a ver un segundo y se sintió incómoda, no entiendo el por qué, pero no quería verlos, admito que no soy celosa, pero no es agradable para la vista de nadie ver a la chica o chico que te guste besándose con otra persona.

RaméDonde viven las historias. Descúbrelo ahora