°•Una familia no tan familiar•°[PAPERHAT]

006

🐊🐊🐊🐊🐊🐊🐊🐊🐊🐊🐊🐊🐊🐊
Aquellos niños caminaban por los pasillos del orfanato, se dirigían asía la oficina de la señorita Rose, pero solo uno estaba un tanto nervioso por lo pudiese pasar.

- Que pasa? Acaso tienes miedo Slug? – decía en tono de burla la pequeña demente.

- Pff yo miedo claro que no, no digas mentiras... y deja de mirarme así – decía mientras se cruzaba de brazos y cerraba los ojos un poco indignado.

- si tienes los ojos cerrados no sabrás por donde caminas cerebrito.

- tu cállate.

- como quieras... ven es por aquí.

- la oficina queda por allá.

- no entraremos por la puerta, si lo hacemos cualquier idiota podría vernos y sospechar un poco sobre lo que estamos haciendo o algo, hay un atajo por aquí y te saca directo a la oficina, ven primero tenemos que bajar.

- si tu lo dices.

Y así fueron bajando poco a poco, avanzaron por un senderó oscuro parecía un túnel, y si, era un túnel.

- Oye aquí hay dos caminos.

- hay no te pongas nervioso estos pasillos son los mismos del orfanato están perfectamente alineados – decía eso mientras caminaba asía un senderó del lugar.

- Como sabes eso?.

- Que nunca has visto los planos del orfanato?.

- No.

- Eso explica mucho, mira cuando llegue aquí la señorita Rose se encariño con migo, al perecer aparte de parecer una niña muy tierna le encantaron mis características de alguna manera, así que decidió mostrarme todos los secretos del lugar, además llevo tanto tiempo aquí encerrada que si me dejas en cualquier habitación con los ojos vendados sabré perfectamente asía donde avanzar, tal vez me veas distraída en cualquier momento y pienses que no se asía donde avanzar pero en realidad me sé este lugar de memoria.

- En pocas palabras, este lugar no es nuevo para ti y te lo sabes como la palma de tu mano.

- Si... mira ya llegamos solo hay que subir.

- Ok.

Una vez arriba (ósea en la oficina) abrieron los cajones de los papeles de los niños y sacaron los de Flug.

Cuando estaban por irse se escucharon pasos y escucharon como alguien intentaba abrir la puerta, Alicia actuó rápido y le dio los papeles a Slug.

- Bájate y quédate ahí – Dijo la niña, Slug solo le hizo caso.

- Alicia que haces aquí? – se escucho la voz de una mujer

- Nada, solo quería las llaves de la cocina ya que se me antojo un pudin.

- Te las daría pero la ultima vez te los llevaste casi todos, tuve que ir por mas – miro a la pequeña con el ceño fruncido.

- No es mi culpa que sean deliciosos... por cierto, ¿No se supone que deberías estar en una junta?

- Si, pero la pospusieron para la otra semana, en fin como te va con eso de que adoptaron a tu amigo – pregunto en seco

- Bueno pues... aun me siento triste por eso ya que... - se escuchaba su voz triste.

- ... Sabes, que el mundo entero se joda por no saber apreciar tus lindas características, al parecer la mayoría sigue con lo de "encontrar a la niña perfecta" cuando nadie en este puto mundo putrefacto es perfecto – si, no tenía ni una pisca de respeto por tener a una niña frente de ella.