poemas del ayer y el hoy

Miradas

Veo la felicidad que emana tu cuerpo,
Veo con la alegría que sales y caminas por ahí,
Veo tu actitud positiva a la vida,
Y veo tus ganas de vivir,
Veo tus buenas intenciones,
Y veo todo lo bueno en ti,
Pero... Veo y presiento algo más,
En tu iris veo la tristeza,
Veo como guardas en tus párpados las lágrimas de dolor,
Presiento que tu vida no es vida,
Y que se ha vuelto gris igual que tu corazón,
Presiento golpes en tu tono de voz,
Como presiento insultos en vez de amor,
Observo gritos en tu pelo con nudos de soledad,
Las miradas al horizonte buscando un futuro mejor,
Van desapareciendo igual que el amor,
La vida desaparece con cada segundo a su lado,
Veo a cada minuto sus mentiras,
Y a cada hora la violencia no puede faltar,
Delante de tus hijos los golpes vienen pero no van,
Aferrada a la soledad,
Amiga del llanto,
Socia de la mentira,
Con cuero de chancho sostienes golpes sin parar,
Veo que poner su vida delante,
Para que no toquen tus hijos,
Es el único actor de amor que puedes dar,
La sonrisa y el te amo solo queda para ellos,
Para que vean lo fuerte que eres,
Y que nadie los pueda lastimar,
Sostiene tu cuerpo sin duda alguna,
Y las lágrimas son carcajadas que vienen y van,
Sin saber que tus hijos saben toda la verdad,
Y que son igual de fuertes que tú,
Por qué protegen a su madre,
Con la única arma que ellos tienen,
Abrazarla y decir.... Te amamos mamá.