Cerca De Ti

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Se podía ver a nuestro castaño tirado en su cama, le dolía la cabeza a más no poder, se levantó de la cama y fue al baño a lavarse la cara.
Jin: No debí quedarme a beber anoche.
Al lavarse la cara se dio cuenta que un líquido rojo escurrió de su cuerpo, alarmado pensado que era sangre hizo algo de presión sobre su cuerpo para detener el fluido del líquido pero el aroma era muy diferente al de la sangre.
Jin: ¿Qué es esto?
Al oler su mano no pudo distinguir el olor pero escucho un ruido provenir de su cuarto, al asomarse pudo ver a Yena sujetando su cabeza con el cabello completamente desordenado y sin ropa como el amaneció al principio.
Ambos se miraron unos segundos y está le arrojó una almohada seguido de un puñetazo en el estómago para que no la mirara.
Jin: No era necesario lo segundo.
Yena: ¿Qué fue lo que me hiciste?
Jin: ¿Disculpa? No nos hagamos falsas ideas, puede que simemente hayamos caído ebrios en la cama y ya.
Yena: Tratemos de recordar okey.
Yena estaba usando la sabana para taparse y Jin se puso ropa interior y un short.
A los pocos segundos varios recuerdos borrosos llegaron a la mente de Yena.
2 de la madrugada.
Se podía ver a cierta Yena y castaño besándose en el dormitorio de este último.
Yena: Quítate la camisa.
El humano hizo caso sin desobedecer la orden y se quito la camisa, por su parte la Yena mordió un poco el cuello de este y dejó la marca de su labial allí para después seguir con el acto pero subiendo de tono.
Yena: Se más brusco maldita sea, estas desperdiciando tu arma de allí abajo.
Jin: ¿Segura?
Yena: Recuerda con quien hablas, no soy para nada delicada.
El humano hizo caso y comenzaron a escucharse temidos fuertes por todo el cuarto.
Yena: ¡Ah esto me refería!... ¡E-eh espera ¿qué haces?!
Después de varios recuerdos borrosos sobre cómo el humano la dominaba y está solo gemia ahogadamente con una almohada Yena regresó al presente.
Presente.
Jin: ¿Recuerdas algo?
Yena: Si no hicimos nada no te preocupes.
Jin: Ah gracias a Dios, me hubiera sentido muy mal si te hubiera hecho algo sin que estuvieras en tus 5 sentidos.
Yena: *No puedo decirle lo que pasó, será algo que me guardaré hasta la tumba*
Jin: Iré por unas pastillas para el dolor de cabeza, ¿quieres desayunar algo?
Yena: Seguro.
Jin: Si es es el caso siéntete libre de usar la bañera y algunas prendas de Kurumi.
Al salir de la habitación Yena se recargo en la cama y siguió pensando en la noche anterior.
Yena: ¿De verdad estoy haciendo bien guardandole algo como esto?
Yena intento recordar mas aun de la noche anterior y lo logró pero no era mucho más de otras rondas de pasión y unas cuantas declaraciones de amor mutuas, solo había algo que le sacaba de sus casilla un recuerdo en especifico.
Yena: ¿Qué es eso de "Te quiero en mi harem"? Ahhg a la mierda voy a decirle la verdad.
Bajo las escaleras pero al ver como este acomodaba toda la mesa y preparaba el desayuno se calmo.
Yena: *Bien voy a ser directa* Necesito hablar contigo.
Jin: Oh ya bajaste, ¿si te diste un baño?
Yena: Es más importante esto.
Jin dejó de cocinar y se sentó en la mesa, Yena hizo lo mismo, tomó algo de aire y habló.
Yena: Te mentí.
Jin: ¿Sobre qué?
Yena: Sobre lo de anoche si hicimos algo, ¡pero no te sientas mal ni nada por el estilo okey, digo ya somos adultos los 2 y no fue nada tan malo! D-solo fueron unas cuantas veces y ya.
Jin se dio un golpe con la mesa pero Yena siguió hablando.
Yena: Además que ambos nos declaramos el uno al otro.
Jin: ¿Nos declaramos?
Yena: Si pero algo me causa conflicto, "Te quiero en mi harem" ¿que significa?
El castaño se puso pálido ante la frase,  no sabía que contestar pero decidió hablar con la verdad.
Jin: Bueno te lo voy a explicar pero no me juzgues.
El castaño le explico lo sucedido con Liz y Yena lo miró de forma seria poniendo toda su atención, al terminar de hablar esta suspiro y con una sonrisa le dio un leve golpe en la frente y después un beso allí mismo.
Yena: A veces puedes ser tan idiota, y pensar que tenía razón.
Jin: ¿Sobre qué?
Yena: En la academia habíamos hecho una apuesto yo y King contra los demás animales sobre sí formaría tu harem y al parecer ganamos.
Jin: ¿Tan mal me veía antes?
Yena: Si demasiado, de todas maneras espero y te hagas cargo por lo que hiciste.
Yena se acercó y levantó el mentón de Jin para darle un beso en los labios, al separarse tenía un sonrojo en el rostro y salió rápido de la casa gritando.
Yena: ¡Voy a volver esperando una respuesta y más vale que sea buena!
Jin: Necesito ir a trabajar, necesito despejarme.
Al ir al trabajo Jin comenzó su rutina de todos los días solo que ahora estaba atendiendo como doctor general a los pacientes que venían, después de unas horas se encontraba atendiendo a un pequeño marcupial.
Jin: Bien algo de té será suficiente para calmar en dolor de estómago, hierba seca, si no funciona dele estos medicamentos puede pedirlos en el cuarto de al lado.
Marcupial mayor: Muchas gracias doctor.
Jin: De nada, vemos marcupial niño, unos 10 años, dolor de estómago interno y abdominal, atendido a las 18 horas...
Mientras hacía el registro del paciente escucho como alguien llamó a la puerta.
Jin: Adelante.
Al abrir la puerta Jin seguía escribiendo en la libreta pero una mujer koala se sento frente a él con un niño en brazos.
Jin: Buenas tard-
Los 2 se reconocieron al instante, era imposible no reconocerla.
Yukari: ¿Jin?
Jin: Yukari-san es un gusto verte de nuevo.
La koala abrazo al humano aunque la fuerza del abrazo fue mucha como para escuchar un crujido proveniente del brazo derecho de nuestro protagonista.
Yukari: Yo lo siento.
Jin: Esta bien, ¿es tu hijo?
Yukari: Si pero soy madre soltera.
Jin: Ya veo, mejor no hablar de ese tema.
Yukari: No hay problema no me siento Incomoda sobre eso, se que hago lo que puedo por el.
Jin: ¿Y bien que tenemos hoy?
Yukari: Bueno últimamente esta padeciendo de insomnio además que ah perdido algo de apetito.
Jin: Hmm veamos que puedo hacer, abre la boca.
Jin hizo una revisión por oídos y boca del infante, además de escuchar el ruido intestinal de este.
Jin: Según lo que recuerdo ustedes comen eucalipto, ¿acaba de empezar a comerlo?
Yukari: Tiene un año que come bastante bien el eucalipto.
Jin: Hmm ¿nada más que le hayas dado?
Yukari: No que yo recuerde.
Jin: Bien, es muy pequeño como para darle pastillas o algo por el estilo, lo mejor sería darle té caliente en la noche para ver si hace efecto y logra conciliar el sueño, y sobre la pérdida de apetito creo que tiene que ver un poco con el insomnio, es normal que cuando las personas no duermen tiendan a comer más pero hay casos en los que pierden el apetito, si sigue así tendré que hacer un estudio.
Yukari: Ya veo, espero y no lleguemos a eso.
Yukari cargo al niño y salieron de la sala.
Yukari: Es un gusto ver que cambiaste tanto Jin-San, espero volver a vernos pronto.
Jin: Seguro, veamos que toca ahora.
Apenas termino su rutina Jin salió del hospital y se quedó pensando en un parque sobre todo lo que estaba pasando últimamente, tal vez le vendría bien hablar con alguien de confianza.
Jin: Si mal no recuerdo dejó su dirección en un papel.
Busco en sus bolsillos y efectivamente estaba la dirección de la Koala escrita, tal vez sería bueno ir a hablar un poco.
Jin: Aún no es muy tarde, espero y este en casa.
Al llegar al lugar noto que era una casa bastante grande y tradicional, tocó la puerta y espero a que alguien abriera y así fue.
Yukari: Oh Jin-San ¿qué te trae por aquí?
Jin: Quisiera hablar, no es sobre tu hijo ni nada del trabajo.
Yukari: Seguro pasa.
La koala se hizo a un lado y dejó entrar al humano, la casa era muy bonita pues las puertas eran de una tela casi transparente que dejaba ver la silueta de lo que la persona estaba haciendo, además que el piso era de madera tallada y las luces tenían una especie de plástico con figuras como estrellas que le daba un gran toque al hogar, se sentía como viajar al pasado en pocas palabras.
Jin: Veo que tu casa es muy bonita.
Yukari: Bueno soy una diseñadora de interiores aunque me gusta un poco más lo antiguo y clásico.
Sé sentaron en la mesa mientras el niño estaba jugando.
Jin: ¿Y como se llama?
Yukari: Yuki, ¿de que quieras hablar?
Jin: Bueno muchas cosas han estado pasando últimamente y necesitaba saber la opinión de alguien, y por lo que recuerdo eres bastante sincera.
Y así la platica se fue dando, al poco tiempo Jin descubrió que el ex-esposo de Yukari terminó volviendo a los bajos mundos y eventualmente ella lo denunció para que lo enviaran a la cárcel y controlando las visitas del menor.
Yukari: Ahh la adultez se veía mejor en las películas infantiles.
Jin: No lo dudo.
Yukari: ¿Entonces estas formando tu harem?
Jin: A-algo así, la verdad nos e siento más que ellas se están juntando conmigo que yo juntandolas a ellas.
Yukari: Bueno las mujeres tendemos a luchar por lo que queremos, así que supongo que tienes suerte.
Jin: Gracias, yo ya me desahogue pero si quieres hablar tu adelante.
Las horas pasaron y ya era de noche por lo cual Jin tenia que irse.
Yukari: Ahh esto me sirvió mucho, te agradezco por venir.
Jin: Yo igual, gracias por aceptarme en tu hogar.
Yukari: Antes de que te vayas ten es mi numero telefónico por si quieres llamar y volver a hablar o vernos.
Jin: Seguro.
Al salir de la casa se encaminó a la suya, aunque hizo un pequeño desvío y pasó a una tienda de conveniencia.
Jin: Tal vez me vendría bien algo de fruta.
Compro unas cuantas frutas y regreso a casa, al llegar encontró a Kurumi acostada en el sofá, la cargo a su cuarto y la acostó en la cama cubriendola con una sabana.
Posterior a eso se hizo un jugo de naranja y fue a dormir, todo estaba muy tranquilo hasta que en la noche sintió como alguien se acostó a su lado, al voltear a ver era Kurumi.
Jin: Supongo que era algo que iba a pasar.
Al día siguiente Jin despertó pero se sentía algo mareado ya se estaba haciendo algo constante al igual que las manchas de sangre en su cuello, fue al trabajo como de costumbre solo que esta vez pasó algo más extraño de lo común.
Liz: ¿Tienes un minuto?
Jin: Claro.
Liz entró a la sala junto a 2 personas.
Jin: ¿En qué puedo ayudarlos?
Liz: Verás ellos son maestros de la academia seton, a la cual tú asististe durante un período de tiempo.
Jin: Mucho gusto.
Jin se levantó y saludo a los 2 maestros, estos eran una mula y un caballo.
Liz: Quieren que alguien vaya y tenga una platica con los muchachos, ya sabes cosas sobre perseguir sus sueños y pensé que tu eras un gran ejemplo.
Jin: Seguro no le veo problema alguno, ¿qué día quieren que vaya?
Liz: Tiene una reunión con los alumnos en unas horas así que hoy.
Jin: ¿Puedo ir a si o?
Maestro: Seguro no hay problema.
Jin: Bien entonces los veo allí ¿en 1 hora?
Maestra: Perfecto, un gusto y esperamos verlo allí.
Jin se preparo para ir a la junta, al estar apuntó de salir Liz se acercó a él y lo siguió.
Liz: Yo también iré a representar el hospital.
Jin: Ya veo, bueno será mejor que vayamos antes de que se nos haga tarde.
Al llegar a la academia Jin noto que había unos cuantos cambios, pero lograron llegar al auditorio, al llegar entraron por la puerta trasera.
Maestra: Veo que están aquí, bien la exposición comenzará en unos minutos yo les avisaré cuando entren.
No pasaron mas de 5 minutos cuando ambos se encontraban ya dando una pequeña conferencia sobre su trabajo y una charla motivacional improvisada pero que salió muy bien, después de terminar la reunión ambos decidieron ir por algo de comer al centro comercial más cercano.
Liz: ¿Y dime has pensado en mi propuesta?
Jin: Ahora no, estamos en público.
Liz se acercó a él con una sonrisa y el se puso un poco nervioso ya que las personas los miraban pero decidió no ceder y atacar, suspiro para después darle un beso en los labios y tomar su mano como si de una pareja se tratara en una cita, Liz por su parte tenía el rostro completamente rojo y la mirada baja.
Liz: No debías ir tan lejos.
Jin: Bueno tu me estabas incitando.
Al poco tiempo llegaron al área de comidas y el sonrojo de Liz desapareció, comieron tranquilamente para después regresar caminando al hospital tomados de la mano nuevamente.
Liz: Sabes me gusta esto, ¿a ti no?
Jin: No lo diría de esa manera, mira te seré sincero eso de un harem es muy complicado.
Liz: ¿Entonces vas a ser mio?
Jin: Yo... No se que pueda hacer.
Liz: Mira no hay que ser tontos, se que tienes chicas detrás de ti por lo cual me gustaría hablar con ellas a solas ¿podrías contactarlas para que hablemos hoy en la noche?
Jin lo pensó unos momentos pero ante la constante presión de Liz terminó cediendo.
Jin: A quién quieres que llame.
Liz: A todas con las que te has desenvuelto últimamente, eh notado que vienen en ocasiones y hablan contigo, incluso la madre Koala de hace un día o 2.
Jin: Si algo sale mal será tu culpa.
Liz: Y me haré cargo tomando té como mío así que es ganar ganar para ti.
Jin: Es una pésima idea.
Liz sonrió y Jin llamó a cada una de las chicas para decirles que fueron hoy a su casa excepto a Kurumi pues ella estaria allí obviamente, al llegar la noche Jin estaba muy nervioso afuera de su casa, podía escuchar las voces de todas hablando entre sí.
Liz: Esperame aquí.
Jin: Ahh está bien.
Liz entró a la casa llamando la atención de todas.
Liz: Buenas noches, antes de comenzar a hablar eh de presentarme, soy Liz compañera de trabajo de Jin-San y yo soy quien le pidió que nos juntáramos todas aquí por algo muy importante.
Todas la miraron sosprendidas pero decidieron prestar atención a lo que tenía que decir.
Liz: Buen dicho eso podemos comenzar a hablar.
Por otra parte muy lejos de Japón se podía ver a cierta loba adulta muy ansiosa preparada par un viaje que le cambiaría la vida.
Ferryl: Bien entonces así son las cosas, mi hermana y yo iremos de vuelta a la ciudad y ustedes se quedarán en las cercanías, si no volvemos en 2 meses hay 2 opciones, o encontramos al humano o decidimos quedarnos allí así que ya saben, si pasan los 2 meses siéntase libres de seguir avanzando.
La manada se despidió con un emotivo abrazo y las hermanas emprendieron un viaje directo a la ciudad.
Ranka: ¡Haya Voy Jin!
El viaje fue algo largo, más que nada por el hecho de que estaban en mitad del bosque y para su desgracia después de pasar tanto tiempo sin salir de este tuvieron ciertas dificultades pero al final lograron salir y vieron la ciudad a muchos kilómetros de distancia.
Ferryl: Si seguimos avanzando a esta velocidad 1 hora podremos llegar a unas cabañas y descansar para seguir mañana con el viaje.
Ranka: Entonces vamos.
Se podía notar el entusiasmo en la voz de la menor y su hermana sonreía un poco pero también estaba preocupada pues era un viaje en el que todo podía pasar, no estaba segura si un humano tan frágil como lo era Jin pudo haber sobrevivido al accidente y sentía cierta preocupación no sólo por el sino por el efecto en cadena que provocaría en su hermana.
Ferryl: Más te vale haber sobrevivido humano.
Al seguir avanzando eventualmente llegaron a las cabañas y lograron alquilar una, entraron y vieron que había aguas termales.
Ferryl: Debe ser por que esta cerca de las montañas la carretera, me iré a dar un baño.
Ranka: Yo iré después de ti.
Ferry se quito la ropa en el cuarto de las aguas termales, dejó su ropa en el estante y agarro un par de toallas, una para su cuerpo y otra para su cabello además de una pequeña tina de madera y una barra de jabón, al entrar al agua sintió una gran relajación, era bastante cálida pero no te quemaba lo cual acompañado con la fría noche caía de maravilla.
Ferryl: Son una buenas aguas termales, aunque debería terminar rápido para que entre Ranka.
Después de asearse Ferryl salió de las aguas termales con su ropa ya puesta y entró al cuarto pero se sorprendió al ver a su hermana sujetando una foto del castaño junto a un suéter de este dándose placer.
El tiempo se detuvo instantáneamente y Ferryl salió cerrando la puerta lentamente mientras Ranka intentaba detenerla.
Ranka: ¡L-lo malinterpretas!
Ferryl: Y-yo no soy quien para decirte que o no hacer pero si piensas hacer eso mínimo pon seguro en la puerta.
Ranka bajo la mirada por la vergüenza y fue a darse un baño.
Ferryl: Que vergüenza, ya hablaré con ella después.
Miró la foto del castaño por uno segundos y después suspiro.
Ferryl: Una parte de mi me dice que sea entusiasta pero otra parte sabe que no lo lograste, espero estar equivocada no solo por el bien de mi hermana, si a ella le pasa algo también a mi.
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Bueno aquí termina otro capítulo espero les haya gustado, no recuerdo si lo aclare en otro capítulo pero aquí Ranka ya no es la misma chiquitilla de la serie debido a que decidió madurar su estatura y cuerpo se desarrollaron logrando ser un poco más baja de nuestro Jin actual llegando a su nariz, ya en el siguiente capítulo me seguir enfocando con ella un poco más y con Jin. Ahora sin nada más que decir
ADIÓS!!!

 Ahora sin nada más que decirADIÓS!!!

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Nuestro futuro juntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora