'Amor 2×1, (BL)

Capítulo 5 💝

Llegaron al lugar donde se hospedaba Lester, y rápidamente se quitó el cinturón de seguridad para bajarse del auto.

—Es peligroso para ti trabajar en tu estado, y mucho más venir solo todo este recorrido... Procura no salir tarde, y Alimentarte bien, el pequeño lo necesitará  —

—Gracias jefe, en verdad se lo agradezco — bajó y tomó las cajas que el hombre mayor le entregaba, los postres que no se comió anteriormente, se inclinó y entró al pequeño edificio.

Zenka llegó a su departamento, solamente dos días y Lester ocupaba su mente dia y noche, no sabía nada de el, no sabía nada con respecto a su vida, o el porqué trabajaba y vivía en un lugar así, que claramente no era apropiada para el, pero le atraía, de eso estaba consciente.

Durmió poco, cuando abrió los ojos estuvo varias minutos mirando el techo de su habitación hasta que se levantó y se dirigió a la ducha, para después estar en el closet durante media hora sin decidirse que atuendo ponerse, era la primera vez que no podía decidirse en que traje se vería bien hasta que se decidió por uno azul.
Cuando llegó encontró a las secretarías murmurando entre ellas viendo a un solo lugar, siguió esas miradas y encontró a un pequeño hombre intimidado por esas miradas y murmuros.
Caminó hasta donde este estaba y con cada paso y cada mirada hacia el, las personas corrían ocultando su rostro fingiendo estar trabajando.

Lester llegó a al enorme edificio, nunca se acostumbraría a verlo de cerca, era enorme y el... Trabajaba ahí, en ese edificio tan importante, empresas Cahun.

se encaminó hacia el interior,
Cuando entró todas las secretarías lo veían mal, y hablaban entre ellas susurrandose cosas, era realmente una situación muy incómoda.

—¿Que haces aquí? ¿Porqué no subes? — empezaba a creer que el pasatiempo favorito de su jefe era asustarlo, pero eso ayudó para que todas las mujeres se retirarán y lo dejaran solo

—B-buenos días... Ya iba... —

—Entonces vamos — le señaló con una mano el camino y Lester se encaminó mientras su jefe caminaba a su lado.

Habían pasado horas desde que cada uno inició con su trabajo, zenka en su oficina y Lester limpiando y acomodando lo que podía.

—Hola pequeño, ¿ podrías ayudarme a limpiar mi oficina? — Mike apareció con su habitual sonrisa, era realmente agradable, dejó lo que estaba haciendo y entró a la oficina del vicepresidente, era una habitación grande, no tanto como la oficina del presidente, pero era prácticamente como un departamento.

—Creo que han pasado años desde la última vez que sacudieron aquí — Mike sonrió por lo que había escuchado, el menor parecía alguien tímido pero hablaba sin darse cuenta.

—practicamente si, zenka es alguien reservado... No permite que cualquiera esté aquí, cuando te lo dije el dia que te conoci lo decía enserio, aparte de mi y  las asistentes que las a dejado subir como tres veces, eres el único al que se lo permite — Lester no sabía que pensar, no sabía porqué el tenía acceso a lo que otras personas no, pero de igual forma esos dos hombres lo habían tratado bien y estaba mas que agradecido con ellos.

—¿puedo preguntarte algo? No me respondas si no quieres  — El hombre mas joven asintió cuando Mike le hizo la pregunta

—¿Porqué trabajas si estas embarazado? — Lester lo pensó un momento, no tenía porqué responder, de igual forma no era un secreto, solo se equivocó de persona al iniciar su vida amorosa, y aunque lo dejó a su suerte... Tenia a su pequeño que le hacia compañía desde antes de nacer.

—Lo necesito, quiero que mi hijo tenga lo necesario para cuando nazca—  Mike asentía repetidas veces de forma lenta

—entiendo eso, lo que no entiendo es, ¿como es que tu novio o el padre de tu hijo lo permite? —vio al pelinegro agachar la cabeza, y lo supo... El padre no lo reconoció.

—Lo siento... No quiero ser un entrom....—

—Esta bien. Él eligió otro camino, cuando le dije sobre el bebé, me pido que me decisiera del él. Solo por esas palabras el no vale la pena, y ya tiene una prometida, no lo sabía hasta ese dia que me lo hizo saber... Me equivoqué y enfrentaré las consecuencias.... Será difícil, lo a sido desde que me enteré sobre mi bebé, pero lo haré por el, o ella, lucharé por los dos— 

—Eres valiente pequeño, pero valiente.... ¿Y tu familia?— El menor suspiró con tristeza.

—Cuando se los confesé..... Ellos me echaron de casa, no he sabido de ellos desde hace mas de un mes, y creo que seguirá así hasta no se que punto —

—Te comprendo, eres joven y todos nos equivocamos, pero pocos tienen el valor que tu tienes y ...felicidades bebé...tu papi es valiente — Lester no sabía si llorar o reír, era increíble la personalidad de Mike, le estaba hablando de forma sería y después... cambió de dirección mirando hacia su vientre hablándole al bebé con un tono divertido.

Pasó el dia y no vio a su jefe desde que lo encontró y subieron juntos al ascensor.
Mike le dijo que estaba atendiendo algo muy importante, ambos salieron dirigiéndose al primer piso, y cuando las secretarías lo vieron empezaron de nuevo con los murmullos entre ellas, Mike las observaba y trataba de entender cual era el misterio.
Llevó a Lester a su pequeño departamento donde se alojaba, le fue difícil convencerlo, pero al final accedió a la solicitud y le permitió dejarlo sano y salvo a casa, no sin antes comprarle algunas comidas para que cenara tranquilo.

Al día siguiente llegó antes, y como lo imaginaba... Al ver aparecer al pequeño ayudante del último piso, las secretarías murmuraban sobre el, no sabía de que hablaban pero se hacia una idea y necesitaba estar seguro para ponerle fin a la situación incómoda que pasaba Lester cada que entraba al edificio.

Se acercó como un león lo haria con su presa y las escuchó.
"Esta detrás del jefe"  "El jefe merece a alguien como yo"  "No. El merece a alguien como Melany" "El esta manchado, y se atreve a querer seducir al jefe"   "Es tan desvergonzado, solo lo hace por dinero"   Todas se llenaban la boca con las mismas palabras, vio a Lester queriendo salir corriendo u ocultarse en algún sitio y llorar... No permitiría que se atrevieran a lastimar de esa forma al pequeño e indefenso hombre frente a el.  No tenían derecho de hacerlo, nadie lo tenía.