I Like You [Yeonjun y Tu] TXT Universe #2 Próximamente

•V•

5~ "El juego del mejor amigo"

— ¡Sam ya voy a poner la película! —Le grité a la rubia, llevaba una hora en el baño luego de que me dijera que iba a darse una ducha "rápida"

— ¡Ni se te ocurra, te esperas a que salga!

Solté un bufido y comencé a comerme las palomitas.

— ¡Tampoco te comas las palomitas hasta que llegue!— Se escuchó otro grito procedente del baño, No sé cómo le hace para saber lo que voy a hacer o lo que pienso, debe ser algún tipo de magia oscura, ok no, estoy viendo muchas películas de fantasía. Igual me las seguí comiendo, tenía que entretenerme en algo mientras Sam seguía con su ducha "rápida"

El timbre sonó en el momento que Sam salía del baño. Bajé las escaleras y eché un vistazo por el mirador de la puerta, sentí una sensación extraña en el estómago cuando ví al peliazul y su amigo esperando fuera. Subí más rápido de lo que bajé y miré a la rubia demostrando toda mi confución en mi expresión.

— Samantha dime qué hacen Soobin y Yeonjun tocando el timbre de tu puerta — Dije tratando de mantener la calma.

Sam soltó una risa nerviosa.

— Creo que olvide decirte que venían a ver Harry Potter con nosotras.

— ¡Joder Sam!

—  Me gusta Soobin —Dijo mirando hacia abajo — Quiero conocerlo más y pasar más tiempo con él, estando contigo y con Yeonjun es menos incómodo, T/N sabes que soy opuesta a la timidez pero con el es... Diferente. Ayúdame ¿si?—Con eso logró parar cualquier asomo de queja o improperio por mi parte.

— ¿Cuando me has pedido ayuda y no he estado?

Ahogó un grito de felicidad y me abrazó.

— Ya lo sabía— Dije volviendo a bajar las escaleras.

— ¿Que cosa?

—  Que te gustaba.

— ¿Soy tan obvia?

—  No te imaginas cuánto.

Luego de que entraran preparamos más palomitas y algunos bocadillos para comer durante la película, nos acomodamos en el sofá frente a la TV, Sam y yo en el medio y Soobin y Yeonjun a los costados.

Faltaba una hora para que la película acabase cuando la TV se apagó Sam intentó volver a a encenderla pero fue en vano.

— Creo que se averió—  Dijo Soobin.

— Genial — Sam se sentó en la alfombra delante del sofá— ¿Y ahora qué hacemos? Yo quería noche de películas.

— Deberíamos dormir ya.

—  ¿Son las ocho cómo vas a dormir a esta hora? —me lanzó uno de las almohadas que habían en el sillón.

— ¿Y si jugamos al Juego del mejor amigo? Así nos conocemos más—  propuso Soobin.

— Eso no existe— Negué —Además se escucha ridículo el nombre.

— Si existe, Sam y tu son mejores amigas y Yeonjun y yo también, podemos decir cosas que solo saben uno del otro, primero Sam luego tú, Yeonjun y Yo, y así empezamos de nuevo.

—  Te lo acabas de inventar — Hablo Yeonjun por primera vez en la noche ¿soy yo o estaba más callado?

— Yo no juego — dije y me senté en el sofá.

— Yo tampoco — Yeonjun me siguió.

— Comienzo Yo— Sam levantó la mano sin importarle que no quisiéramos jugar — A T/N Santa Claus le daba miedo de pequeña.

Los dos chicos no pudieron reprimir la risa.

— ¡Samantha! Se supone que eran algo así como curiosidades no cosas vergonzosas.

— ¿Es verdad?— Pregunto Yeonjun— ¿Cómo le vas a tener miedo a un señor amable que trae regalos?

— Para mi era un señor extraño que se colaba en tu casa de noche por la chimenea.

— Yeonjun no se queda detrás— habló Soobin —Todavía conserva sus peluches y duerme con ellos.

Los ojos de Yeonjun no pudieron agrandarse más y mi amiga y yo no podíamos aguantar la risa.

— Yo también se jugar, Soobin duerme con redecilla en el pelo—Las mejillas del castaño se tiñeron de rosa.

—¿Es enserio?— Pregunté entre risas.

— No es fácil mantener hermoso este cabello —Dijo mientras se peinaba con la mano hacia atrás.

— A Sam le gusta el cabello sedoso —Le guiñé un ojo al castaño y acto seguido Sam se abalanzó sobre mí para intentar aplastar mi cara con la almohada.

Me entró una risa tonta, de esas que no puedes parar y en la medida en que intentas detenerla te ries más, reía y reía mientras la rubia me pegaba con la almohada, Sam moría de vergüenza, pero quería darle ese empujoncito, que aunque fue a modo de juego encendió un ligero rubor en ambos.

—¡A T/N le avergüenzan sus mejillas! —Contraataco la rubia.

—¡Eso fue un golpe bajo! —Escondí mi cara tras la almohada.

Entre risas y vergüenza decidimos parar el juego por el bien de nuestra salud mental y por poder vernos las caras al otro día pero, intenté dormir tranquila, pero, a pesar de que tratara de frivolizar las cosas, cierto expeliazul monopolizaba mi mente.

Muchas gracias a l@s que han esperado por que actualizara este fic, really gracias porque me he demorado un montón en seguirlo espero que les esté gustando y tenganme paciencia💙💙💙