🥀Enamorado de Una Asesina🥀 [FINALIZADA]

🌬Introducción🥀

De pequeña...cometí atrocidades que marcaron mi camino a la mujer que soy hoy en día.

Me crié en un barrio...demasiado pobre, ahí debían robar para poder sobrevivir, si bien se ayudaban entre todos también se apuntaban con un arma.

Mis padres eran asesinos...
Mataban a personas por robar...

Así era la manera que comíamos, ninguno de ellos estudió, no conseguían trabajo en ningún lado y encima de todo tenían un historial bastante largo de delitos.

Por lo que el barrio en el que vivíamos era solamente de ladrones, asesinos, traficantes y muchas cosas que pueden imaginar.

Me crié en ese ambiente.

De pequeña nunca fui a un jardín, ni siquiera a una escuela.

Mis padres no tenían el dinero...

Los policías no entraban a ese barrio, sabían que si entraban nunca más saldrían.

Era una zona no peligrosa, superior a eso.

Ahí no importa quién seas, te matan si entras.

Yo...empecé a ayudar a mis padres desde muy pequeña.

Por lo usual, actuaba como si me hubiera perdido, la gente buena...me ayudaba y yo los guiaba a donde supuestamente estaban mis padres, ahí los asaltaban o incluso asesinaban si se negaban...

Corríamos...
Solo se que corría casi todo el tiempo.

Cometí...tantas cosas horribles.

Sin embargo cierto día yo quise robarle a una señora.

Esa señora era alguien que salía de noche de un depósito de dinero.

Yo le quise robar pero ella me detuvo al instante dándome un golpe en la cabeza, literalmente me dio un zape y caí al piso sentada.

Enseguida me miró furiosa y me gritó que a la gente mayor no se le robaba.

La mujer veterana me tomó del brazo y llevo con ella.

Creí que me llevaría a la policía y traté de huir lo más rápido posible, pero me metió a un auto.

Cuando me dejo bajar estábamos dentro de una gran casa.

No corrí, ni hice nada, solo pude asombrarme.

Ella me llevo dentro y una mujer la recibió amablemente.

Ella mandó a esa mujer a que me de algo de comer.

Jamás había visto una casa tan hermosa, la mujer me miró y enseguida me trajo cosas.

Jamás había comido tanto tampoco...