5.

6 1 0
                                    

Tuve un muy bien tiempo para pensar en la propuesta de Ethan ya que literalmente se había perdido de mi vista por semanas. No es que me importara muuucho pero quién invita a salir a alguien y luego tan sólo desaparece.

Espere dos viernes seguidos a que apareciera con su hoodies más grandes que él al lado de Josh cuando éste iba a visitar a Allie pero al percatarse de mi mirada no muy dimisulada mirando hacia atrás cada vez que llegaba sólo me sonreía abiertamente y me mandaba los saludos que Andrew pedía que me enviará. No tuve el valor de preguntar por Ethan, no quería sentir la mirada curiosa de Allie pero sin embargo, sabía que Josh sabía algo.

El viernes de la tercera semana (no me enorgullecía mucho llevar la cuenta), cuando pensé que Ethan aparecía en mi puerta, sólo pudo aparecer Natalie.


—Quita esa cara. Ya sé que no estás feliz de verme. —dijo mientras sacaba unos materiales de su bolso fucsia fosforescente. Bajé la mirada a sus zapatos con vergüenza y la escuché suspirar.  —Supongo que no estás así por chico no-relación.



—Entiendo que pienses que llevo una vida muy alocada en cuanto se refiere a mi compañera de cuarto pero créeme, no es así. —la escuché reír y solo levanté mi mirada para seguir observándola sacar sus materiales. La tarea era sencilla, dibujar a alguien que nos inspirará. Según Natalie podíamos intercambiar ideas y así trabajar juntas aunque en el fondo sabía que no le gustaba estar sola.  —¿A quién dibujarás? —pregunté mientras iba rápidamente por mis cosas a mi habitación y volvía a la sala. Recordando vagamente cuando Etha.. Okey. Ya. Basta. Addison. Oliver.



—No lo sé. Pensé en algo así como mis padres pero me parece algo muy trillado. Vine con la esperanza que tú ya tuvieras a quién y así me iluminarás. —mientras Natalie decía todo esto rápidamente se sentaba y sacaba su block de dibujo. Me reí e hice lo mismo que ella pero no saqué mi block, algo me decía que no haríamos nada.



—Creo que el profesor lo pidió más que todo personal.



—Como sea, lo haré aquí. —fijo su mirada en su block y yo sonreí. —Oye.. Sólo por curiosidad. ¿Quién es Ethan? —miré rápidamente a la puerta para volver mi mirada hacia ella, aunque no fue literalmente así ya que solo sentía que quería vomitar y todo me daba vueltas. ¿Drama? ¿Donde?



—¿Ah? —Natalie pasó mi teléfono por mi cara que a ciencias ciertas ni yo sabía donde estaba, lo cual no entendí su objetivo ya que seguía con mi drama encima de mi.


—Tienes como 5 llamadas de él y aún no deja de vibrar tu teléfono. Agárralo. —mi trance se volvió un poco peor y Natalie suspiró pesadamente.  —No me digas que estás teniendo un ataque de pánico. —seguí sin responderle y sólo pude escuchar un ''aló''



*


—Si contestaste tú... ¿Por qué mejor no vas tú también? —Natalie rodó los ojos y tomó mi mano, no me levante e hizo un poco más de fuerza. Me removí en la silla de la sala y Natalia me miró fijamente.



—Porque suponiendo que no estabas así por chico no-relación, me imagino que era por chico próxima-relación. —intentó jalar nuevamente mi mano para levantarme pero con mi mano libre me aferré a la mesa.



—Pero viste como me ponía...



—Como una tonta, eso es cierto. —la miré mal y en ese justo momento logró levantarme y así llevarme a mi habitación, ya en está me sentó en mi cama mientras ella se quedaba parada. —No está Allison así que tendrás que adaptarte a esta versión de compañera de cuarto barata. —se río para sí misma mientras se volteaba y veía mi closet. Me levanté rápidamente y la hice a un lado.


—Yo escojo la ropa.  —Natalie se río y me dio mi espacio mientras que se sentaba y solo apreciaba mi búsqueda.  —Y... Específicamente... ¿Qué te dijo Ethan?...



—Así que hablaremos de él. —río fuertemente y yo saqué algunas blusas. —Preguntó por ti al notar que no habías respondido. Luego sólo me hizo saber que pasaría por ti.


—Eso es un poco... Directo.



—Lo cual tú no eres. —se volvió a reír y decidí ignorarla por completo. En mi transcurso de bañarme y arreglarme sólo pude pensar en el por qué no se había contactado días antes. Realmente si quería salir con él. Luego de esa noche, había decidido darme la oportunidad pero no había entendido su actitud. Al pasar una hora de estarlo esperando, volví a acobardarme y meter todo mi empoderamiento por mi boca, Natalie se había ido y me había deseado lo mejor y aunque hubiese querido quedarme con ella a hablar mientras esperaba, ella decidió por si sola. Al escuchar el primer pitido del timbre, no me moví. Ya había aclarado en mi mente que Ethan no vendría. Al cuarto pitido sólo pude pensar en que Allie habría dejado sus llaves.

Cuando iba acercándome a la puerta pensé en cómo Ethan podría haber obtenido mi número. Josh desapareció rápidamente de la lista.


Al abrir ésta me percaté que en realidad todo ese empoderamiento si había estado presente, sólo me bastó cerrar fuertemente la puerta  y respirar lentamente mientras que contaba hasta 10. En el momento que abrí nuevamente pude observar a Ethan.

Tenía en su ojo izquierdo un morado ya casi desvaneciéndose y un corte muy ligero en el borde de su labio. Sonrío débilmente al verme. Lo hice pasar y se sentó en una de las sillas, pude percatarme al escuchar el chirrido de ésta porque yo... Yo aún contaba y respiraba lentamente.


—¿Addison? —me volteé rápidamente al escuchar el susurro de su voz para llevarme la completa sorpresa que no me había detallado que en el pequeño transcurso mientras entraba al apartamento, traía sus manos detrás de sí. Ya que éste tenía un ramo de rosas en ellas. Sonreí un poco y no lo miré a los ojos. No entendía por qué razón todo parecía tan íntimo y al mismo tiempo tan lejano. Al notar que sólo me quedé en silencio, hizo un sonido con su garganta y se escuchó un fuerte suspiro, el cual me sacó de mi cuarto trance del día y me puse en marcha a buscar donde colocar las rosas. Ethan me acompañó a la cocina y mientras buscaba algún envase, me paró en el proceso colocando sus manos en las mías y tomándolas mientras que me miraba a los ojos.



—Sé que no es muy prudente perderse luego de una proposición y aparecer de esta manera. Físicamente hablando. —se río y yo sonreí sin aún mirarlo directamente. —Ha sido unos días bastantes movidos. —en mi interior podía pensar una cosa: boxeo. Pero no quería preguntar, y tampoco lo haría. No hablaría de algo que no me concierne y que tampoco conviene.



—No te preocupes. No es como si fueses a dejar varada a la princesa o algo. —lo miré esta vez fijamente y pude darme cuenta que sus ojos estaban más claros de lo usual. Y aquí venían otra vez los sentimientos.



—Pero eres mi amiga y además... —¿Amiga? ¿Confundí las cosas? Obviamente entré en mi quinto trance y no pude escuchar más. Sólo veía como Ethan movía su boca pero para mí solo escuchaba lo que dijo al principio: amiga.



Obviamente si que había confundido las cosas.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 04, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Tú me das las razonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora