MALICIOSO.

CAP 1: ARROGANCIA.

Era 11 de noviembre de 2001 cuando una prostituta tuvo un bebé en el baño de su burdel mientras otras prostitutas la ayudaban, los gritos de Malory se escuchaban por toda la cuadra pero eran ahogados por la música a todo volumen y por los gemidos de otras mujeres cogiendo en plena calle casi a las 3 de la madrugada, Malory no sabía de quien era su hijo y no le interesaba saber ya que según ella decía que no lo abortó para tomarse un descanso del agobiante trabajo que tenía aunque al avisar que estaba en embarazo el dueño del burdel la molió a golpes para hacerle perder el bebé a la fuerza pero no funcionó, Malory siempre soñó con casarse con un tipo adinerado y australiano, amaba los extranjeros que llegaban en la noche a buscar compañía porque no conocían a nadie en esa ciudad y esa compañía tarde o temprano terminaba en sexo, Malory además de todas las prostitutas decían que el sexo es diferente cuando es trabajo, algunas decían que ya no sentían placer si no repudio y pena ajena ya que podían ver que los caballeros que las buscaban más que todo en horas de la noche eran personas vacías que no encontraban el camino a casa o que simplemente carecían de cerebro, decían que aunque sea monetario ellas tenían un valor mientras que ellos no. A la final Malory dio a luz a un hermoso bebé rubio con los ojos azules como el mar pero la sonrisa de una madre por ver a su hijo a los ojos se esfumó luego de unos minutos cuando el dueño del burdel se lo arrebató con brutalidad y fuerza. La madre desesperada se levantó de la cama a pesar del dolor que sentía y trató de correr detrás del horrible hombre que se había llevado a su hijo pero fue imposible, sus amigas prostitutas fueron tras ellas y el rastro de sangre por toda la discoteca era tan enorme que parecía que hubieran arrastrado un cuerpo por todo el local, mientras tanto el hombre llevaba al bebé colgándolo del brazo y no le importaba que este estuviera gritando de dolor hasta que lo dejó tirado en un lote vacío lleno de árboles y plantas que hacía imposible que vieran al niño abandonado, el pobre bebé lloró toda la madrugada hasta que se vio el resplandor del sol saliendo en el horizonte y una camioneta negra se percató de la pequeña criatura tambaleándose de frio y morada por ser un recién nacido, de esta bajó una señora con un vestido caro y un collar de perlas, tomó una sábana que tenía en el garaje y mientras hablaba como diva tomó al bebé en sus brazos y lo calmó, se percató de que tenía el brazo muy maltratado y lo llevó al hospital más cercano, el niño estuvo por más de 15 días hospitalizado debatiéndose entre la vida y la muerte.
Malory por su parte afligida le escupió la cara al dueño del burdel y este la volvió a moler a golpes así débil como estaba por haber tenido al bebé, Malory recibió un castigo horrible por haber desobedecido a su amo, fue obligada a escribir una carta de suicidio para mandársela a sus padres mientras tenía una pistola en su nuca, luego de esto la estrangularon con una cobija llena de semen que se encontraba en la sala de lavandería del lugar para después colgarla en el ventilador de su habitación y hacer que pareciera un suicidio para que cuando viniera la policía no hubiera sospechosos pero si un motivo para que esta pobre mujer se quitara la vida: El secuestro y la desaparición de su hijo recién nacido. Su cuerpo fue tirado en una fosa común tiempo después porque nadie lo fue a reclamar, Malory vivió y murió sola de la peor manera posible.
La mujer que salvó a Nicolás de la muerte se llamaba Martha, dueña de las boutiques más sofisticadas de la ciudad donde vivían, era envidiada por todos por ser la mujer a la que un hombre dueño de empresas de petróleo se enamoró de ella solo por su manera de hablar y expresarse, sacándola de la pobreza extrema en la que vivía y convirtiéndola en una de las mujeres más ricas del país, la gente dice que le era infiel a su esposo con su propio hermano y que este un dia los encontró en pleno acto sexual en la cama donde habían tratado de tener un hijo por más de 5 años pero no podían, no rompieron su matrimonio ahí porque un escándalo de esa magnitud dañaría la reputación de ambos y así también de sus futuros por lo que decidieron no separarse y seguir adelante a pesar del bochornoso suceso.
Martha no salió del hospital hasta que le dijeron que el niño estaba fuera de peligro, explicó que lo había encontrado en un barrial y que le partía el corazón dejarlo ahí a la deriva por lo que quiso adoptarlo para criarlo como si hubiese salido de sus entrañas, así que eso hizo, después de varios días y un largo papeleo adoptó al bebé y lo llamó Nicolás.
Nicolás o Nico como le llamaba su padre adoptivo fue criado alrededor de muchos lujos, vivía en el barrio más prestigioso de la ciudad en una mansión valorada en más de 10 millones de dólares sin contar los muebles y los electrodomésticos que habían en ella ya que eran muchos porque la mansión era tan grande como para que pudieran vivir más de quince y sobraban dos o tres habitaciones, la oficina de su padre estaba pintada de blanco y en la pared habían imágenes de él con sus aliados y asociados. La habitación principal tenía una cama que se adornaba con diamantes y había un pequeño tocador en el cual su madre inhalaba las líneas de cocaína mientras se miraba en el espejo y se fumaba un cigarrillo. Nicolás fue vestido con las mejores marcas y tenía los mejores celulares y electrodomésticos, a veces incluso antes de que estos salieran al mercado de manera oficial, su padre lo crio para que no se dejara mirar mal de nadie así que cada vez que lo veían mal en el Kínder molía a golpes al otro niño y su padre le pagaba a los padres de estos para que no dijeran nada al respecto, en cambio la madre crio a Nicolás de manera vanidosa para que siempre se viera mejor que los demás, una vez Nicolás llegó llorando a la casa porque un compañero del Kínder le dijo que sus padres tenían lo mejor en su casa, Martha al escuchar lo que Nicolás le contó mandó a un mafioso a robar todo lo que había en esa casa mientras la familia estaba de paseo para que les dejara la casa completamente vacía, todo lo que ella pensaba que podría ser útil y costaba mucho dinero de aquel robo se lo regaló a Nicolás para que lo acomodara en su habitación y Nicolás saltaba de alegría y felicidad al ver todas aquellas cosas que sus padres hacían por él, así que este pasó de ser un niño feliz a ser un adolescente arrogante y prepotente que no le importaba la vida de los demás porque solo pensaba en si mismo.