¿Realmente es lo que buscas?

7.- Demasiadas emociones por hoy

NARRA JOAN:
Cuando termina el entrenamiento, cogemos el coche para llevarme a casa.
-¿Qué te ha dicho Aitana? -me pregunta Raoul mientras conduce.
-No, nada ¿Estuviste con ella? -pregunto y me arrepiento nada más decirlo.
Raoul se ríe y sigue conduciendo.
-Aitana es mi mejor amiga, ella es novia de Cepeda.
-Es que me ha dicho que tenga cuidado con Agoney y he pensado que era porque tenía experiencia con él -el rubio suelta un suspiro profundo.
-No le hagas caso vale? Yo no quiero nada con Agoney, ni siquiera me he acostado con él. Solamente nos liamos una vez en las duchas y él sigue pillado de mi.
-Tranquilo, no tienes que darme explicaciones porque no somos nada.
Esta frase le sienta fatal a Raoul, lo que hace que se pare en mi calle.
-Bájate Joan por favor - me dice él con cara de tristeza.
-P-pero Raoul yo no quería hacerte sentir mal.
-Por favor bájate ya.
Me bajo del coche y se va. He sido muy brusco con él. Veo que estoy en la puerta de la casa de Carlos, así que toco su puerta. Al instante me abre la puerta el Sr Leal con ropa de deporte y sudado.
-Hola Joan, ¿necesitas algo?
-Venía a ver a Carlos, ¿puedo pasar?
-Carlos no ha venido aún, pero pasa y le esperas.
Entro y me siento en el sofá de su salón.
-Y que, ¿qué tal el nuevo curso? - pregunta el Sr Leal en un intento de entablar una conversación conmigo.
-Pues bien Sr Leal, gracias por preguntar - sonrío un poco.
-Llámame Roberto, ya hay confianza.
-Hombre pues se folló a mi madre - me tapo la boca al escuchar lo que mi ira interna acaba de decir. Roberto se ríe y me mira sonriente.
-Tu madre necesitaba un descanso de su matrimonio, tu padre no la tenía contenta. Bueno, voy a ducharme, ahora bajo. Siéntete como en casa, si necesitas algo cógelo -tras esta conversación, se va a ducharse y me quedo sólo en su salón.
Decido subir arriba y veo que la puerta del baño está entreabierta. Se veía la silueta de Roberto haciéndose una paja en la ducha, sin quitarse los calzoncillos. Sentí algo ahí abajo, algo que no era adecuado. No podía dejar de mirar.
-¿Quieres pasar? - me dice Roberto girándose hacia mí.
-N-no no - bajo corriendo y sonrojado y salgo de su casa.
Pfff, de verdad que mal. Demasiadas emociones por hoy.