CAPÍTULO 1 DESAPARECIDA

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-Seguiremos aquí a la espera de más información por parte de los peritos, gracias señor Ramírez. Si alguien reconoce este auto que pueda proporcionar información para encontrar a la o las personas que venían a bordo de este vehículo, los teléfonos aparecen en pantalla, les repito, el coche es un chevy rojo modelo 2004 con placas SHQ-095. Para Teleterra noticias, Juana Marquesado.

Mi corazón late a mil por hora, entendiendo antes que mi mente lo que está sucediendo, miro la pantalla completamente paralizada hasta que mis ojos se comienzan a llenar de lágrimas.

Reacciono y salgo del lugar rápidamente, justo en la puerta me topo con Rodrigo. Cuando me ve su expresión cambia por completo.

-¿Qué pasó? -me pregunta preocupado.

-¿Dónde está tu auto? -soy incapaz de ver lo que hay frente a mi debido a las lágrimas que ya corren por mis mejillas. Intento mantenerme calmada pero no puedo controlar las lágrimas.

-Por ahí -Me señala el lugar mientras camina hacia él entendiendo que necesitamos movernos.

-Rápido -lo apuro -vamos... vamos a Tlacolula -la voz se me entrecorta. Aunque mi hermano no entiende nada no me cuestiona y simplemente se mete al carro y comienza a conducir. Él no dice nada durante un rato, yo sólo me limpio las lágrimas y respiro para tranquilizarme, así no voy a resolver nada.

-¿Ya me vas a decir que está pasando? -cuestiona Rodrigo al verme más estable.

-Creo que mi... -mi ¿Qué? ¿"ex"? ¿"amiga con derechos"? -amiga, tuvo un accidente.

-Amiga -repite mi hermano en un tono peculiar.

-Si, lo acabo de ver en las noticias, me parece que es el coche en el que ella iba, ¿No puedes ir más rápido? -comienzo a impacientarme.

-Si el carro pudiera volar sobre el tráfico créeme que lo haría -me dice él en broma. Ruedo los ojos y no digo nada más.

Miro por la ventana y mi mente reproduce una y otra vez la imagen de Bernabé alejándose en el chevy rojo de su madre, intento hacer memoria para recordar el número de placas, pero no lo consigo, por más que lo intento.

Si algo le sucedió a Malva... será imposible no pensar que fue por mi culpa. Iba mal cuando se fue, debí detenerla, hablar con ella en ese momento y quizás hasta arreglar las cosas, pero ella se fue llorando y quizás ahora esté... No, basta, eso no pasará, quizás ni siquiera fue ella la accidentada, además ella no tendría nada qué hacer por esos rumbos, es imposible que sea ella. Marco a su celular para asegurarme de que está bien.

-El número que usted marcó se encuentra apagado o fuera del área de servicio -es lo que se escucha inmediatamente.

Marco de nuevo, pero la contestadora del buzón vuelve a sonar.

Después de lo que me parece una eternidad comienzo por fin a ver el lugar del accidente, hay una ambulancia, dos patrullas, la camioneta del testigo y una camioneta de Teleterra. Mucha gente se ha congregado para ver lo sucedido desde lejos y los del servicio público se desplazan alrededor del auto buscando algo.

Cuando mi hermano se acerca lo más que se le permite, pues todo está hecho un caos, me bajo del auto y corro hacia el chevy. Un policía me detiene en cuanto me ve.

-Señorita, no puede estar aquí, por favor retírese -demasiado tarde, me acerqué lo suficiente para ver el carro de cerca, lo suficiente para ver el llavero de bailarina que cuelga del espejo retrovisor del auto.

Siento que mi mundo se viene abajo, que todo pierde sentido, un policía me habla, y yo le respondo algo.

-La conozco -digo en un susurro y me pregunto si realmente lo dije o estoy soñando. Intento acercarme de nuevo.

-Señorita, déjenos trabajar, no se puede acercar, detrás de la línea.

-La conozco -le repito más alto -Conozco a la dueña del coche, a quién lo manejaba -miro al policía, otro más se ha acercado y es el segundo quién pregunta.

-¿Es familiar suyo? -comienzo a negar con la cabeza.

-Sí -responde mi hermano -queremos ayudar en lo posible, ¿está bien la chica? ¿Dónde está? -la garganta me duele por el nudo que se me forma en espera de una respuesta.

-No la hemos encontrado -responde el primer policía.-No hay ningún rastro más que sus pertenencias personales. -le hace una seña a otro policía que acerca la bolsa de Bernabé y se la entrega a mi hermano.

La tomo de inmediato y ahí está su cartera con sus identificaciones y su celular. Está apagado.

-Estamos buscando en los alrededores por si salió disparada del auto con el impacto o antes de, no sabemos que pudo haber pasado o si la misma pasajera salió por su propio pie. De cualquier modo voy a necesitar que nos den los datos de... -Nos mira esperando que le demos un nombre.

-Bernabé -respondo automáticamente.

-Bien, por aquí, por favor -nos lleva hacia una patrulla donde le pide a una mujer que tome los datos de Malva, le digo su nombre, edad, trabajo y me pregunta por el parentesco.

-Soy... amiga de la familia -digo al final, nos mira acusadoramente ya que en primer lugar afirmamos ser familia, pero no dice nada al respecto.

-¿Podría proporcionarnos el número de algún familiar para avisarles? -Pienso en la madre de Malva, esto puede afectarle demasiado, no sé cómo vaya a tomarse la noticia ni si será bueno que se la den por teléfono.

-No, pero yo me encargo de avisarles -respondo con la intención de ir a buscar a su padre, pero de inmediato pienso que también quiero ayudar a buscarla. Barrer el sitio si es necesario.

-Eso sería todo entonces, pueden retirarse.

-Queremos ayudar con la búsqueda -interviene mi hermano. La mujer lo mira un poco extraño.

-Repórtense con el comandante Vega, es el que los trajo conmigo -dice y vuelve a su papeleo. Nos dirigimos en busca del comandante.

-Espera, llamaré a una amiga para que le avise a sus padres -le digo a mi hermano antes de integrarnos a la búsqueda.

-De acuerdo, te espero por ahí. -se acerca al chevy y lo inspecciona con atención.

Hallo entre mis contactos el número de Lorena, no sé de qué manera darle la noticia. Y sé que lo que le voy a pedir será poner una carga en sus hombros, pero no pienso moverme de aquí hasta que Bernabé aparezca.

-Hola Azul, ¿Cómo estás? -Contesta al segundo intento.

-Hola Lore, creo que no has visto las noticias ¿verdad? -no sé ni cómo empezar. ¿Hay una manera suave de decir que Bernabé tuvo un accidente y está desaparecida?

-No, ya sabes que no me gustan ¿Qué pasó? -su tono cambia a curiosidad.

-Hay Lore, no sé cómo decir esto .

-Sólo dilo, me estás asustando -suena preocupada. -¿Estás bien?

-No, bueno si, yo sí. El caso es... Bernabé tuvo un accidente...

-¡¿Qué?! ¿Está bien? ¿qué pasó ¿Dónde está? -comienza a escucharse movimiento al otro lado de la línea -mierda, voy para allá.

-No, espera, es que no saben dónde está, yo estoy cerca de Tlacolula, casi llegando, pero no se han contactado con nadie de su familia, necesito pedirte que le digas a su papá, tengo que ayudar a buscarla.

-Ok, yo le digo a sus padres y me voy para allá pero me estás confundiendo ¿Cómo que no saben dónde está? -se escucha agitada.

-Pero ten cuidado con su mamá, ya sabes que puede ponerse mal. Tampoco sé bien, chocó contra un árbol y dicen que pudo haber salido disparada del carro o quizás que ella misma se fue, el caso es que cuando llegaron a auxiliar no había nadie en el auto.

-Dioses... espero que esté bien, ya voy a casa de Malva, te veo en un rato.

-De acuerdo -digo y colgamos la llamada.

Me dirijo hacia el coche, intentando procesar todo lo que sucede. No soy capaz de comprender nada, y el pánico comienza a apoderarse de mí.

MIRAMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora