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Era una hermosa mañana, luz entraba por las ventanas de aquella casa, iluminándola cási por completo. El silencio que había le daba un toque acogedor al lugar, toque que desapareció para quienes vivían ahí al escucharse golpes desde la habitación del colombiano.
Sí, como podrán imaginar, el dueño de dicha habitación y su hermano mayor estaban peleando, como siempre.
El ecuatoriano, que recién despertaba, hizo una mueca, pues él ya sabía bien lo que pasaba. Cási sin ánimos se levantó de su cama y se dirigió al lugar de donde provenían esos "extraños" ruidos, encontrándose con sus hermanos mayores con algunos moretones, Colombia agarrando la camiseta del Venezolano, y éste poniéndole una mano en la cara como para alejarlo.
"Valla forma de empezar la mañana" pensó el menor de los tres, quien miraba a sus hermanos con rabia. Los otros dos se detuvieron cási de inmediato al notar la presencia del Ecuatoriano, como si estuvieran "en pausa".
La razón por la que peleaban esta vez era realmente ridícula. Se calleron a golpes para ver quién iría en la ventana del avión, pues ése mismo día irían de visita a territorio español para visitar a la única figura paterna que tenían con vida, España (y digo figura paterna porque no es su padre de sangre).
Sería menos ridículo si fueran menores, pero ya eran adultos; jóvenes, pero adultos. Hasta llegaba a verse un poco patético.
El resto de la mañana transcurrió normal. Desayunaron tranquilamente, Colombia y Venezuela dándose alguna que otra mirada de odio, pero al percatarse de que Ecuador los veía miraban a otro lado, como niños pequeños.
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Ya estaban llegando al aeropuerto, y para evitar peleas Ecuador iría en la ventana, aunque eso le disgustó un poco a los mayores ya que tendrían que ir muy pegados para su gusto.
Pasó poco tiempo para que se montaran en el avión, los tres tomaron asiento y empezó el vuelo. Aunque nuestros protagonistas se dieran algún que otro codazo por "accidente", era mil veces mejor a que se agarrasen a golpes en el aeropuerto por sentarse en la ventana.Ahora sólo les tocaría esperar hasta llegar a territorio español.