Unstable (Jonghyun) [CANCELADA]

Capítulo 19: ¡El regreso de las caídas! {Y el regreso de Moon también :D}

THE RETURN OF MOON :D Lean hasta el finaaal para echar un vistazo al testamento de disculpas que les escribí :') Okno.

—¡Ah, por Dios!

—¿Sucede algo? —consulté curiosa.

—¡Ese chico es tan caliente!

¿Eh? ¿Oí bien… cierto? Es cierto que he encontrado a varios chicos muy lindos, como Lloyd e incluso Jonghyun. Pero… ¿calientes? Qué vocabulario, santo cielo…

 —¿Qué quieres decir? —pregunté extrañada.

—Quise decir… que es muy lindo —dijo intentando reparar su expresión algo sonrojada.

—¿Lloyd tiene mucho calor? —volví a insistir con ironía.

—No te entiendo.

—Dijiste que era caliente. Debió haberse acalorado con la calefacción…

—No, no quise decir eso. Mejor déjalo.

—Entonces explícame; yo creí que tenía calor. De ser así mejor baja la calefacción que luego se le van a alterar las neuronas y las hormonas.

—¿De qué hablas?

Comencé a reír por lo bajo pues no podía soportar su cara de “¿qué rayos le pasa?”. De todas formas, ya sabía que Kyung Mi era una pequeña pervertida. Como decía alguien… uno nunca termina de conocer a las personas…

—¿Y qué tal se comportó Lloyd?

—Muy bien. Conversamos y reímos juntos. ¿Crees que le guste?

—¿Así, tan rápido?

—Puede ser; yo creo en el amor a primera vista, ¿sabes?

—No creeré mientras no me suceda.

Lo demás fue normal. Me topé algunas veces con Lloyd, otras veces con Jjong-ah… en fin. Aún no me acostumbro a mis compañeros que poco amistosos se muestran. Pero bueno; no puedo pedir mucho porque aquí venimos a trabajar; no a hacer vida social.

*************************************

—Te ves cansada, linda.

—Quién como tú que se pasa el día frente a una cámara.

—Es mi trabajo.

—Supe por ahí, que andas de Casanova.

—¿De qué hablas?

—Se te andan tirando, y yo que tú, mejor me protejo.

—¿Chicas?

—¡Obvio! ¿Qué más podría ser?

—Hablas de Kwon Kyung Mi, ¿cierto?

—Exacto.

—Estás celosa…

—¡No, eso no es verdad!

—Primer indicio de que estás celosa y me mientes; te alarmaste.

—Este idiota…

Lloyd me abrazó por la espalda recostando su cabeza en mi hombro. El aroma de su cabello provocó en mí un delicioso bienestar. Tomé un mechón rubio y comprobé su raíz oscurecida.

—¿Por qué te tiñes el pelo? —dije mientras enrollaba los mechones en mi dedo.

—¿No te gusta el color?

—Sí, pero el negro te queda mejor.

—Lo dudo. ¿Tú no te tiñes?

—No, pero algún lo intentaré. Pensaba al menos en reflejos rubios.