𝐋𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐭𝐞 𝐪𝐮𝐢𝐞𝐫𝐨 𝐝𝐞𝐜𝐢𝐫 (𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢ó𝐧)

|Capitulo 3|

3 chicos se encontraban subiendo las escaleras que dirigían a la habitación de su amiga, iban platicando de sus cosas cuando un fuerte sonido proveniente de la habitación de la chica se escuchó. Rose no perdió el tiempo y entró de golpe a la habitación, temía que su amiga se hubiera desmayado, caído o algo por el estilo, pero al entrar se encontró con su amiga debajo de un montón de ropa y algunos libros a su alrededor.

Jennie.- dijo y se acercó a ayudarla.

<Hola Rose.... disculpa el desorden> dijo Jennie con un leve rubor en sus mejillas.

He visto tu cuarto aún más sucio Jennie.- se burló Rose de lo desordenada que era la castaña.

<Cállate> dijo inflando sus mejillas de una manera tierna.

¿Pasa algo malo chicas?- preguntó Jisoo entrando en la habitación.

Jennie se levantó rápido y comenzó a levantar sus cosas para meterlas al armario que tenía en su cuarto, sin embargo se encontraba repleto de más de sus cosas y Rose al verlo sabía que ya no le cabrían más.

Creo que ya está lleno Jennie.- Comento su amiga, la cual no hizo caso y metió todo lo que tenía en sus manos al armario y lo cerró rápidamente.

<No, todavía cabía eso.> dijo Jennie con una sonrisa de triunfo en sus labios.

Rose puso los ojos en blanco ante lo que Jennie le dijo. Camino como si nada y se acosto en la cama de la castaña como si fuera de ella.

Kai entra.- Dijo Jisoo al ver que todo estaba bien y porque se sintió ignorada al ver que no le respondieron.

El chico entró al cuarto de las chicas y sonríe al ver todo, en estos momentos se siente en la gloria al estar en una habitación con tres lindas chicas.

<¿Cómo te fue hoy en la escuela Rose?> Le pregunto Jennie a su mejor amiga.

Rose suspiró pesadamente, cosa que no pasó desapercibida por los demás.

¿Que te dijo Rose? ¿Es algo malo?.- Preguntó Jisoo.

Nada... me pregunto sobre la escuela.- Respondió.

Oh... si.... hoy no fue tu día.- dijo Kai.

¡Kai!.- dijo la peli-naranja un poco molesta, no quería que su amiga se preocupara.- No fue nada malo Jennie.- dijo rápido para que su amiga no se preocupara.

Lo cual no resultó, la castaña tenía una mirada de preocupación y parecía querer saber lo que sucedió. Aún así Rose no quería arruinar el final de su día recordando lo que Lisa le hizo, ella quería pasar el rato riendo y hablando con Jennie, eso la ayudaría a tener un increíble día.

Solo tubo una pequeña discusión con Lisa.- Intervino rápidamente la coreana sabiendo que Rose no quería hablar del tema.

¿Pequeña? Rose casi salta sobre Lisa para matarla, tuve que tomarte por la cintura para que no la mataras.- Dijo Kai sin entender lo delicado del asunto.

La coreana y la peli-naranja vieron de forma fulminante a el chico el cual se encontraba confundido y asustado. Por otra parte Jennie se encontraba perdida en su mente imaginando una escena en particular, Kai y Rose cerca. Lo cual no venía al caso al tema principal del evento pero era algo que la castaña no pasó por alto aunque así lo hubiera querido. Sintió que su pecho se oprimió al dolor pensar en lo que había dicho su amigo, al cual ahora mismo tenía ganas de golpear sin un motivo en particular.

Para Jennie algo había cambiado durante el poco tiempo que ha asistido a clases, y era la reacción que tenía con Rose, ellas se habían alejado un poco, Jennie había ganado nuevos amigos y varios de sus compañeros hablaban con ella durante el almuerzo y aunque Jennie prefería comer con Rose y los demás ella no podía negarse a pasar tiempo con los demás, era una buena chica.

Aún así ese no era el punto, Jennie aunque lo negara sentía miedo de perder a Rose por culpa de algún chico. Tal vez suene tonto y egoísta pero Jennie deseaba que Rose no se enamorara.

No fue nada grave, enserio Jennie.- Dijo Rose al percatarse de que su mejor amiga estaba quieta.

En cambio Jennie no hizo ningún movimiento y siguió quieta, preguntándose porque se sentía tan triste al oír lo dicho por su amigo.

Jennie?.- pregunto con cierta preocupación Rose al ver a su amiga perdida en su mundo.- Oye.- La llamó una vez más.

Jennie salió por fin de su mente y sacudió la cabeza tratando de alejar aquellos pensamientos de su cabeza.

<Lo siento... me siento un poco mal. Si no es mucha molestia me gustaría dormir> dijo la castaña con una sonrisa débil.

Oh entiendo.- Dijo Rose.- Chicos vamos Jennie quiere descansar.- le hablo a sus amigos los cuales solo asintieron y la siguieron a la puerta.- Nos vemos mañana.- Dijo para salir por la puerta dejando sola a la castaña.

No pasaron ni siquiera cinco segundos cuando las lágrimas se formaron sin ninguna razón en los ojos de la castaña, en su pecho sintió un fuerte dolor punzante, pero no era físico y ella lo sabía, aunque lo que no sabía era el porqué de sus lágrimas.

¿Por que estoy llorando?.- se preguntó mientras trataba de secar las lágrimas que recorrían sus mejillas.- ¿Por que me siento de esta manera?

Así pasó el resto del día la castaña, llorando en silencio sin entender el dolor en su pecho.

De hecho si lo sabía, más no quería aceptarlo, era imposible, inimaginable, tonto.... Se había enamorado, y cómo no hacerlo, Rose fue la única en mostrarle afecto de una forma increíble, nadie ha estado con ella como Rose lo ha hecho.

Vamos....¿Quien aprende el lenguaje de señas solo para entender a tu amiga muda? Otros simplemente se conformarían a que ella les escribiera, pero Rose fue diferente, ella la ayudo a no tener mucho miedo a las personas y a lo que estás digan. Ojalá le hubiera enseñado a no tener miedo a lo que ella diría.

Jennie sabía que Rose estaba enamorada de Kai, ella se lo confesó una vez, antes no lo conocía y tampoco sabía bien cómo definir sus sentimientos por lo que no le dio importancia. Ahora mismo se arrepentía de no hacerlo.

No tenía oportunidad.... Lo único que podía hacer ahora era callar y sentir como su corazón caía a pedazos.