Infiltrado || Intenabo ||

Capítulo 23

- Cuenta atrás -

Canción y artista del capítulo anterior:
Twenty One Pilots - Goner

Personas que adivinaron la canción en el capítulo anterior;

Esperanza_0208

Creo que solo fue esa persona, perdón hace mucho que no escribo :((((

- ¡Te has cargado al puto perro del superintendente!- Le grita Horacio a Gustabo, Gustabo miró al suelo.

- Es un perro...- Responde Gustabo.

- Parad ya de discutir, ¿habéis venido aquí, solo porque Gustabo, ha matado a un perro?- Pregunta el jefe de la mafia mirando a ambos chicos.

- ¡No existía la necesidad de matarlo!- Grita Horacio al jefe de la mafia, unos hombres armados le apuntaron directamente a la cabeza.

- No vuelvas a levantarme la voz.- Dice aquel hombre al que todos en esa habitación respetaban.- Gustabo, ¿por qué lo has matado?

Gustabo no le contestó y ni siquiera le miró.

- Gustabín, responde cuando te hablan.- Le vuelve a decir su jefe.

- Yo... No lo sé.- Responde Gustabo, con su cabeza agachada, sacó sus manos de sus bolsillos, estaban vendadas y las vendas algo rojas.- Fue como... Un impulso o algo así, algo en mí me decía que debía hacerlo, ahora no me acuerdo muy bien.

- ¡Se está volviendo loco!- Grita al aire uno de los hombres armados que apuntaban a Horacio.

- ¿Qué? ¡No! ¡Yo no estoy loco!

- No han dicho que estés loco, te están diciendo que te estás volviendo loco.- Le dice Horacio en voz baja a Gustabo.

- Horacio, ¿Tú piensas que yo de verdad esté loco?- Dice Gustabo mientras que en su mirada se veía la preocupación que tenía.

- Yo... No lo sé... Estás... Raro.- Dice Horacio.- Casi no te reconozco últimamente.

- Me estoy cansando de vosotros...- Dice el jefe de la mafia.- Quiero que me traigáis a un hijo de Conway, tenéis una semana.

- ¿Y si no lo conseguimos?- Dice Gustabo.

- Creeme, no quieres saber qué pasará.- Le responde el jefe de la mafia.- Largaros ya de aquí.

Unos hombres guiaron a Horacio y Gustabo hasta un callejón que había cerca, una vez ahí, esos hombres marcharon dejándolos solos.

Ambos chicos caminaron en silencio hasta su casa, sin decir ninguna palabra, cada uno estaba tan preocupado por las cosas que tenían en la cabeza y esa presión que les había puesto el enmascarado que, ninguno podía hablar, simplemente, no se podían intercambiar las palabras.

- Gustabo.- El chico de cresta fue el que rompió ese silencio tan grande, su amigo, casi hermano, le contestó aún sin mirarle.

- ¿Qué pasa, Horacio?

- ¿Tú crees que somos... malas personas?- Dice Horacio mirando al suelo, Gustabo por primera vez en todo el día, le miró.

- ¿Qué es ser para ti una mala persona?- La pregunta que hizo Gustabo, desconcertó un poco a su amigo, el chico de cresta le miró también.

- Pues... Ya sabes, una mala persona...- Responde Horacio.

- ¿Crees que eres una mala persona?- Dice Gustabo.

- Siento que últimamente no te trato muy bien y estoy de mal humor, estoy en desacuerdo con opiniones de otras personas, quiero más tiempo para mí y...- Gustabo le interrumpió.

- ¿Y tú crees que eso es ser mala persona? Horacio, estoy destruyendo una familia en la que habitaba felicidad, he matado a un animal inocente porque sí. Horacio, por mi culpa, y solo por mi culpa, una mujer está muerta, hay un hombre sufriendo esa pérdida, y ahora, uno de los hijos de ese hombre, que es lo único que le queda a ese hombre en esta vida, va a desaparecer, Horacio, no soy una mala persona, soy un monstruo, lo que has dicho ni siquiera es ser mala persona, no te sientas así, tú no eres una mala persona.- Gustabo pasó su brazo por encima de los hombros de su amigo mientras volvía a poner su mirada al suelo y seguía caminando.

- Yo... No lo había visto así... - Dice Horacio volviendo a mirar al suelo.

Ambos chicos llegaron a casa, tenían que prepararse para lo que iban a hacer, tenían una semana a partir de mañana para traer a ese niño.