Capítulo III - ¿Juntos?

49 6 0
                                    

¿Es bueno ver a tu hermano mayor, ese que debería ayudarte, necesitando ayuda tuya? Le miré desde el pasillo. Estaba sentado en la cama. Yo le veía solo la espalda así que no puedo ampliar detalles. Entré, y me acerqué, aunque sabía que no era la mejor idea del mundo. Pero necesitábamos estar juntos en esos momentos.

- ¿Estás bien?

- Claro...

Me senté a su lado. Pensé que eso le ayudaría: hablarle, estar con el.

- ¿No te das cuenta? No quieren que estemos juntos.

- Yo creo que no tiene nada que ver con eso - respondí.

- Entiéndelo, Bea. Llego yo, diciendo que me quedo, y de repente le sale un trabajo a papá, ese que lleva buscando casi dos años y nunca había logrado encontrar.

- Ya, pero igual es verdad... Ahora lo importante es decidir qué hacer.

- Si quieres yo voy con papá. Lo digo por tus amigos, y eso.

- Lu, tu también tienes tus amigos aquí.

Entonces le expliqué que no me importaba irme, y eso. Él me dijo que los amigos que tenía aquí podría conservarlos aunque se fuera, pero yo no.

- Aún no nos han dicho que tengamos que estar separados.

- Si quieres les preguntamos, pero ya te lo he explicado...

Yo quería preguntar, por si acaso. Bajamos a la cocina, y les pregunté a mis padres.

- A ver chicos, sabemos que la decisión es muy difícil, pero tenéis que comprendernos.

- Vale mamá, esa no era la pregunta.

- Bea, deberías ser más comprensiva.

- ¿Por qué ella tiene que ser más comprensiva? Vengo a vivir aquí porque quiero estar con vosotros, y nos decís esto. ¿No creéis que si yo no quisiera estar aquí, no habría alquilado un piso? Pensad un poco lo que hacéis, llevamos tres años sin vernos, y ahora queréis separarnos. Pues bien por vosotros, pero yo no me voy con ninguno de los dos.

Silencio. Nadie sabía que responderle. Así que saltó mi cerebro el listo, que no tenía otra cosa que hacer en ese momento, y decidió fastidiarlo un poquito más.

- Yo opino lo mismo que él... No sé si queréis que estemos juntos o no, pero me molesta que no hayáis pensado en eso. Sí, sé que el trabajo es muy importante, y el dinero también, pero creo que es más importante la familia. Cuando éramos pequeños siempre nos lo decíais, qué pasa, ¿ya no pensáis de esa forma?

- Sabemos que la familia es importante pero...

- Ya basta mamá. Bea y yo ya tenemos claro todo esto. Pero tranquilos, aún no había vaciado las maletas así que lo tengo bien fácil.

- Lucas...

Pero antes de que mi padre pudiera decir nada, Lu y yo ya habíamos desaparecido de allí.

Soñando el mismo sueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora