Tengo que llegar a tiempo

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(Reproduzcan cuando se les indique chikitines)

Joaquín

Había pasado la mejor noche de mi vida, ya saben, teniendo XP, la mayor parte de mi vida la he pasado en casa y en el consultorio de la doctora Nina. ¡Diablos! Mi padre me matará al ver que me escapé de casa sin decirle nada, incluso había puesto mi celular en vibrador. Estaba listo para que me regañara, pero es que estando con Emilio me olvido de todo, me hace sentir vivo, me hace olvidarme que estoy enfermo. Nos encontrábamos ya listos para abordar el avión de regreso a Cozumel, pero antes tenía que confesarle todo, ya no quiero seguir mintiendo.

-Bien, ya es hora de regresar bonito. Estaremos en casa como a las tres de la mañana.

-Emi, ¿Podríamos ir un momento a la playa cuando lleguemos? Yo... necesito decirte algo. -Dije con un poco de nerviosismo.

-Está bien amor, pero por ahora tratemos de descansar un poco. Debes estar cansado y a decir verdad, yo también lo estoy. -Dijo dándome una sonrisa y acomodándose en el asiento para dormir un poco.

Yo solo asentí y traté de dormir también en los brazos de mi novio, aunque en realidad no pude, ya que en mi mente solo estaba la idea de que llegando a Cozumel le contaría toda la verdad sobre mi enfermedad. Finalmente aterrizamos a las 2:45 A.M y nos dirigimos a la playa en el auto de Emilio, llegamos a esta a las 3 de la madrugada.

-Espera bonito, deja preguntarle a un vecino si me puede guardar un momento el carro, ya es algo noche y más vale prevenir.

Yo asentí y nos dirigimos a la casa de don Juan, un vecino que conocía a la madre de mi novio y no dudó en hacernos el favor mientras yo hablaba con él, dijo que lo guardaría en su garaje. Caminamos un rato por la playa y finalmente nos dirigimos al muelle.

-Emi, yo... -En ese momento empezó a vibrar mi celular y sin ver quien era lo guardé en el bolsillo de mi chamarra. -Debe ser mi papá, luego le contestaré, lo que tengo que decirte es muy...

-¡Diablos a mí también me están marcando! Deja pongo mi celular en vibrador. -Así lo hizo y lo guardó de igual forma en su chaqueta. -Bien, ¿Qué me decías bonito?

-Bien, yo... primero quiero agradecerte por estar en mi vida, tú... tú las has llenado de luz y... -No pude terminar la oración ya que Emilio empezó a quitarse la ropa hasta quedar en bóxer y empezar a correr hacia la playa.

-¡A que no me alcanzas amor! -Dijo metiéndose al agua.

No sé en qué momento me empecé a quitar la ropa también hasta quedar solo en ropa interior y meterme al agua también.

-Emi, Emi, escucha, lo que te tengo que decir es importante, quiero que sepas que...

-Ya lo sé bebé, que soy el amor de tu vida, que me amas...

-Obvio sí amor, te amo demasiado, lo que pasa es que...

-Ya sé amor, debes estar preocupado por mi suegrito, pero te prometo hablar con él para que no te regañe. -Joaquín solo agachó la cabeza sintiéndose triste. -Amor, tranquilo, vamos a olvidarnos un poco de eso. Mira, tenemos el hermoso cielo de Cozumel ante nosotros, podemos hacer cosas mejores.

Franco

Nina me había hablado a las 2 de mañana, tenía mucho sueño, pero sabiendo de quien se trataba no dudé en contestar. Se escuchaba muy emocionada del otro lado de la línea.

-Franco, prepara tus cosas y las de Joaquín, me acaban de informar que mañana los esperan temprano en Washington para iniciar con el tratamiento de Joaco. Yo los acompañaré, ya tengo casi todo arreglado.

Cita Bajo Las Estrellas ✔️ (ADAPTACIÓN EMILIACO) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora