Estaban abrazadas, besándose bajo el agua de la ducha, Ruoxi dio un último beso a Yilin y se apartó lo justo para tomar la esponja, el gel de baño y comenzar a deslizarlos por su cuerpo mientras la abrazaba, primero la espalda, abarcando hasta su trasero y de regreso, varias veces, luego hizo que se diera la vuelta y se quedara con las manos apoyadas en la pared, apartó su cabello, lamió su cuello y depositó algunos besos sobre la piel húmeda que acababa de lamer. Continuó con la esponja de baño recorriendo cada lugar hasta llegar a sus pechos, para ello tuvo que apegar su cuerpo a su espalda, abrazándola desde atrás, apretando sus propios pechos a la espalda de Yilin, esta última continuaba atrapada por el calor de su reciente encuentro, y no era capaz de procesar adecuadamente sus pensamientos.
Ruoxi se tomó todo el tiempo necesario para alcanzar cada rincón del cuerpo de Yilin con la esponja y luego aclarar su cuerpo con el agua corriente de la ducha, hizo lo mismo con su propio cuerpo y luego se metieron a la bañera con agua caliente.
Tenía la espalda apoyada en la bañera, Yilin estaba sentada entre sus piernas y descansaba la espalda sobre sus pechos, al tiempo que la cabeza lo hacía en su hombro. Sus respiraciones eran tranquilas y sus cuerpos se ajustaban el uno al otro como si debieran estar juntos de esa forma.
- Qué quieres hacer ahora? Por mi está bien quedarnos aquí, pero el agua ya se está enfriando, y no quiero que enfermemos. - Acercó la cabeza sobre su hombro y rodeó más fuerte a Yilin con los brazos, quería estar tan cerca como fuera posible.
- Tienes razón, yo tampoco quiero salir de aquí, pero empiezo a tener frío.
- Yo puedo calentarte si quieres… - Dijo esto junto a su oído y luego tomó el lóbulo de su oreja con los labios.
- Noo, a este paso no lograremos salir de la habitación en varios días, y hay cosas de las que debemos encargarnos en la vida real, por mucho que desee quedarme contigo de esta forma. - Giró su rostro y le ofreció los labios. - Debemos salir de aquí, por lo demás, tenemos una vida completa para estar juntas, si? - Tomó otro beso rápido de su boca y se levantó saliendo de la bañera.
- Vale, lo entiendo, especialmente porque no quiero que enfermes. - Comenzó a levantarse para salir de la bañera, pero el cuerpo de Yilin todavía estaba cerca del borde, y no pudo contenerse, así que se inclinó y dio un mordisco sobre su trasero, causando que Yilin diera un salto y la reprendiera con la mirada. - Está bien, de ahora en adelante me voy a comportar, lo prometo! - Dijo esto último levantando las manos en señal de rendición.
- Más te vale o no habrá más cariñitos para ti. - Su cara estaba seria, pero sus ojos reían, no podía ocultar la alegría de estar juntas nuevamente.
- Cualquier cosa, menos dejarme sin cariñitos, no sé si sobreviva a eso, los necesito para levantarme en las mañanas!! - Sus ojos también estaban llenos de risa, se sentía muy ligera de estar bromeando con ella nuevamente, era lo mejor del mundo.
- Jajajaja, eres una exagerada!! Pero me gustas de esa manera. - Le dio una última mirada juguetona y luego salió del baño envuelta en la toalla.
- Ah, supongo que esto es lo que llaman felicidad. - Cerró los ojos un momento y sonrió... luego terminó de salir de la bañera, se tomó su tiempo para secarse y luego siguió a Yilin fuera del baño
Cuando salió del baño Yilin ya tenía la ropa interior puesta y buscaba algo en el armario, fue entonces cuando cayó en la cuenta que ella no tenía ropa que ponerse, había estado tan ansiosa por hacer el amor con Yilin que olvidó por completo que andaba sólo con lo puesto, ahora tenía un problema… Buscó su ropa en el suelo y recordó que debía estar tirada en la entrada, fue a buscarla y tampoco la encontró.
- Yilin, has visto mi ropa?? - Por alguna razón preguntar eso en voz alta hizo que se sonrojara, había estado tan excitada que no recordaba dónde se sacó la ropa, esto era vergonzoso…
- Emm… si, la metí a la lavadora cuando me levanté a tomar agua esta mañana, ya debe estar seca. - Dijo esto sin sacar la cabeza del armario.
- Oh, eres fabulosa, muchas gracias. - Se acercó y la abrazó por la espalda, besó tiernamente su cabello y luego la soltó para ir a buscar su ropa a la lavadora. Yilin tenía razón, ya estaba seca, afortunadamente ella había tenido algo de sentido común y no se había dejado arrastrar por el calor del momento, al menos no al mismo nivel que ella… Se rió sola un momento, definitivamente hay cosas que no cambian, ella siempre había sido la ordenada entre las dos, la que era buena organizando la casa y siendo previsora.
- Está seca?? - El sonido la pilló por sorpresa y la arrancó de sus pensamientos, mejor volvía al dormitorio y se vestía de una vez por todas, Yilin parecía que quería ir a alguna parte, aunque todavía no le decía a dónde.
- Si, está perfecta, muchas gracias. Cambiando de tema… Qué quieres hacer hoy?? por qué tanta prisa por vestirnos y salir de la cama? - Le dedicó su mejor mirada insinuante, todo con tal de tener una respuesta, luego se volteó para comenzar a vestirse.
- Pues… no sé qué opines, pero creo que ya hemos retrasado demasiados años el ir a conversar con mis padres y no quiero tener que esconder lo que siento por ti ni un segundo más. - Se acercó a Ruoxi por la espalda mientras esta se vestía, la rodeó con los brazos y apoyó la frente en su espalda. - No puedo seguir aparentando que sólo somos amigas.
A Ruoxi se le detuvo el corazón y por un momento fue incapaz de respirar, dejó las prendas que tenía en las manos y tomó a Yilin en sus brazos, la levantó y comenzó a girar con ella, riendo como una niña, a quien le han regalado un nuevo juguete. La bajó y tomó sus labios en los suyos, depositando en ese beso todo el amor que la desbordaba cada vez que la miraba.
- Qué buena idea, vamos a pedir tu mano antes que se haga más tarde. - Puso otro beso en los labios de Yilin y luego terminó de vestirse rápidamente.
Yilin la observaba con una sonrisa en su rostro y en su corazón, por fin, luego de largos años, todo estaba saliendo como deseaba, este era el primer día del resto de sus vidas juntas.
- Qué haces, date prisa. - Ruoxi tomó su mano y la arrastró hasta la puerta, ninguna era capaz de contener su alegría, y tenían esa mirada estúpida en la cara.
ESTÁS LEYENDO
Lily, el reencuentro (Ruoxi Y Yilin)
FanfictionLuego de pasar largos años separadas Ruoxi y Yilin por fin se encuentran nuevamente, este relato continúa la historia luego del capítulo final del manhua. +18 Realmente espero que les guste, me encantaría leer sus comentarios y opiniones al respecto...