"Ahora que solo tengo a mis hermanos, toca sobrevivir. Norman, te prometí cuidarlos y eso haré"
Escuché unos pasos acercarse a mi, no confiaba mucho en esta gente, así que preparé el cuchillo que escondía bajo mi manga.
-O-o-oli... ¡¿Oliver?!
⋇⋆✦⋆⋇...
—¡¡Solsito, ven a iluminarme!! —grité llamando a Emma.
Me acerqué con cuidado donde se supone que escuché su llamado. Mis ojos al estar ya acostumbrados a la oscuridad comencé a caminar normal sin dejar de tener cuidado.
—AGHHHHH, ¡Un bicho!
—¿Escuchaste eso? ¡Estamos bien!
—¡¡_______!!
Divise cuatro siluetas, me acerqué rápidamente a aquellas siluetas y acerte, eran ellos.
—¡Yo! Hola, ya llegue Ray.
—Tonta.
De inmediato tomó mi mano firmemente. Sonreí ante su acto, si que se toma muy en serio esto de cuidarme.
—Estamos... ¿Bajo tierra?
—Si, es lo más probable. —respondió Ray a Emma.
—Ew, ew, ¡un bicho!
—¿Podrá ser que todos los demás estén aquí abajo? —pregunta la peli naranja.
—Puede ser, nunca se sabe. —alce mis hombros.
—Busquemos.
¿Como quieren que busquemos si- ¿eh?
Como si fuera coincidencia, una luz a nuestras espaldas se asomó, siendo avisados por el más pequeño que nos acompañaba.
—Emma!
—Emma~
—Emma?!
—GILDAAAAA!
—¡Es Emma! EMMAAAAA!
Corrimos hacia la luz, revelando a toda nuestra familia. Me acerque a Don, quien tenía la lámpara.
