•|Ollivander y Longbottom|• {Libro 4}

»El Hurón Malfoy«

Me senté rápidamente en la mesa de Gryffindor, junto a Neville, y frente a Hermione. Los profesores habían partido, y tan solo quedaba Filch a cargo, quien por supuesto no lograría controlar a nadie.

-¿Qué fue lo que pasó? -pregunté aún asombrada de lo que acababa de ocurrir.

-Ya oíste lo que pasó, hizo trampa..

-Ron, no digas eso -exigió Hermione, mirando enfadada al muchacho. Luego suspiró- .. no lo entiendo ¿Cómo Harry podría haber puesto su nombre en el cáliz?

-No lo hizo ¿Cierto? No puede haberlo hecho.. ¿O no? -respondió Longbottom.

-No. Harry no se veía para nada a gusto con lo que pasó, él no lo hizo.

-¿Y qué? Puede que no le haya gustado cómo reaccionaron los demás. Seguramente esperaba que..

-Ron, hace dos minutos era tu mejor amigo -continué- Harry no puso su nombre, le dije que luego debía explicarnos, y asintió.

-Eso no significa nada.. -Ron ya estaba resultando molesto, y estuve por contestarle de una manera no del todo amable. Sin embargo, la otra joven se encargó.

-Ron, creo.. que sería mejor si dejáramos que Harry nos explicara primero.

-¿Qué quieres que nos explique, Hermione? ¿Cómo lo logró? ¿Desde hace cuanto lo planeaba?

-Solo digo que si es nuestro amigo, deberíamos tomar en cuenta lo que tenga para decirnos.. ¿No lo crees?

El pelirrojo respiró profundo, agachando la cabeza, y un momento después me pareció ver que asentía levemente. Mi amiga lo distinguió más fácilmente, y se dispuso a ver hacia el frente del salón, de seguro buscando información sobre Potter.

Yo intercambié algunas miradas con Nev por unos momentos, se veía nervioso. Me di la vuelta, y permanecí sentada en el banco de aquella mesa, solo que ahora mis rodillas miraban hacia el pasillo que había entre la otra casa. El chico me imitó, para que luego comenzaramos a debatir.

-Para empezar ¿Cómo..? -quiso saber él, pero no lo dejé acabar.

-No lo sé, no tengo idea de nada como tú, pero le creeré -respondí velozmente.

-¿Y si él no lo hizo.. no significa que alguien más puso su nombre?

-Sí, así debería de ser. Espero que Harry esté bien, es decir, no puedo imaginar por lo que está pasando ahí dentro.

-Tampoco puedo, pero apoyaré a Harry -le sonreí, aunque aún se distinguía en mi rostro una expresión de compasión.

-Mañana hablaremos con él ¿Bien? Creo que sería mejor si en el cuarto, lo dejas pensar.

-Claro, pero.. le diré que tiene muestro apoyo.

Me aseguré de tranquilizar un tanto a Hermione, y entonces me marché de nuevo a mi lugar. Aún podía escuchar los susurros y rumores, »Tonterías«.

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—Así que después de todo no había una explicación..

—Por supuesto que la hay, sólo que aún no la conocemos -contesté, tratando de mostrarme perseverante. Longbottom, quien permanecía viéndome preocupado, siguió con la conversación.