Timaeus
Regreso a la sala con Apolo y Dominic. Me había marchado de aquí hace rato porque estaba cansado de escuchar lo mismo una y otra vez, pero ahora estaba de mucho mejor humor luego de haberme topado con Maya por casualidad. No tenía ni idea que hoy estaría aquí, pero era justo esa bocanada de aire que necesitaba para enfrentar tanta mierda.
Dominic me abre la puerta en cuanto toco.
—¿Te has calmado? —pregunta.
—No mucho, pero ahora tengo razones de más para querer terminar con esto de una vez por todas.
Comparten una mirada con Apolo antes de asentir.
—Como te dije antes, lo mejor es llevarlo a la corte, si quieren insistir con esto. Tenemos todo para ganar, pero la parte mala es que será demasiado mediática y deberás estar preparado para lo que eso conlleva —me explica y lo entendía.
Hasta hace media hora no quería ni pensar en la posibilidad de ello, pero luego de ver a Maya se revolvieron en mí algunos recuerdos y entre esos estaba lo que le había hecho al vestido de Maya la noche del recital, puede que no lo hiciera con sus propias manos, pero sabía que ella tenía mucho que ver y eso me lleva a pensar que también con lo que le había sucedido a Maya antes de que llegara.
Antes quería terminar con esta historia de una manera silenciosa, para que no se salieran con la suya. Lo único que querían era la atención de la prensa y lo estaban consiguiendo, ir a juicio haría que eso se multiplicara por mil, pero no iba a permitir que se salieran con la suya en esta ocasión, no pienso permitir que lleguen hagan daño a alguien y se vayan campantes.
—Lo sé, pero lo pensé bien y no pienso consentir que utilicen a mi hermano para conseguir publicidad gratis.
—Tu hermano y tu nombre —aclara Apolo desde su lugar.
—¿Mi nombre? Eso me importa en lo más mínimo, si se hubiera metido solo conmigo, estaría muerto de la risa en este momento, pero no es la primera que me la juegan.
Veo el ceño de Apolo fruncirse.
—¿A qué te refieres?
—Recuerdas lo que sucedió en el recital de hace dos años.
Veo a Apolo hacer memoria y la afirmación de que lo recuerda.
—¿Crees que fue ella quien intentó sabotear a Maya?
Dominic se mantiene en silencio escuchando con atención.
—No solo lo creo, estoy completamente seguro de ello. Puede que no lo hiciera con sus propias manos, porque dudo que se las ensuciara, pero sé que alguien de su equipo lo hizo, de eso no tengo ninguna duda. Y tampoco me sorprendería que lo hiciera antes también —afirmo.
Dominic toma una silla y se sienta. Lo imito porque siento que la conversación se va a alargar un poco.
—Si consideramos que es la hija de Sanders, yo también lo pensaría. Esa rata es escurridiza —comenta Dominic mientras revisa su celular.
Levanta la mano mientras hace una llamada.
—Hey, Cole, tengo algo entre manos y creo que podría interesarte... Sí, creo que lo mejor es que vengan... Vale hasta ahora.
—¿Cole?
Dominic asiente con una sonrisa confiada.
—Lo conociste en el bar de Tom, es un abogado muy interesante, pero lo mejor es que tiene una forma muy eficaz de trabajar —nos explica.
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SAGA LUX III | Los colores de Timaeus
Storie d'amoreLa vida de Timaeus ha estado siempre llena de color, literalmente hablando. En el momento en que en su vida comienzan a aparecer colores que nunca había visto sabe que es el instante de detenerse. Sin embargo la vida está llena de misterios y algun...