Rubén es un chico con mucho dinero, su pasatiempo es pintar, lo hace hermoso y su familia lo apoya para llegar muy lejos como pintor.
Samuel es un chico igual de rico, él es un escritor solitario, su familia no está con él y ha decidido que no quie...
Tengo exactamente 18 años y no puedo decir que todos esos años han sido de pura felicidad, como todas las personas tengo problemas, uno creería que por tener dinero los problemas están totalmente resueltos y eso no es asi.
Muchas veces me toco ver a mis padres discutiendo, por tonterías, por ejemplo porque mamá gasto demasiado dinero en algo, porque papá no llego a dormir, porque yo no había querido ir a clases, en fin... la casa por mucho tiempo parecía más un campo de guerra que un hogar.
Las cosas cambiaron hace aproximadamente tres años, cuándo yo tenía 15.
Un día llego una señora con ropas desgastadas, parecía estar enferma, yo la recibí y la deje entrar, fuí a buscar a mi padre a su estudio y él salió extrañado, no entendía que hacía una mujer así en nuestro hogar, yo me fuí a mi habitación para jugar un rato, después de todo no era un asunto que me importara.
Paso un rato en que no supe nada del mundo, hasta que un ruido demasiado fuerte me hizo parar el juego y bajar a la planta baja, pude escuchar a mamá llorando, papá trataba de consolarla pero ella no dejaba de gritar y entonces las palabras que cambiarían mi vida salieron de su boca en un grito que estoy seguro que le lastimo más que solo la garganta...
"Ese hijo bastardo tuyo no va a poner un pie en esta casa"
Si, yo tenía un medio hermano.
Papá era de esos típicos riquillos que se meten con todo el mundo especialmente con las mujeres, una noche sedujo a una jovencita de un nivel economico más bajo que el de nosotros, papá fué muy estúpido porque no se cuido, cuando esa chica supo que estaba embarazada lo busco, pero antes de poder decírselo mi padre le dijo que se casaría con mi madre, que por cierto también estaba embarazada, de mi... la única razón por la que se caso con mi madre y no con esa joven es que mi madre tenía dinero igual que él.
Las razones de la mujer para volver es que estaba muy enferma y ya no podía hacerce cargo de su hijo sola. Papá se había vuelto de un corazón blando para algunas cosas y acepto responder por el chico con la única condición de que no podía vivir en la casa con nosotros.
En los años siguientes papá arreglo el departamento que usaron esas personas, se hizo cargo de sus estudios y de la ayuda médica para la madre de mi hermano ya por último nos había presentado como hermanos que debíamos ser.
Su nombre es Borja Luzuriaga, él no quizo aceptar el apellido de mi padre, era un chico majo, era muy tranquilo y en realidad nos caímos bien casi de inmediato.
A escondidas de mi madre yo pasaba tiempo con él y con su madre, quien me trataba como si tambien fuera su hijo, en esa casa había paz, me la pasaba bien ahí porque tenía el cariño de un hermano y el afecto de una madre.
Lamentablemente pronto las cosas cambiaron, la madre de Luzu no aguanto más el cáncer y murió cuando el tenía 17 años, la verdad fué muy duro para los dos, porque él no quería quedarse solo y yo no podía quedarme siempre con él.
Luzu tiene cierta aura de tristeza desde ese día, la buena noticia para los dos es que entraremos a la misma universidad pronto, yo en la carrera de artes y él en la carrera de literatura.
La universidad que albergaba aquellas carreras quedaba muy cerca de casa de Luzu, razón por la que mamá termino accediendo a que me fuera a vivir con mi hermano, digamos que con el paso del tiempo ella dejo de ser tan cerrada cuando se trataba de Luzu, aunque me dejaba pasar más tiempo de forma libre con él, ella seguía sin poder verlo.
Mis padres no se separaron porque había mucho dinero de por medio, mi familia seguía "unida" pero eso a mi no me importaba en lo más mínimo, lo único que me importaba era encontrar el motivo que me hiciera seguir viviendo, ya saben, esa razón para querer seguir levantándote cada mañana.
Desde que era niño demostré que tenía un talento especial para pintar, al principio me gustaba mucho hacerlo pero con el timpo se volvio monótono, deje de sentirme ánimado al hacerlo, aunque mis padres me apoyaban siempre con eso, yo había perdido el sentido de mí vida, no encontraba una razón para pintar, accedí a estudiar porque estaba seguro que ahí me enseñarían a encontrar ese motivo para seguir con mi vida o al menos para seguir pintando.
Hoy por fin terminé de sacar las cosas que usaría para el apartamento de Luzu, era uno bastante grande y desde que le hicimos los nuevos arreglos había quedado mucho mejor, tendríamos cada uno un espacio para crear nuestra magia, yo con con pintura y pincel y él con letras y papel, a aveces él me contaba historias de las que escribía y yo le hacía imágenes con los pinceles en lienzos o dibujos que representaban sus palabras, hacíamos un buen equipo, desde que eramos casi unos adolescentes lo supimos.
Estoy aqui, pensando de forma positiva en lo que va a pasar, en lo que me espera fuera de esta casa que dejo de ser un verdadero hogar, en lo que nos espera a Luzu y a mi en la universidad y en la cantidad de personas nuevas que podría conocer.
Lo que más quería era encontrar mi motivo y poder ser feliz, poder pintar desde el corazón y no desde la cabeza, estoy aqui con un lienzo en blanco, pinturas y pinceles para hacer el mejor cuadro del mundo, el cuadro de mi vida, que ahora mismo no tiene forma ni color.
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