Segunda parte

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Todo lo que veía estaba oscuro, no podía oler nada y no podía escuchar ningún ruido en ese espacio vacío. Luego de varios minutos estando en la soledad. Si bien él siempre vivió solo, era la primera vez que sentía esa soledad reinar sus pensamientos. Finalmente, pudo ver una luz y supo que estaba llegando al lugar donde tantas veces había escuchado hablar desde que era un pequeño. A medida que se iba acercando a la luz, empezó a ver que una persona lo estaba esperando en esa entrada majestuosa y él solo pudo pensar en una sola persona. Cuando se vieron cara a cara, claramente era su amado Ash esperando por este ansiado momento. Los dos se veían jóvenes como si fuera la primera vez que se veían.

- ¿Cuándo fue la última vez que nos vimos, mi querido anciano? - Ash le habló con una sonrisa picara.

- Y ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos.- Eiji le devuelve la sonrisa.

- Sí, pero eso ya no importa porque te tengo a mi lado. Ya no más sayounara, no más despidos con sabor amargo. Por fin estaremos juntos por el resto de la eternidad.- La voz de Ash se fue elevando hasta al final que se quedó sin vos.

- No más separamientos,- Eiji se acercó a Ash.- no más barreras que nos separen.- Le agarra las mano.- Juntos por siempre.- Eiji no pudo contener su ternura, mientras que era la primera vez que Ash sonreía pacíficamente por primera vez.

- Mmmm es hora que te muestre el lugar. Ya que disponemos tiempo de sobre, me gustaría que me cuentes que estuviste haciendo estos años.

- Será un placer que seas mi guía en este mundo porque sino me iba a perder como en Nueva York jajaja.- Ash amó escuchar de vuelta la risa de Eiji.

- ¡Sí! A ver si te tengo que salvar tu vida de vuelta.

- Jajaja a ver si yo debo que tener que salvar tu pellejo por meterte con criminales peligrosos.- Eiji le respondió con sarcasmo.

- Para tu fortuna, no tenemos que enfrentar a nadie acá.- Ash se quedó pensando y se acordó de que le iba a preguntar.- ¿Eiji, te acuerdas cual es la última frase que me escribiste en la carta'

- Por supuesto,- Eiji lo miró a los ojos y le dijo.- Mi alma siempre está contigo.- Luego de finalizar las palabras, le dio un tan ansiado beso que deseaba desde la última vez que se separaron.

- Ah se siente tan bien estar contigo...pero que estamos haciendo. Te tengo que mostrar el paraíso y tienes que ver a toda la pandilla. ¡Vamos, vamos!

Ash y Eiji empezaron a adentrarse en el paraíso agarrados de la mano con la tranquilidad de que por fin estarían juntos por el resto de la eternidad. Iban a recuperar todo el tiempo que estuvieron separados en estos diferentes mundos.

Fin

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