Narra la escritora
Los dos jóvenes se la pasaron hablando toda la mañana de ese día, pudieron olvidar todos sus problemas, entre risas, bromas, malos chistes y anécdotas divertidas
Vegetta: Me gustaría quedarme más tiempo pero ya es hora que me valla ya que está por empezar mi turno de guardia
Luzu: Yo también tengo que irme o mi padre se preocupara
Vegetta: ¿Mañana a la misma hora?
Luzu: Aquí estaré -dijo una sonrisa-
Vegetta le beso la mejilla en forma de despedida y se fue corriendo hacia el pueblo pues sabe que sino se apresura Merlon se preocupara y luego lo castigará por haber llegado tarde, después de medía hora llego a su puesto y suspiro aliviado pues todavía no había llegado Merlon para decirle que partes de la aldea debía patrullar
Vegetta: Menos mal -dijo en susurro-
Merlon: Hola hijo -dijo revolviendo su cabello-
Vegetta: Hola Mer............¡Papá! -dijo nervioso-
Merlon: ¿En dónde estabas? Me tenías muy preocupado -dijo serio-
Vegetta: Fui a dar un paseo por la playa, quería despejarme un rato -dijo feliz-
Merlon: ¿Conociste a alguien? -dijo curioso-
Vegetta: Ya es hora de que haga mi patrullaje, por favor dime qué partes de la aldea tengo que patrullar -dijo nervioso-
Merlon: Es cierto, luego hablamos en casa jovencito
Vegetta solo pudo tragar duro pues sabía que Merlon le hiba a sacar toda la información posible pues lo conoce como la palma de su mano, una vez que Merlon le dijiera que parte patrullaria toda la tarde se fue a paso lento para vigilar mejor si había algún problema.
Déjemos al joven guerrero y vamos con el tritón que se quedó en la playa
Luzu se quedó sorprendido por ese gesto que tuvo aquel humano con el, se sonrojó mientras que su amigo Manolo hacía sus ruiditos de cerdo expresando felicidad
Luzu: Adiós -dijo en dirección donde se fué Vegetta-
Manolo: Oing oing -dijo emocionado-
Luzu: ¿Pero que dices? Solo fue un beso de despedida -se defendió-
Manolo: Oing oing oing
Luzu: No se de qué hablas, mejor vámonos -dijo sumergiéndose en el mar-
Manolo por todo el camino fue molestando a Luzu mientras que nuestro tritón ya parecía tómate con todo lo que decía ese mitad cerdito adorable
Manolo: Oing oing oing
Luzu: ¡MANOLO POR TODOS LOS DIOSES! -grito muy sonrojado-
Manolo: Oing oing
Luzu: Apenas nos acabamos de conocer [Todavía no me siento listo para entablar otra relación]
Manolo: Oing oing oing -dijo algo enojado el tierno mitad cerdito-
Luzu solo empezó a reír mientras negaba con la cabeza, aveces Manolo decía cosas un tanto descabelladas como divertidas y pícaras o con doble sentido; logrando que el castaño la mayoría del tiempo este riendo o sonrojado hasta parecer un tomate.......¿Submarino?
Luzu: Vamos cambia esa cara, en dos meses iré al pueblo de Karmaland y tú me acompañarás
El pobre mitad cerdito se puso pálido al pensar lo peor
Luzu: Estarás todo el tiempo conmigo,así que no tienes nada de que preocuparte amigo -dijo riendo al ver la reacción del mitad cerdito-
Habían llegado ya al reino de Atlántida pero alguien los veía desde lejos y los fue siguendo todo el camino desde que se dirigieron a la superficie
???: Tenías días que no veía esa hermosa sonrisa -dijo en un murmuró casi inaudible-
Fin del capítulo
Escritora: ¡Hola a todas y a todos!¿Quieren qué traduzca todo lo que dice nuestro lindo Manolo? O ¿prefieren que se quede así?
Manolo: -en una pecera- oing oing oing
Escritora: Ya lo creo mi tierno amigo
Manolo: Oing oing
Escritora: ¡¿QUÉ?!
Producción:
Producción: ¿Encerio entiendes lo que dice? Nosotros solo escuchamos oing oingEscritora: Hasta la pregunta ofende, pero Manolo en un rato nos ponemos al día con los chismes uwu
Manolo: -mira mal a los de producción-
Escritora: Tranquilo ellos no saben lo que dicen -acaricio su cabeza-
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Mi lindo humano (Luzugetta)
De TodoTe salve de que murieras ahogado esa vez, pero nunca creí que eso despertaría un sentimiento hacia a ti. Historia corta. Luzu: Seme Vegetta: Uke