Obliviate | Dramione |

Parte 8

|Flashback|

Era una de esas tardes en las que se encontraban juntos, Draco estaba recostado en las piernas de Hermione. El rubio miraba hacia el techo mientras que ella en una mano tenía un libro y con la otra acariciaba el cabello de este.

Estaban en la sala de los menesteres.

- ¿Qué hacemos si llegan a descubrirnos?- Draco interrumpió su lectura.

Hermione se quedó estática un momento, bajó el libro hasta dejarlo a su lado y lo miró.

《La verdad es que ella también lo había pensado.》

-También lo pensé. Debemos ser cuidadosos respecto a los recuerdos que tenemos de ambos. ¿Tal vez nos sirva un pensadero?- preguntó ella no tan convencida con su idea.

-Es una opción, pero muy arriesgada. ¿Y si alguien lo encuentra?- preguntó de vuelta Malfoy, también preocupado.

-Tienes razón. No debe quedar ningún rastro de que nosotros estuvimos juntos en este tiempo. Lo podrían usar en tu contra, no quiero que termines en Azkaban o que algo peor te pase. No lo permitiré. - Granger lo miró decidida.

-Yo tampoco quiero que te hagan daño, Hermione. Eres muy importante para mí. - El rubio estiró su mano hasta colocarla en la mejilla de ella.

-Tengo una mejor idea, solo tengo que perfeccionar el hechizo aún más. Debo perfeccionar "Obliviate", tiene que ser aún más poderoso que el que utilizamos con Pansy hace unos días atrás.- Hermione lo miró a los ojos.

Los ojos de Draco brillaban en duda.

-¿Estás segura?- le preguntó.

-Es la única opción que puede servirnos 100%. Si lo perfecciono será indetectable. Luego te lo enseñaré.- le aseguró ella.

Draco todavía dudaba.

-¿Acaso no me crees capaz? Soy la mejor hechicera de esta generación. Palabras dichas por el profesor Lupin, ¿Aún tienes el descaro de dudar de mi?- Hermione entrecerró los ojos, su novio dudaba de su capacidad.

Malfoy sonrió brillante.

-Para nada. Eres una maga estupenda.- el chico se levantó de su regazo y la besó.

Al separarse, Granger habló.

-Entonces será así Draco. Tendremos que obliviarnos.- ella lo volvió a mirar a los ojos.

El rubio asintió un poco resignado, no quería borrar sus recuerdos con Hermione.

-Está bien. Pero, ¿Quién de nosotros oblivará?- preguntó Draco.

-Como esta claro, uno de nosotros deberá obliviar a ambos, primero al contrario y luego a si mismo.- esta vez Draco quedó mudo.

-Pero si el que lanza el hechizo también se oblivia, ¿no sería un desastre? ¡Ninguno de los dos recordaría nada!- Malfoy habló obvio.

-Eso ya lo sé, genio. Como estuve perfeccionando el hechizo, también investigué más. Por ejemplo, el Obliviate que le lanzamos a Parkinson, guardó los recuerdos y los modificamos. Si nosotros no deseamos que sean devueltos, estos seguirán ocultos. Pero en este caso existe otro método, tenemos dos opciones. Uno, hacer que el hechizo dure un tiempo determinado, por ejemplo 4 horas o el tiempo que desees, aunque por supuesto, esos recuerdos quedarán guardados. Dos, escoger un objeto que sea cercano a nosotros y conjurarlo para anular el hechizo.- Hermione tomó una bocanada de aire, había hablado un poco rápido.