Pacto de amor

Capitulo 88: matate

//narra Pablo//

-¡no la entiendo!,¡no la entiendo Tomás!, ¡te juro que no la entiendo!-

-no entendí nada hermano, solo entendí que te peleaste con mia y nada más-

-¡y como vas a entender, si mirabas el celular!, imbesil-

-estás enojado, te entiendo. Pero con migo no te la agarres, Pablo- se sentó en la cama

-bueno, tenes razón-suspire y me puse al lado de el

-cálmate un poco, y contame-

-bueno...estaba ahí acostado en la playa con mía y apareció Agustín, y me dijo rengo, a todo esto yo jugando lo agarre y empezando a jugar, pero según mia, el chiquito sufría o algo así y me dijo "mátate nene" -

-solo eso?-me pregunto esperando más

-si, solo eso-

-y que le respondiste vos, al "mátate nene" -

-que era una tarada, y que se matara ella-

-bue, lindo lo que le decís a tu novia-

-es que, aveces es una tarada-

-bueno, ciando están histéricas un poco- se puso a pensar Tomás -pero te voy a dar un consejo, que vos me diste a mi. Que se ve que te lo olvidaste ya, hermano-

-¡¿cual!?-

-nunca trates de entender a las mujeres- dijo abrazándome por el hombro -las sabias palabras de mi amigo Pablo, cuando no había caído en la trampa del amor-

-¡que inteligente que era!, igual mia sigue siendo una tarada-le dije enojado

-bueno...una tarada que está tremenda-dijo Tomás acostándose en la cama  imaginando, mirando al techo

-en eso tenes razón, ¿viste esas piernas?- dije haciendo lo mismo, imaginando con el

-¿que piernas?, el culo -

-uhhh, y esas tetas, por dios!-

-tambien tiene ese abdomen, quemadito por el sol, que cuando sale del agua, no se parece dios, como que ilumina, sale en cámara lenta -

-bueno, bueno...estamos hablando de Mi novia, solo yo puedo opinar -le pegue en el hombro

-pablito, sos mi mejor amigo. Somos uno.-dijo divertido y empezamos a luchar. Derrepente paró -ahora armemos un plan-

//narra mia//

"cállate tarada! Mátate"

Esas palabras daban y daban vueltas en mi cabeza, Pablo nunca me había dicho algo así, cuando estábamos juntos, porai cuando cortábamos. Unas palabras tan simples, que casi que no eran un insulto, ¿por que tenía un revoltijo en la panza?

-que pasa mia?- entro Vico

-nada, no me siento muy bien-

-no me digas...Pablo-

-no, con Pablo todo bien- fingí

-ay amiga, a mi no me mentís. Además te vi cuando discutieron-

-tenes razón Vic, no te puedo mentir.-

-contame, desahógate-

-bueno, me dijo que era una tarada y que me matara-