ㅤㅤ❝Sus ojos se encontraron
con los míos y en el
momento en que los
cerro pude sentir la
necesidad de corre
hacia ellos❞
El amor y el odio nunca se llevaron bien.
Pero, la venganza hacia el amor pued...
ੈ₊˚༅༴│. ❝No se si sea masoquismo lo que siento, sólo te puedo decir que pase lo que pasó siempre estare para ti. Malas o buenas, estoy atado a ti hasta la muerte...hasta que esa muerte nos separe a ambos y terminemos de una vez con este amor❞━━ • • ︵︵︵︵︵╭ (↷ ) ╮︵︵︵︵︵ • •
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Un cálido calor lleno de angustia y dolor, pero ambos sabían que ese dolor era amor. El amor que se sentían el uno al otro.
Sus labios se movían en sufrimiento y pasión, ambos recorrían el cuerpo del otro con sus manos acariciando sus pieles, cada segundo que pasaba era más lo que quieran del otro. Sus caricias y sus besos pasaron a ser frotes entre ambas almas. La necesidad aumentaba y sus latidos también, los dos pudieron sentir sus corazones saltar sin parar con cada rose. El fuego que sentían en su vientre era tan fuerte como sus besos, sus labios iban al mismo compás dejando un hilo de saliva entre ellos cuando tuvieron que separarse al momento de sentir la falta de oxígeno.
Ambos se miraron a los ojos, sus pupilas brillaban pero a la vez se podía ver oscuridad en ellos. Él sintió una presión en su pecho, su respiración agitada lo dificultaba concentrarse y cuando menos se dio cuenta de sus ojos comenzaron a brotar lágrimas.
El pelinegro llevo una mano a su rostro acariciándolo ─No llores.─ le dijo acercándose a el apoyando ambas frentes juntas ─Aquí estoy ahora.─ susurró cerca de sus labios.
─Basta por favor.─ sus piernas temblaban ─Hemos pasado la línea.─ susurró chocando sus respiraciones.
─Aún así no es suficiente.─ rozó su nariz con la de él provocando una electricidad que recorrió todo su cuerpo ─Necesito más de ti.─ junto de nuevo sus labios en otro beso, pero en uno más lento y suave con movimientos provocativos. Antes de poder separarse de nuevo mordió su labios inferior dejando escapar un leve gemido por parte del chico ─Te necesito como tu me necesitas a mi.
─Yo...─ el menor susurro con la respiración entrecortada, sintiendo como las manos del mayor comenzaban a acariciar lentamente su cuerpo ─Itachi...
Pero el pelinegro ya dejó de escucharlo para ese entonces, agarrando de la cintura suavemente al castaño y subiéndolo a su regazo con mucho cuidado, cambiado así las posiciones. El mayor comenzó a besar su cuello con suavidad escuchando los pequeños suspiros que soltaba el menor cada tanto, mientras apretaba fuertemente los hombros del mayor.
─Ayato.─ susurró en su oído, haciendo que el menor se estremezca y comience a negar con la cabeza ─Por favor.─ pidió el pelinegro, apoyando su cabeza en el hombro del menor y haciendo que este se sorprenda al ver como salía una lágrima de sus ojos.
─¿Itachi?.─ la suave voz de Ayato hizo que levante la cabeza para verlo directamente a los ojos, ambos pudieron notar en la mirada del otro lo mucho que se deseaban aún sabiendo las consecuencias de esto, ese momento fue el cual ambos tenían que luchar contra sus impulsos y guardar sus corazones pero ya era demasiado tardé, con una mirada finalmente habían entendido que debía ser así y que no podían más con esto. No podían prohibirles a sus almas esconderse como antes.
Los besos se volvieron apasionados, mucho más de lo que habían sido antes, las manos de Itachi finalmente bajaron hasta acunar al menor entre sus manos, haciendo que este suelte un leve gemido. Las manos de Ayato se encontraban enredadas en el pelo de Itachi, de vez en cuando acariciando estos. Para cuando se dieron cuenta ambos se encontraban frotando el ser del otro, necesitando aquello que por tanto tiempo se habían obligado a reprimir.
-¡ITACHI!- una voz se escuchó del otro lado de la puerta, después esta comenzó a ser golpeada ferozmente y si no hubiese sido porque cuando entraron le habían puesto cerrojo, ahora alguien ya los hubiese descubierto por completo.
Lentamente se comenzaron a reincorporarse del suelo donde ambos habían quedados acostados, él pelinegro por encima del menor donde vio como el cuál estaba con el pelo castaño completamente desordenado, una fina capa de sudor en todo su cuerpo, los ojos cristalizados y los labios rojos e hinchados por tantos besos, para el pelinegro esa escena era simplemente hermosa a sus ojos.
Los gritos comenzaron a sonar cada vez mas atronadores sacando a Itachi de sus pensamientos, mirando desde arriba a Ayato, el cuál seguía jadeando por aire en el suelo, había una marca de beso en el lado izquierdo de su cuello, por arriba de la clavícula. El castaño miro al mayor, pero enseguida un terror invadió su expresión dejando confundido al pelinegro.
─No puede ser...
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❨Author's note❩
Bueno antes que nada quería agradecer a sasukemhyn por ayudarme con esta escena tan linda por mi parte.
Ahora si quería decirles que puede que algunos no entiendan bien de qué va a la trama, sólo puedo decir que a través de los capítulos más van a ir entendido de a poco. No desesperen.
