Aitana
Fue increíble, fue como una película de Disney donde la princesa se despierta con el beso de amor verdadero. No sé exactamente qué ocurrió pero en cuanto mis labios tocaron o los de Luis, los recuerdos empezaron a llegar uno de tras de otro, como una película
-¿cómo fue cuando me dijiste que me amabas?- pregunto Luis emocionado-
-estábamos en mi habitación, habíamos discutido, por qué tú había estado reunido con una compañera toda la tarde haciendo un trabajo de la universidad y no me cogiste el teléfono yo no te creía que no había pasado nada, tú estabas muy cabreado porque yo te estaba acusando y tú me dijiste "¿acaso no te a quedado claro que solo te quiero a ti?" Y yo te respondí "¿y no te queda claro que yo a ti no te quiero?, yo te amo y si te pierdo me muero", y tú besaste y me dijiste que también me amabas y me aseguraste que no había pasado nada con la chica y me prometiste que nunca te iba a perder- termine de relatar y él tenía lágrimas en los ojos-
-¿Segura que eso no te lo han contado las chicas? - preguntó aún con lágrimas cayendo por sus mejillas y con una sonrisa-
-Segura mi amor - respondí con una sonrisa- Ah y también recuerdo nuestro primer beso y tengo dos comentarios- dije decidida-
-¿cuales?- preguntó limpiándose las lágrimas-
-primero, la tía esa me tenía hasta la polla, por supuesto que estaba celosa, tú eras mi chico, así en ese momento no había pasado nada tú eras mío... Eres mío y te recuerdo que estábamos bien, hasta que llegó esa tonta y parecía un pulpo, toqueteándote todo y tú de lo más contento... Como querías que me pusiera! - dije entre alterada y graciosa-
-yo no estaba contento, ya estaba apartando - trate de defenderme-
-si como no! - respondí mirándolo mal-
-¿y lo segundo?- preguntó -
-no sabía que contabas tan bien las historias, quiero decir, mientras me la contabas lo hacías tan bien que podía imaginármelo todo peor ahora que lo recuerdo de verdad que lo cuentas a la perfección- respondí feliz y lo abrace-
-que bueno tenerte de vuelta mi amor- me dijo en el oído-
-que bueno volver cariño- le respondí dejando un beso en su mejilla-
-¿ya puedo volver a llamarte mi novia?- preguntó con esperanza en los ojos-
-¿alguna vez no lo hiciste?- pregunté haciéndome la ofendida-
-pues lo evitaba para no quería agobiarte- respondió-
-ya puedes volver a hacerlo- respondí emocionada- ¿sabes qué no puedes volver a hacer? - dije fingiendo seriedad-
-¿qué?- preguntó sin entender-
-ni se te ocurra, nunca, volver a llamarme tu ex novia- respondí sería y el río- En ese momento no lo entendí tanto, pero ahora estoy muy cabreada por eso! ¿Cómo pudiste hacerlo?- Respondí-
-lo siento cariño, no quería ponerte en una posición extraña para ti, yo era un extraño!- explicó-
-era muy extraño, porque no te conocía, pero nunca te sentí como un extraño y mi cuerpo te buscaba todo el tiempo- confesé -
-eso me encanta!- confesó el-
Estuvimos allí hasta que ya era muy de noche, la gente se empezaba a ir y empezaba a hacer frío. Teníamos mucho de qué hablar, mucho que recordar y muchos besos que dar.
Después volvimos a casa, me sentía increíble, como si hubiese estado viviendo un sueño, de alguna manera uno lindo la verdad porque volví a conocer a mis amigos y al amor y volví a enamorarme del amor de mi vida, además de darme cuenta de primera mano lo buenos que son todos, lo mucho que me quieren y me cuidan. Peor ahora desperté, desperté por fin
-ahora entiendo porque solo me sentía a salvo estando contigo- dije una vez estuvimos en el coche ya de camino a casa-
-¿porque?- preguntó sin entender-
-pues porque eres el amor de mi vida Pedrito, porque yo siempre e sabido que sin importar nada tú me protegerías y aunque mi mente no lo recordaba mi cuerpo si y sólo podía sentirse seguro estando contigo- le explique-
-cariño- me dijo poniéndose un poco más serio y aparcando el coche ya en el casa-
-¿qué pasa cariño?- dije acariciando su mejilla-
-quiero pedirte perdón por haberte echo eso, fue mi culpa el accidente y es algo que nunca voy a poder perdonarme- me dijo apenado-
-no tengo nada que perdonarte mi amor, fue un accidente, no era algo que pudiéramos planear o impedir. Además tú no estás conduciendo imprudentemente, estabas haciéndolo bien, no ibas a gran velocidad, pero el clima y la carretera no ayudaron... De verdad no quiero que te culpes más- le expresé-
-vale- respondió un poco desganado y bese sus labios-
-te amo- le dije mirándolo a los ojos-
-yo te amo más- me dijo con una sonrisa-
Salimos del coche y subimos a nuestros pisos, obviamente quería dormir con Luis, pero quería contarle a los chicos que ya había recordado, por suerte todos estaban reunido en el mío.
No quería hacerlo de cualquier manera, así que fingí que nada había pasado
