capítulo dos

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𝐒𝐡𝐢𝐤𝐚𝐦𝐚𝐫𝐮 𝐍𝐚𝐫𝐚

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Llegue a casa empapado hasta los pies. Suspire y comence a rezar en silencio para que mi madre estuviera en su cuarto y no me viera en este estado, me ahorraria un buen sermón de su parte en tal caso.

— ¡por Dios Shikamaru!, ¡estas empapado! ¿que pasó, y tu paraguas?—mi madre me observo preocupada, solte mi cabello para que se pueda secar mejor, ella desaparecio de mi vista un instante y luego me la arrojó a la cara, furiosa —¿y bien?

Volvi a quejarme en mi mente, jamás entendere como las mujeres pueden ser tan bipolares —que fastidio, se lo di a una chica para que pudiera ir a su casa — comencé a pasar la toalla por mi rostro y fue entonces cuande note un conocido par de zapatos extras en la entrada. Senti el coraje subirme a la cabeza y mire a mi madre con descontento —...¿que hace él aqui?— ella comenzó a hacer un gesto de suplica, seguramente pidiendo que la perdonara.

— es tu papá Shikamaru — madre intento tomar mi mano pero no pude evitar sentirme traicionado por su acción y sus palabras. Hice la mano a un lado.

— era mi padre hasta que decidió abandonarnos por otra familia — me adentre más en la casa hadta llegar a la cocina, el olor a cigarrillo me hizo toser avisando de mi presencia, mi querido padre se encontraba allí y su forma de mirarme no era buena en absoluto.

— hasta que te dignas en aparecer, ¿donde te habías metido?, ¿sabes cuanto ayuda necesito en el refugio y tu solo te la pasas en la calle? — frunci el entrecejo ¿y todavía se atrevía a venir a nuestra casa y restregarme en la cara lo que el consideraba vaguear?, es verdad que me encantaba dormir, admirar las nubes y disfrutaba la tranquilidad pero yo era cualquier cosa menos un vago.

— estaba en la biblioteca estudiando para mi examen de admisión — dije con seguridad a lo que mi padre chasqueo la lengua.

— ¿y sigues con eso? te e dicho miles de veces que esa estúpida carrera tuya como abogado no te llevara a nada —  dedici controlarme para no empezar una discusión, más que nada por respeto a mi madre y porque sus palabras, incluso después de años de desprecio seguian afectandome en ocasiones. Mi familia llevaba el control de un gran refugio de ciervos desde hace décadas y él espera que yo siga sus pasos. Amo el refugio con todo mi corazón pero no es lo que quiero para mi ni para mi madre, quiero algo mejor.

— ¡ya basta los dos!, ¿que acaso no pueden estar en la misma habitación sin pelearse? — ella entró en el comedor notoriamente molesta — ve a bañarte ahora Shikamaru y tú Shikaku ¡largo de aquí!

— !siempre te pones de su lado¡ ¿ahora entiendes porque te deje? venir aquí fue realmente una perdida de tiempo — padre se levantó de la mesa molesto, tomo su chaqueta y salió de la casa dando un portazo que hizo asustar a mi madre.

【Freak】  𝕊𝕙𝕚𝕜𝕒𝕞𝕒𝕣𝕦 ℕ𝕒𝕣𝕒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora